Capitulo 3 (Mi mejor amigo)

296 11 2
                                    

Estaba tomándome fotos con algunos familiares cuando lo vi entrando, sabía que no me dejaría sola en este día.

Estaba muy feliz de verlo, de que estuviera ese día conmigo. Enseguida lo vi apareció una sonrisa en mi rostro y nadie en este mundo podrían borrarla. Lo abrace, lo abrace, y no dejaba de abrazarlo.

-Feliz cumpleaños.

-Gracias, creí que no vendrías. Eso no te lo hubiera perdonado.

-Bueno entonces creo que no te agradara saber que no demorare.

-¿Por qué? Estas acá, puedes quedarte un rato.

-No me siento bien -Hizo una pausa- me refiero a que no estoy vestido para el momento y todos me mirarán raro.

-No me interesa, no importa que crean. Sólo quédate, no puedes dejarme sola.

-No quedaras sola -Dijo riendo. Pero sabía a qué me refería.

Al final llegamos a un acuerdo, regresaría a su casa pero sólo si me prometía que intentaría todo para volver. Pues sólo había podido llegar porque estaba cerca.

Luego de haber pasado casi tres horas todas bailaban en pareja, y yo miraba intentando descifrar como movían los pies, ya que soy una pésima bailarina.
Estaba tan concentrada que cuando sentí unas manos en mis hombros me sorprendí. Voltee para ver quién era.
Siiiiii, había vuelto. Me invito a bailar, aun sabiendo que yo no sabía muy bien.

Cuando empezamos a bailar se me hizo muy gracioso haber quedado justo al frente de Andrés y que él no quitara la vista de nosotros. Mi intención no era molestarlo o hacerle sentir celos, sería tonto.

Hace mucho no hablaba con mi mejor amigo pero sabía que me gustaba Andrés y cuando le mostré quien era también llegó a pensar lo mismo que yo hace unos segundos.

-Creo que tiene celos. -Me dijo al oído

-¿Por qué lo crees? -Pregunte.

-Porque me está mirando como si tuviera celos -Dijo, como si entre hombres se entendieran- Como si me odiara o algo así.

Reí. No imaginaba eso, o más bien no lo creía.

-------

Se estaba haciendo tarde y ya muchos de los invitados se habían ido, solo quedaban algunos familiares y dos personas las cuales no dejaba ir ¿y cómo dejarlos ir?

Al principio fue incomodo porque Andrés no dejaba esa cara de molesto que tenia, pero poco a poco el ambiente se colocó más ligero y empezamos a molestar. Mi amigo empezó a tomarme fotos, sentí de nuevo su incomodidad por la situación así que rodee su cuello con mis brazos y pedí a mi amigo que nos tomara una foto. ¿Una? Tomo como cinco y en todas sentía que salía mal, pero al final no importaba, eran nuestras fotos.

Acercándose la mañana les llame un taxi, era muy tarde y, aunque no quisiera, sabía que debían irse. Así que me despedí de ellos y me senté junto a mi familia, escuchando los chistes de mi tío y la risa encantadora de mi hermana al terminarlos. Ese fue el final de mi cumpleaños, el mejor cumpleaños.

2>0�5��

Amor efímero.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora