Amada por un hombre Peligroso

Capítulo 54 dejando de soñar

Su pelo largo de Barbie natural sus ojos negros con tachas blancas al igual que los míos su sonrisa sus labios pequeños era ella mi madre y estaba describiéndola mentalmente pero la tenia en frente

- mamá?- sorprendido y confundido repliqué

- hijo estás grandecito y guapísimos como siempre-

-no pudo evitar sonreír por él comentario de su madre

Por primera vez después de tantos años volví a ver a mi madre y seguía hermosa como siempre -sin previo aviso la abracé y ella no dudo en corresponderme

Pero luego tenia que irse y yo no debia permitir eso la había extrañado mucho y no podía dejar que se fuera así nada más

- mamá a donde vas ?- pregunté siguiéndola pero ella me detuvo

- adiós hijo tengo que irme ya mi tiempo expiró -

- llevame contigo - supliqué

- no hijo como crees todavía te queda mucho además en casa alguien te espera -

- quien?- dije confundido

- ella - señaló a una chica pequeña de estatura cabello largo de Barbie ,hermosa con unos ojos grices tenía un vestido blanco puesto que dejaba ver sus hermosas piernas

Lo único que se me ocurrió y llegó a mi mente fue PERLA ella me sonrió y mi madre también lo hizo antes de desaparecer como rayo del cielo

- perla - pronuncié haciendo puño y sentí bajo mi mano una manta y observando mi alrededor todo me parecía nuevo y muy diferente a donde me encontraba mis ojos se sentían pesados quería saber que hora era -como pude levanté mi muñeca esperando ver mi reloj automatizado pero no mire hacia mi derecha y ahí se encontraba ella incómoda tratando de encontrar una manera para quedar cómoda -giro pero no funcionó sus piernas estaban guindando sobre él sofá y por su vientre y la incómodidad le era difícil estar quieta y dormir en paz - como pude me quité todas las cosas que estaban conectadas a mi cuerpo y con una mano en mi zona afectada baje de la camilla me acerque a ella y la observé una manta se encontraba en él borde del sofá apunto de caerse la tomé y también tomé la almohada de mi camilla la puse bajo bajo su cabeza y acomodé sus piernas y con la manta ma cubrí - ella acomodó su cabeza y siguió durmiendo

Volví hacia la camilla y sin querer tropecé con ella haciendo un poco de ruido giré y la miré -ella movió la cabeza pero no despertó él aliviado giro ,quería darle un beso en la frente pero sentía dolor cuando intentaba a bajarse un poco más de lo que podía

Entró alguien en la habitación era un joven alto él mismo que estuvo conversando con perla hace tiempo

- podía llamar a mi enfermera - pregunté viendo al joven

- lo siento señor pero su esposa no ha permitido que tenga enfermera ella se ocupa de usted - dijo el joven cortésmente

Me sorprendí y gire a mirarla -ella estaba profundamente dormida pero esta vez si estaba cómoda una leve sonrisa salió de mis labios imaginándomela celosa

- necesita algo o quiere....- lo interrumpí

- no,no todo está bien gracias -