capitulo dos

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𝕃𝕒 𝕙𝕚𝕛𝕒 𝕕𝕖𝕝 𝕔𝕒𝕡𝕚𝕥𝕒́𝕟 𝕃𝕖𝕧𝕚
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TN regresaba a casa. Su padre seguía en aquella base militar, estaba decidida a preguntar por aquel matrimonio arreglado. Llegó Levi con sudor en su rostro después de la larga caminata que tubo después del trabajo, entro en su casa, observo, TN estaba dormida en una silla. Le ganó el sueño.

En la mañana TN se despertó cómo de costumbre, los rayos de sol tocaba su rostro, un olor a metal invade sus fosas nasales. Aún puesta su pijama salió de su habitación, la sala, cocina y habitación de su padre estaban intactos. Salió de su casa encontró sangre esparcida por la entrada de su casa, también estaba su padre aparte otra persona, un policía militar.

–¡¿Que sucedió?! –Pregunto TN

–Una masacre. –Contesto el policía. –Este es un estafador entre los barrios ricos lo han mutilado.

–Nadie sabe que pasó, solo se sabe que era rondado la media noche. –Dijo Levi. –la sangre está seca, pero apesta a metal, también las marcas de la sangre esparcida deja que es un asesino en serie.

Preocupante. Un cadáver mutilado al frente de tu casa no se ve todos los días, nuevamente fue a hacer el mismo trabajo que del día anterior, vigilar a "su pretende" aunque era guapo, varonil, con un increíble físico y tal vez un enorme paquete oculto entre su ropa interior, no se dejaría llevar fácilmente.

Las primeras horas pasaron rápidas tras la plática que Eren y TN mantuvieron, tenía mucho en común. Eren por su parte estaba seguro que su química era inmediata, sin decir que no tardaría en dar su "libertad" por decir así decirlo.

TN reía porque Eren contó una anécdota divertida. –Bueno, ¿dime porque terminaste en esta celda?

–No es importante, solo hacia trabajo. –Dijo Eren. El ambiente se puso tenso, ninguno de los dos dijo nada. Se acabó la conversación. TN fue nuevamente a su puesto.

Esa duda aún quedan en su mente de TN ¿Eren será su prometido en realidad?, Se decía pasando segundo tras segundo, minutos y horas. Llegó la hora de la comida, se alimento, no vio a su padre esa tarde. Estaba en una reunión muy importante entre los mayores en la milicia, fue a llevarle alimento a Eren por petición de los altos mandos nuevamente.

Se sentía rara y diferente la presencia de Eren a la de los demás hombres, TN no sentía la preocupación de hacer algo malo e indebido con Eren como normalmente la iglesia les había inculcado, como según la iglesia Dios dijo que después del matrimonio llega aquella etapa en la que el hombre se uniría a su mujer y vivirían juntos.

No quería decepcionar a su padre, ni vivir con el temor que alguien escucho o vio lo que por su parte era malo y, acudiera a la iglesia, todos le temían a la iglesia porque aparte de ser consejero del rey, también tenía el poder de matar a una persona si se sospechaba que tenía pactos con lo oscuro o no hacia alguna ley.

La jornada de trabajo de TN acabó, regreso a su pequeña casa. Ese día le pagaron a todos de la legión, su padre no ganaba mucho, pero ganaba  lo suficiente como para comer. Su casa apestaba por la sangre, la policía militar se llevó los restos del cuerpo, sin embargo, olvidó que el olor metálico de la sangre olía horible después de mucho tiempo, echó un balde de agua y empezó a barrer. Olía menos que antes, era bueno.

Se dio un baño a jicarazos, paso por su cuerpo una esponja. Se sentía relajante después, se puso aquella bata que utiliza como pijama, la puerta de entrada hizo un sonoro sonido. Pensó que era su padre que había regresado furioso, fue a aquella sala que se suponía que está su padre.

Camino por aquel pasillo oscuro, la única los que había era la lámpara de aceite que llevaba en manos, reviso la habitación de su padre. Ahí estaba durmiendo en una silla como siempre, tal vez llegó cuando se estaba dando un baño, pero porque se escuchó el azotar de la puerta. Un grito ahogado afuera de su casa se escuchó, de inmediato Levi se despertó y TN corrió hacia la entrada de su casa. Sangre fresca escurría por el piso de su casa. Una nueva escoria silenciosa apareció. Y tenía como fetiche echar los cuerpos aun frescos en su casa.

Levi salió, su hija estaba quieta como una piedra, estaba impactada. –¿Estás bien? –Dijo el mayor, ella solo asintió. –Oye después lo limpiamos, el asesino aún podría estar merodeando por el lugar. –Dijo y se metió a su morada, segundos después fue TN.

Ninguno de los dos Ackerman durmió esa noche. TN por miedo y Levi por si entraste el asesino y quería herir a su hija, solo el ladrar de los perros y algunos borrachos que merodeando por cualquier calle. No volvieron a escuchar ningún ruido fuera de lo normal.
Domingo por la mañana día en el que TN asistió a la iglesia, todos debían ir. Por mandato de la iglesia que era igual de importante que su líder, la reina.

Eren lo traían a rastras la policía militar, seguramente para que un sacerdote le predicara y se arrepintiera. Aunque sabían que eso nunca suspendería. Se notaba en sus cadenas no le quedaban, es más eran mucho más pequeñas, su cabellos castaños estaban sueltos y sus seño fruncido, este se alivianó cuando vio a TN. Ella no se declaraba hermosa ni tan fea, pero a ese hombre se notaba a kilómetros que deseaba a esa chica. No solo la deseaba, quería ser el único hombre que tocará esa piel que se encontraba debajo de sus ropas y ser el único en los ojos de ella.

–Bien mal nacido hijo de puerca, ve y confiesa tus pecados al cura y nos vamos, porque un traidor como tú no deberían estar en un lugar santo y sagrado como esté. –Dijo fríamente aquel hombre.

TN sintió remordimiento de no poder proteger a aquella alma incomprendida. Sabía que era prohibido su amor, que algún día le cortarían la cabeza a Eren y ella seguirá su vida con un hombre con el cual sabe que no será feliz.

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𝕃𝕒 𝕙𝕚𝕛𝕒 𝕕𝕖𝕝 𝕔𝕒𝕡𝕚𝕥𝕒́𝕟 𝕃𝕖𝕧𝕚
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La hija del capitan LeviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora