En donde Emmett Cullen, recibiendo consejos de sus familiares humanos, intentará conquistar a la persona que le gusta.
O
En donde Elliot recibe figuras de acción junto con notas pegados en su casillero.
{Te recomiendo leer Coffee, Galletas y labiale...
Elliot arrugó el ceño, cabreado, molesto, al ver en la puerta de su casillero otra nota pegada, sumándole al lado de éste, un muñequito del hombre araña pegado con cinta scoch.
Mucha cinta Scoch.
Gruñó fastidiado, agarrando la nota de mala gana, para leerlo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
》Está bien... fui un idiota.
Mi madrastra me arrojó café insultándome en su idioma por haber puesto eso.
Y si.
Tiene razón.
Así que comenzaré otra vez... con tres simple palabras.
Me gustas mucho.
Pd: te dejo un Spiderman como disculpa.《
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Elliot bufó molesto e incómodo al tener todas las miradas sobre él y el hombre araña, que sigue pegado en la puerta de su casillero.
—Esto es ridículo...— masculló con la mandíbula tensa, agarrando a la figura de acción y metiéndolo en su mochila.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Muy bien... lo hiciste bien.
—Gracias... creo...— murmuró incómodo al tener la mirada fulminante de la morocha, que comía una galleta que le trajo la novia de Jasper.— ¿No me vas arrojar más café no?
—Si te portas bien, no Emilio.— habló saboreando su galletita.— Ahora... pon atención y escribe esto...
Emmett asintió con la cabeza y prestó atención a lo que su madrastra le decía.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.