Locuras en Seúl

Aterrizaje Forzoso

Martes,28 de enero de 2020

Hola soy Ángela,estoy aquí en el aeropuerto, en un nuevo país,en una nueva ciudad, Seúl. Totalmente perdida, sin batería en el teléfono y sin saber coreano. Pero ahí estaba yo. Para entender como llegue ahí retrocedamos una semana.

Martes,21 de enero de 2020

Ese día empezó como otro cualquiera, o eso pensaba, lo que me refiero a un día normal es levantarse por las mañanas con los típicos gritos de tu madre, que cada dos por tres, saca la misma conversación"¿Cuándo me voy a ir de mi casa?"No es que no me quiera , o eso creo, solo que está tan o incluso más desesperada que yo, porque no conseguía trabajo. Después de una larga búsqueda enviando mi curriculum a un montón  de puestos de trabajo, a los que pensaba que ninguno de ellos me habían aceptado. Digo pensaba porque al final me habían contratado. Me entere por una carta que me había llegado a casa. Decía:

Querida Ángela:

 Queríamos decirte que la empresa MIC te ha contratado para trabajar en nuestra nueva tienda de ropa "F y S" . Situada en Seúl. Por eso le dejamos aquí un billete de avión y el lugar donde se alojará en todo el tiempo que este trabajando allí. Siento decirle que por causas de la empresa no eh podido comunicarme contigo antes, por eso estará programado el 28 de enero.Más adelante avisaremos de sus horarios para que pueda empezar a trabajar lo antes posible.

Atentamente, MIC.

Así es como llegue aquí, con el equipaje a mi lado sin saber a donde dirigirme. Decidí salir del aeropuerto, por suerte había muchos taxis y utilizando un poco de mi inglés pude comunicarme con el taxista.

-Hola podría llevarme a este hotel- dije en el mejor inglés posible sin que pareciera una inexperta totalmente perdida.

-Tía, pero ¿tu no eras la nueva de la MIC?- respondió el taxista en español haciendo que quedara como una completa estúpida-Bueno creo que estás bastante perdida, amiga-dijo en tono de burla- No pasa nada, ahora te llevo al hotel-

-Muchas gracias- decía muerta de vergüenza por la situación totalmente inmovilizada.

-¿Que pasa? ¿Piensas quedarte ahí parada? -dijo riéndose mas de mi, aunque agradecía sus palabras que hicieron que saliera de mis pensamientos

-Si, ya voy- dije riéndome con el por la situación tomándola con humor.

Al decir esto él salió del coche para ayudarme a meter el equipaje en el maletero y después me senté y nos dirigimos hacia el hotel. Del aeropuerto hasta el  hotel era una distancia bastante larga, y al principio el silencio era un poco incómodo. El taxista decidió encender la radio del coche y justamente sonaba la canción de mi grupo favorito Got 7 y la canción era "Just Right"..

-¿Te gusta la canción,no?-Lo preguntó mirándome por el espejo.

-¿¡c-como lo sabes?!-pregunté asustada pensado que me habia metido en un coche con un psicópata que me espiaba.

-Jajaj-Se empezó a reir-No pienses que te espío o algo así, creo que no te diste cuenta que la estabas cantando.

-Ah perdón - Y empece a reírme con el- Bueno ya que creo que nos espera un largo viaje,como ya sabes algo de mi, deberías decirme algo de ti.

-Bueno...pues me llamo Alex, soy de Argentina y tengo 24 años y claramente como tú trabajo para la MIC, aunque yo no tengo mucha idea de moda pero si que sé cosas de empresas y de como invertir el dinero y también soy bueno en la informática- me responde con una sonrisa y seguridad.

A decir verdad y mirarlo detenidamente era bastante atractivo y con aspecto joven, parecía una persona divertida y un poco Friki ,lo que le hacía ver mas amigable. 

-Bueno creo que ya sabes como me llamo, pero igualmente me presentaré, me llamo Ángela y soy de España y me gusta la moda, por eso estoy aquí, tengo 22 años... y.. no se que decir, pero creo que sabes más de mi de lo que pienso-Digo en un tono tranquilo aunque con miedo.

-Será porque tenía que ir a buscarte y no sabía quien eras, así que claramente me dieron información sobre ti. Bueno ya vamos a llegar y ha sido un placer hablar contigo,ah toma mi número, creo que estas demasiado perdida-Empieza a reírse y me da su número de telefono.

Me despedí de el y cogí mi equipaje para entrar en el hotel y dejar todas las cosas preparadas.Entré, ese lugar se veía muy lujoso y bastante caro.Todo estaba impecable, parecía nuevo. Una chica aparentemente asiática, suponiendo que sería coreana se acercaba hacia mi, y como llevaba ese uniforme, tenía que ser una de las personas que trabajaba en el hotel.

-Perdone señorita, ¿Es usted Ángela?-Dijo con un increíble nivel de inglés.

Yo seguía mirándola y metida en mis pensamientos, hasta que me di cuenta que hizo un gesto dando a entender que quería que le respondiera. 

-Si, perdón, soy yo Ángela.-Hoy era un día en el cuál no estaba dando muy buena impresión. 

-Perfecto, aquí tiene la llave de su habitación en la que indica su número,ah y también un mapa de nuestras instalaciones. Si tiene algún conflicto o duda dígamelo e intentaré ayudarle.

Así después de esto me dirigí a mi habitación indicada, al entrar en el ascensor me di cuenta la cantidad de pisos que tenía este edificio y por el número que indica, debe de estar en una de las plantas mas altas. Al llegar a la planta me di cuenta que era la equivocada, mi cara que tenía una sonrisa fue intercambiada por un suspiro y acabe subiendo  de nuevo al ascensor. Así sucesivas veces porque no tenía ni una maldita idea del coreano. Después de unos 10 o 15 minutos, por fin llegue a mi planta y lo que tenía ganas de hacer era tirarme en la cama. 

Abrí la puerta de mi habitación esperando que no tuviera mas problemas en este día,pero como no este día aun no había acabado, ya que me encontré a otra persona en mi habitación y ahí estaba el, el taxista, Alex. Acostado en la cama, ¡En mi cama! Me acerque a el con toda fuerza que me quedaba después de lo que me cansó el ascensor y le grité.

-¡Esa es mi cama! ¿¡QUE HACES AQUÍ?! Sabes lo que eh tardado en llegar hasta aquí,¡ ese ascensor esta maldito!-Digo enfadada.

El me miró y se empezó a reír como loco por todo lo que le dije-Se que hay muchas leyendas en Corea pero lo del ascensor maldito no existe.-Dice haciendo burla-¿Pero no sabias que compartíamos habitación?

Y me quede  pensando en lo que decía y con pocas ganas de resolver problemas, así que decidí tirarme directamente en la cama que había al lado, esperando a que me hubiera quedado desmayada en el ascensor.