Like Water | Yoonmin

Capítulo IV

¿Tas bien?

—Yo también te extrañe mucho Tae

— Y bien ¿Qué sucede con tu madre?

— Ella está muy enferma, el doctor dijo que podría tener una enfermedad crónica.

— Oh, tranquilo Yoongi, ella estará bien, no tienes que preocuparte mucho. Además yo estoy aquí para acompañarte y ayudarte en lo que sea. Fue difícil separarme de tí en este viaje ¿Lo sabías?

— Lo se, para mi también lo fue, hemos estado juntos desde pequeños. Te quiero mucho Tae, gracias por tu ayuda.

— Bien sabes que lo hago porque yo también te quiero mucho "azuquitar"— sonrió agarrando tiernamente la nariz de Yoongi.

— Eres un..........

— Un pelele, malcriado y tierno jaja, hace años que no me lo decías, creo que ya lo extrañaba.

— Jaja, por lo que veo te hize mucha falta, pero bueno, te ayudaré con tus maletas para llegar rápidamente a casa.

—:—

Con Jimin

El castaño se detuvo y se escondió detrás de un enorme letrero de cosméticos y cremas. Averiguaría todo lo posible, aunque realmente no tuviera una razón específica para hacerlo. Pero ya estaba ahí, no tenía nada que perder. Poco a poco acercó su oreja aún más al letrero, logrando escuchar una pequeña parte de la conversación.

" — Bien sabes que lo hago porque yo también te quiero mucho azuquitar."

— Azuquitar ¿Por qué permite que le diga así? Ah, ese muchacho no me cae nada bien. — mira su reloj—Creo que mejor debería volver a clase. Mm.... Aunque dudo llegar a tiempo.

Se apartó rápidamente de el enorme anuncio y corrió con cautela para evitar que Yoongi lo descubriera. Durante lo que duró su camino hasta el instituto, su mente no quitaba la incertidumbre de saber quien era el muchacho que lo trataba con cariño. El tan solo recordar sus palabras hacían que su piel se enchinara y su rostro se tornara furioso.

— ¡Ahhh!........ — gritó— ¿Por qué demonios se tienen tanto cariño?

En cuanto dió un paso en el Instituto la campana sonó y a su vez un grito distraía a todos de sus asuntos, era Jungkook quien gritaba sin conseguir la atención del castaño.

— Jimin, he dicho que me esperes.

— Oh Jungkook— volteó y detuvo su paso— lo siento estoy algo distraído.

— Si, lo noté. Corrí mucho y mis pantalones se rompieron, me tomaron muchas fotos, pero no importa ya. Mi posterior es bonito y mis calzones también, de seguro mis fotos serán populares.

Ante la respuesta de Jungkook, Jimin no tuvo más que hacer, que reírse del altercado. Claro sin caer en la ofensa.

— Me encanta tu sonrisa, es muy bella— dijo el pelinegro rodeando la cintura del castaño con sus suaves brazos. A lo cual las mejillas de este enrojecieron.

Un incómodo silencio se formó entre ambos, parecía un escena de un drama coreano, el viento impulsaba sus cabellos, las hojas caían de los árboles, y el tiempo de repente se detuvo. Sería el momento perfecto para hablar de romanticismo pero Jungkook decidió no hacerlo.

— Cambiando de tema, sabías que vendrá un chico nuevo al Instituto

— No, ¿Por qué lo sabes y yo no?

— Me lo dijeron, al parecer viene de otro país, por eso se esparció tan rápido el rumor

— .........

— Bien......... Creo que, iré a casa pequeño. Te enviaré un mensaje en cuanto llegue, adiós.

—Ok, ve con cuidado, adiós— sonrió

—:—

— Hemos llegado Tae

— Hum, se siente bien este aquí — sonrió corriendo en dirección a la habitación de la madre de Yoongi.

¡Toc toc!

— Pasa hijo, la puerta está abierta.

— ¡Hola Omma!

— Taehyung hijo, qué sorpresa ¿Que haces aquí? ¿Cómo estás?

— Realmente bien Omma, vine porque Yoongi me dijo que estas muy enferma

— Oh, no le hagas caso, conoces lo dramático que suele ser.

— El siempre ha sido así, pero creo que esta vez no está exagerando. Después de todo, yo estaré aquí para ayudarlo y entregarte mucho, mucho amor Omma

— Eres un muchacho muy encantador Taehyung. Dime ¿Cómo está tu madre?

— Se encuentra muy bien, me dijo que te enviará saludos, al igual que mi padre.................Ahora iré con Yoongi, tu necesitas descansar Omma.

— Ve, y calmalo, tu compañía le hará bien. Descansa hijo.

— Descansa Omma.

Taehyung se levantó de la posadera de la cama, fue directo a la habitación de Yoongi, lo tomó del hombro y dijo que su madre ya estaba dormida. En respuesta tomó su mano y lo aló para darle un abrazo muy cálido y finalmente comentar.

— Debes estar muy cansado, puedes dormir en mi habitación, como en los viejos tiempos.

El rubio muchacho sonrió y saltó a la cama mostrando su cuadrada sonrisa que a todos gustaba. — Descansa Yoongi—

— Tu también Tae.

—:—

La mañana era sonriente y cálida al igual que Jimin quien caminaba por los pasillos del instituto buscando alguna distracción. Iba tan distraído que chocó con una persona que inmediatamente se apresuró a ayudarlo.

— Lo siento ¿Estás bien?