Recovecos de una mente rota

Estela de luz en el abismal vacio del alma.

Los inicios siempre son extraños, no percibes a una persona cuando esta te nota primero y te "aborda", Ella...
Ella, el amor de mi vida, lo supe en aquel momento en el que su tierna voz llego a mis oídos
-Hola Hastur.
Mi mente antisocial procesó la respuesta, tarde demasiado planeando una buena presentación para terminar respondiendo...
-¡Hey! H... hola Aby...
No recuerdo haber sudado tanto como ese día, pero vamos, esos ojos tristes que le daban un estilo muy hermoso a su rostro tupido levemente con pecas casi innotables, aquella tez Beige, aquellos labios sencillamente atractivos con un rojo carmesí tan radiante, una aguda y suave voz femenina que apacigua el alma...
-¿cómo te va? Hace años que no te veía...
-B...Bien, si ya ha pasado tiempo...
Siempre fui pésimo para entablar una charla pero ella no dejaba que me cohibiera en el silencio.
Paso tanto tiempo que cuando me di cuenta, ella era una nueva amiga, sus gustos y los míos eran casi iguales, su olor era muy agradable y su aura era tan tranquila que me hacia sentir en casa, seguro y tranquilo.
Ella solía ser una pequeña niña alegre, que ocultaba y soportaba mucho dolor, nunca note aquel dolor que la abrumaba incluso en el presente.
Ella me gustó, me gusto tanto que no dude en amarla, no sabía nada del amor y como se trata a una persona, al poco tiempo de amistad decidí declarar mi amor, en efecto todo fue perfecto, mi primer beso, la primera emoción de tener un amor, un Te quiero tan profundo y significativo que permanece en tu alma por siempre... y mi primer dolor.
No duramos mas que un par de días, mi incapacidad para tratar a las personas, mi falta de conversación, mi antipática forma de ser, aquel amor de mi vida se había convertido en mi primera tragedia amorosa, vi como se fue de mi lado, la indiferencia es comprensible pero no deja de doler, verla sonreír con otra persona es igual de doloroso, intente no pensar en ello...
Pasó un año y el destino nos junto de nuevo...
-Hola Hastur...
-Hola Aby, ¿qué pasó?.
-Perdón por todo lo qué pasó, no fue mi intención herirte.
-...
No la odie, en cambio cultive un amor por ella mas grande que el que tenia antes, no sabia que decir, quería decirle que la amaba, que es el amor de mi vida, pero era muy pronto y aun que no nos conocíamos lo suficiente para una vida juntos, yo la amaba tanto porque ella me gusta mucho, las personas son autenticas e inigualables y ella era una Estela de luz en mi vida...
-No hay problema, te quiero.
-¿Amigos?- Ella extendió sus dos brazos y con una linda sonrisa me insinuó un abrazo.
No dude dos veces y la abrasé, su suave piel, su rico aroma, Fue el mejor abrazo del mundo, sano tantas heridas, reconforto mi alma, me hizo feliz.
Ibamos en salones diferentes, pero algo nos unía, ella siempre fue un poco extraña, su aura era triste y melancólica, pero siempre lo ocultaba muy bien, yo me limitaba a amarla e intentar no hablar de ello.
Un día decidió no hablarme más, no comprendí en ese momento, pero paso igual, me dejo de nuevo y vi como paseaba por la Academia como si no existiera, fue muy triste, pero sus razones tuvo, no cuestione su decisión, aun que me sentía triste...
Las personas con las que compartía aula eran muy odiosas, sus voces eran tan penetrantes que incluso con audífonos podía oír sus conversaciones tan vacías, las palabras son el arma mas letal que existe, aquellas voces decían cosas de mi amada Aby, cosas desagradables, cosas que degradaban su ser...
No me importo, sentí odio de como hablaban de ella, pero a pesar de eso me limite a cohibirme y llorar, al cabo de un tiempo logre sanar aquello y cuando me di cuenta ya había salido de la Academia.
Mi vida no era tan bella, existían amores vacíos que no duraban mas que una temporada, existieron experiencias agradables y desagradables, pero siempre me había sentido vacío y solo.
La vida pasaba frente a mis ojos que cuando me senté a reflexionar sobre está, ya habían pasado 4 años, y Aby seguía ahí, su recuerdo y mi amor por ella aun reptaba en mi alma. Decidí hablarle, creí que no querría hablar conmigo, sentí que siempre había estado enojada conmigo.
-Hola Aby.
-Hastur, ha pasado tanto tiempo...
-¿Quería saber si estabas enojada conmigo? Ha pasado mucho tiempo y bueno nunca te hable por mi cuenta.
-Para nada, creí que eras tu el que estaba enojado conmigo, ademas seria muy cínico de mi parte hablarte como si nada hubiera pasado.
Aquellas palabras me tranquilizaron, pues ella nunca estuvo enojada conmigo.
-Me alegra saber eso, y bueno ¿qué ha sido de ti?.
Nos pusimos al tanto de nuestra vida, al parecer ella estudiaba una carrera universitaria y estaba por acabarla, al igual que yo tuvo experiencias y sucesos en estos 4 años que pasaron.
Una parte de mi sabia que ella y yo estábamos destinados, pero los sentimientos eran diferentes yo La amaba y ella me guardaba cariño.
Quería intentar algo con ella, esta vez sería diferente, pero poco a poco nos distanciamos y un día la vi con su novio saliendo de cenar, decidí no molestarla más.
Pasó casi un año, yo intentaba no sumergirme en el abismo de mi mente, mi vacío se apoderó de mí alma y vivía en depresión constante, intentando salir de ella a como podía, experimentando métodos para alejarme de la realidad, alcohol, drogas...
Nada sano, no era constante pero aquel nunca fui yo, mi vació era constante que mis deseos de morir se hacían muy presentes, entonces ella me hablo, todo fue tan espontáneo que no me dio tiempo de analizar la situación.
-Hola Hastur, tengo tu número desde hace tiempo pero nunca me atreví a hablarte hasta ahora.
-Hola, Está bien, es bueno saber de ti.
"Mi alma regreso al cuerpo", ella me habló, el amor de mi vida, la chica que tanto he amado en toda mi vida me ha mandado mensaje.
Nos pusimos al tanto de nuestras vidas, siempre estuve jodido emocionalmente pero en verdad amarla de nuevo era un sueño muy hermoso. Al cabo de un tiempo estábamos intentando algo, ambos nos queríamos y estábamos trabajando en forjar una relación, pero... mi vacío era abrumante, y con él llegaba una oleada de inseguridad, mi inquietante ansiedad me hacia sentir inseguro de ella, le temía al hecho de terminar igual que antes, sin ella. Su pasado me abrumaba e intentaba ignorarlo pero mi abismal vacío era más grande y mi temor a sentirme destrozado de nuevo y más por Ella, el amor de mi vida. Seria una bomba nuclear para mi alma.
No aprendí a superar y no aprendí a amar, Ella... Él amor de mi vida, la chica que siempre amé, Me mostró una Estela de luz en mi abismal vacío, una hermosa Estela brillante que calcinaba mis miedos, una luz tan potente, pero esta vez no había cultivado amor, esta vez cultive un vacío, una soledad, una exorbitante desolación en mi alma, Ella era una potente luz que alumbro el abismo de mi alma, y la extinguí...