Era sábado por la tarde y mis dos mejores amigas y yo esperábamos este día desde hace meses. Había llegado el día de ver a nuestros cinco ángeles.
Conversación yo- Esther (WA)
Cristina: ¡Esther! Que ilusión, ya ha llegado el día y me va a dar algo…
Esther: A mí también, se me va a salir el corazón de tantas ganas de verlos.
Cristina: ¿Ya has llamado a Noelia?
Esther: No, aun no. Llámala tú, por favor.
Cristina: Vale la llamo y la digo que si quedamos en tu casa para prepararnos para la firma y el concierto, ¿verdad?
Esther: Si, mientras voy a intentar decidir haber que me pongo. Adiós princesa.
Cristina: Adiós preciosa.
Yo había hablado ya con Noelia y me había dicho que para ir a casa de Esther la pasara a buscar a su casa y así lo hice.
Llegamos a casa de Esther y ella todavía no se había decidido que ropa ponerse.
Esther: ¿Que me queda mejor este pantalón azul y esta camisa blanca o mis pantalones negros y mi blusa gris? ¡Es que no se que ponerme!
Cristina: Ponte lo que quieras mientras estés bien, pero vámonos ya.
Esther: Vale, vale que ya voy. Sí, me pondré el pantalón y la camisa.
Cristina: Genial ya estamos.
Noelia: Cristina a ti te quedaría genial con esa ropa mis zapatillas rojas, ten cógelas.
Cristina: Vale guay
Noelia: ¡Queréis terminar ya que vamos a llegar tarde!
Esther y Cristina: Ya estamos. Queríamos estar preciosas para los chicos.
