Capitulo 1 "Que comience el show"

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Effie
Voy en mi coche rumbo al departamento de Cinna, ahí nos reuniremos con Portia para ajustar los últimos detalles del viaje al distrito doce para el comienzo del Tour de la Victoria. Por fin veré a Haymitch lo he extrañado tanto y me alegra que el tiempo de espera fue más corto. En el trayecto observo como en el Capitolio todo es glamour y estar a la moda pero preferiría mil veces usar ropa común sin tanta ostentosidad y ser libre para amar con libertad.

— Cinna, Portia, ¿todo está listo? Acaba de avisar el portero que el auto que llevará la ropa está esperando abajo — les anuncio.

— Todo está listo — responde Cinna. Mientras Portia y él salen con los racks con rueditas donde llevan todos los vestuarios de los niños colgados y guardados en elegantes portatrajes.

Mañana saldremos a primera hora del día y todo lo relacionado con el equipaje se debe enviar con antelación. He mandado junto a mis cosas algunos paquetes con nuevos materiales de arte para Peeta, él es un excelente pintor y no me costó nada encontrar su talento. Lo difícil fue Katniss pero de ella se encargó Cinna, e igualmente todo lo relacionado con su talento es Cinna quien se encarga de sus materiales.

Desde que regrese al Capitolio me he mantenido en contacto con Peeta. El pobre ha esto muy decaído por lo sucedido con Katniss. Me contó que ha intentado arreglar las cosas pero no tiene suficiente valor para volver acercarse a ella. Le he aconsejado que durante el Tour podría hablar con ella, con todo el tiempo que tendrán que pasar juntos será un buen momento para aclarar lo sucedido y al menos intentar ser amigos.

Estoy tan distraída que cuando escucho a Cinna anunciar que la cena está lista doy un brinquito del susto. Cenamos tranquilamente y conversamos de cosas triviales y sin importancia solo para pasar el rato. Entre la plática Cinna recibe una llamada que cuando vuelve a sentarse a la mesa parece preocupado.

— ¿Pasa algo? — pregunta Portia al ver el rostro serio de Cinna.

— mmm... chicas ahora que vayamos a los distritos les pido que vean lo que vean guarden la calma. Plutarch me acaba de avisar que la situación en algunos distritos es inestable y que era mejor que estuviéramos prevenidos, especialmente tu Effie.

—¡¿yo?! — me sorprendo. Se que soy un poco exagerada y hasta dramática pero no es para tanto.

— Si. Cuando escribas las tarjetas no se deben escuchar lastimeras hacia los tributos fallecidos, también debes incluir lo romántico de la historia de nuestros chicos ya que eso es lo que más se debe de ver en ellos su gran amor, hay que justificar sus hechos ante los distritos.

Gran amor, gran amor, ¿Cual amor? Si ahí solo hay amor por parte de Peeta, y Katniss bueno ella tal vez si le ama pero no se permite sentirlo, y la entiendo darse esa libertad es un riesgo.

Portia y yo nos quedamos a dormir en casa de Cinna para ahorrar tiempo. A las seis de la mañana los equipos de preparación y nosotros estamos en el tren rumbo al distrito doce. Estoy muy nerviosa de lo que pueda pasar en el Tour de la Victoria las órdenes son claras debemos crear una buena función que calme a los distritos y sobre todo que crean en el profundo amor de nuestros chicos.

Al medio día al fin arribamos en el distrito doce. Al bajar del tren todos quedaron sorprendidos de las condiciones tan pobres del distrito. Es que una cosa es verlo por televisión donde te ponen lo mejor del distrito y otra muy distinta ver la realidad, la gente hambrienta y enferma, las casas pequeñas y viejas, nada en absoluto se parece a las grandes comodidades del Capitolio.

— El distrito es muy... — dice Portia mientras observa todo a su alrededor con tristeza.
— Pintoresco — respondo tratando de evadir el mal momento. — vamos, vamos que los chicos nos esperan — digo con fingido entusiasmo.

Los equipos tienen dos horas para dejar a los chicos hermosos para la entrevista que dará comienzo al Tour. Mientras todos están ocupados me escapo a la casa de Haymitch, lo extraño tanto que no puedo resistir un minuto más.

— ¿Haymitch? — avanzo lentamente por la casa, después de entrar por la puerta trasera. La casa está en total silencio, no se como le hace que apenas voy saliendo de la cocina cuando él aparece de repente y hace que pegue un gritito del susto. — ¡No vuelvas a hacer eso Abernathy!

— si, si, yo también te extrañe Trinket — dice con sarcasmo.

— Lo siento cariño. Te extrañe demasiado — le doy un beso para relajar el ambiente de nuestro reencuentro. — ¿y como has estado con tus nuevos vecinos? — pregunto en broma.

— Perfectamente. Helen es una excelente vecina y sus comidas son deliciosas — contesta entusiasta.

— ¿Helen? ¿Ya no es la señora Everdeen? — la mención tan amistosa que hace de la madre de Katniss enciende mis alarmas.

— ¿Celos preciosa? — contesta con una risita burlona.

— No. Como normalmente eres tan asocial pensé tardarías más en llevarte bien con ella.

— Me repites hasta el cansancio que debo ser amable con una dama y ahora te quejas de que me lleve bien con mi vecina.

— No es eso, es que...

— basta de chacharas princesa, supongo que no viniste a ver qué tal me llevo con mi vecina. — me interrumpe con voz provocativa y me encierra entre sus brazos y el comedor de su cocina.

Al principio solo nos damos un beso suave pero ambos hemos sentido la falta el uno del otro que cuando soy conciente estamos en un vaivén de pasión sobre la mesa del comedor.

— Alguien podría venir Haymitch— digo entre jadeos.

Él no contesta nada y simplemente me lleva cargada hasta una de las habitaciones. Su cuerpo me envuelve en un torrente de sensaciones y al toque de cada una de sus caricias me doy cuenta que no hay nada mejor en este mundo que dos almas que se aman siendo un mismo ser. Suspiros de placer es lo único que hay en este momento perfecto, en el que solo existimos él y yo, en el cual somos libres para amarnos.

Me levanto de la cama apresurada y despertando a Haymitch, solo quedan veinte minutos antes de que comience la entrevista. Me arreglo la ropa y vuelvo a retocarme el maquillaje en tiempo récord. En solo diez minutos estoy entrando a la casa de Katniss por la puerta trasera.

Los equipos de camarógrafos están listos en ambas casas. Portia dirigirá las cosas en casa de Peeta y yo me encargaré de todo con Katniss.

— Tenemos un horario que cumplir, ¿todos listos?
Una pequeña entrevista sobre el talento de los nuevos vencedores y las vistas de su trabajo, y todo la grabación de interiores esta terminada.

— ¡Atención, todo el mundo! Estamos a punto de grabar el primer plano de exteriores, donde los vencedores se saludan al principio de su maravilloso viaje. Bien, Katniss, gran sonrisa, estás muy feliz, ¿verdad? — se que mi entusiasmo es abrumador pero si queremos que todo salga bien la felicidad debe fluir ante las cámaras.

Sonrisas, abrazos, una caída inesperada y para culminar la entrada un tierno beso. Los nervios me invadían pero lo han hecho bien, si no saben a lo que se enfrentan al menos lo intuyen porque actúan como toda una pareja de enamorados.

El día se va en un santiamén. Ir a la estación, la despedida del distrito, el tren saliendo y al final una rica cena con todos a la mesa. He terminado agotada pero apenas todos se van a sus habitaciones me escabullo al compartimento de Haymitch.

He vuelto!!! Este capítulo es un poco corto pero espero y lo disfruten. 🥰🥰🥰

Carbón y Perlas: El fuego de la victoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora