Él se quedó suspendido unos momentos mirándolo. Las abultadas mejillas, los ojos rasgados y castaño oscuro, su cabello lacio algo despeinado, la altura de su cuello, su pecho expuesto con esa camisa amarillenta, el pantalón sostenido a una cadera delgada. Su sonrisa había cambiado a una boca entreabierta e incluso así se hermoso. Sus labios parecían y tenían el color de una fruta pequeña pero jugosa.
-Dios mío, Jinyoung, ayúdame a recoger esto, por favor.-la joven dijo. Jinyoung chasqueó la lengua y se inclinó para ayudarla a recoger semejante desastre.
-¿Qué cree que usted hace? Quite sus ojos de mi y hágase cargo de lo que ha hecho. Su padre la va a matar si al llegar el final de la tarde ve esto.-su voz tenía un tono de fastidio.
-Pagaré por todo.-Mark sacó de su cinturilla y saco con monedas de oro y se la tendió a la chica sin dejar de ver a Jinyoung. Ella las tomó rápidamente.-Espero que esto compense mi torpeza.-dijo Mark.
Jinyoung y la chica siguieron juntando las cosas. El menor soltó un bufido. Malditos ricos que resuelven todo con plata.
-Lo correcto es que usted levante esto.-espetó Jinyoung.
-¡Jinyoung!-lo reprendió su amiga. Pero el siguió de con la mirada desafiante hacia Mark, sin saber que Mark parecía fascinado por ello también. La chica estaba muy asustada, ellos no podían meterse con un tipo de elite, harían algo y podrían quitarle su puesto en el mercado con un par de firmas.
-No te preocupes, mi lady. Él tiene razón, yo me haré cargo de esto.-y bajo la mirada de ambos jóvenes, Mark se puso a recoger las cosas. Un sonrojo se apoderó de la chica y Mark le sonrió.-Espero que tu padre no te regañe, aunque debe considerar que él debería estar aquí y no su pequeña y linda hija.-sonrió y Jinyoung quiso golpearlo. ¿Quién rayos se creía este maldito?
-Muchas gracias.- ella dijo.
Estuvieron los tres durante unos momentos recogiendo las manzanas. Jinyoung sintiéndose cohibido por una evidente e intensa mirada puesta sobre él. Mark parecía poner atención en cada parte de su rostro, le gustaba como sus gestos cambiaban, le gustó incluso su forma de parpadear, las pequeñas sonrisas que le daba a la joven allí.
-Me está incomodando mirándome.-dijo Jinyoung.
-Oh, lo siento. Es que acabo de ver algo en ti que no esperaba encontrar.- Mark se levantó cuando vio que el desastre de manzanas ya había sido resuelto.
-Oye, entiendo...es como ese tal Miguel Angel. ¿No? Tranquilo, sé que ahora los hombres tienen estas preferencias por otros hombres pero está apuntando donde no debe al verme a mi porque a mi me gustan las mujeres. Ya sabe como mi pequeña vendedora de manzanas.- Mark lo miró como si hubiera dicho una blasfemia.
-Creo que me estás malinterpretando.-extendió su mano hacia Jinyoung.-Soy Mark Tuan, soy pintor y escultor...
-Wow, wow... Yo no le estoy preguntando su vida. Y ahora que menciona lo de ser pintor como que- Mark lo miró serio.
-Estás tratando de ver hacia mí persona sin conocerme y estás distorsionando mis palabras, muchacho. Estoy tratando de hacerte saber otra cosa. Soy pintor escultor y tú me pareciste portador de un toque único, eres bello.-Jinyoung se sonrojó violentamente haciendo que su amiga se riera y Mark lo mirara confundido.-¿Por qué esa timidez? No te estoy cortejando. Estoy expresando lo que siento al verte. Es decir, me gustaría que poses para mi.-el menor abrió los ojos sorprendido.
-¿Posar para usted?- Mark se sobó las sienes.
-Jinyoung, así te llamas. ¿No? Tú eres canon. Tienes lo que las proporciones que yo necesito para mis pinturas y mis esculturas. Quiero que me dejes trabajar contigo.
ESTÁS LEYENDO
Sempiterno [Markjin]
FanfictionSempiterno es "durará siempre; que, habiendo tenido principio, no tendrá fin" Advertencias: ☪️ Historia ambientada a la Edad Moderna. (XV-XVIII) ☪️ No tener en cuenta las nacionalidades reales de los personajes. ☪️ Contenido explícito +18 ☪️ El espa...