| CASADA CON JEON JUNGKOOK | JUNGKOOK | saga #2

Q U I N C E

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Entre al cuarto con la charola del desayuno. No se encontraba Seoyeon en la cama como cuando me fui. Deje la charola sobre la cama y camine a la puerta del baño. 

— Linda, ¿estás ahí dentro? -toque la puerta- 

— Si si, salgo enseguida. 

Salió del cuarto de baño, la mire con algo de preocupación, últimamente esta extraña y cortante conmigo. Y quería saber el porqué. 

— ¿Sucede algo? -acaricie su mejilla- 

—negó con la cabeza- Estoy bien, ¿Por qué preguntas? -se alejó yendo a la cama-

— Estas extraña conmigo desde aquel día que hablamos. -me senté a su lado, ella comenzó a comer- ¿Dije algo malo aquel día? ¿Te incomode? 

—negó de nuevo con la cabeza- No es nada Jungkook, te lo dije. 

— Es solo que no te creo. -paro de comer y me miro- Siempre lo hago pero ahora algo me dice que tienes algo y quiero saber que es.  Si es algo que hice mal, dímelo. 

—se giró a mi, tomo mi rostro entre sus manos, cosa que nunca había hecho- Es solo que hoy me siento algo cansada, no es nada contigo amor. 

Rompí con el corto espacio entre nosotros y bese sus labios. Sonreímos entre el beso mientras nos separábamos. 

— Espera. -tome la charola y la puse en el suelo lado a la cama- Listo. -Seoyeon soltó una leve risilla y la ayudé a sentarse sobre mi, para después comenzar a besarnos- 

La tome de las caderas y la acerque mas a mi cuerpo. Ella rodeo mi cuello con sus manos mientras yo comenzaba a tocarla. Quizá íbamos demasiado rápido, pero en realidad tenemos bastante sin estar juntos, y muero por tocarla. 

.

Jungkook me recostó sobre la cama con algo de brusquedad, logrando alborotar mi cabello. Bajo a besar mi cuello y a morderlo. Recuerdo que cuando éramos novios dejó una marca en mi cuello y no me di cuenta hasta que llegue a mi casa, ahora no me importa mucho si deja una y más. 

Justo ahora no tenía ropa interior debajo de mi pijama. Y no era para provocar a Jungkook o algo así. Simplemente era más cómodo dormir así. Y en ocasiones como estas, hacía más fácil las cosas. 

Metió sus manos por debajo de mi camisa, me toco y no después de mucho la saco por completo. Recorrió sus manos por mi cuerpo, desde mis hombros hasta el elástico de mis shorts, para después sacarlo de un solo tirón. 

Lo miré, él me sonrió como si fuera a hacer una travesura. ¿Desde cuando Jungkook era tan atrevido? 

Bajo sus labios a mi seno izquierdo, su mano libre al derecho. Me acarició primero comenzando lento, de un momento a otro, comenzó a ser algo brusco, solté un ahogado gemido, tomando a Jungkook de su cabello y llevando mi cabeza hacia atrás. 

— Dios, Jungkook... -jadee- 

Después de unos pocos minutos, se alejó de mí, se acomodó mejor en mis piernas, lo sentí ya que tenía mis ojos cerrados, después de eso solo sentí su cuerpo inclinarse al mío y sus dedos entrar dentro de mi.  

Gemí alto, pero enseguida Jungkook me beso. Usaba dos de ellos y lo hacía tan bien. Comenzaba a sentirme desesperada, comencé a hiperventilar al igual que Jungkook poco después de mi. Abría mis piernas lo más que podía y elevaba mis caderas en busca de más. 

Añadió un dedo más, comenzando a ir más rápido, haciéndome temblar. 

Sentía que me vendría pronto, jadeé sin parar, Jungkook saco sus dedos y llevo sus manos a su pantalón, estaba demasiado excitado, su erección era notoria aun sin haberse sacado el pantalón. Estaba acelerado y sus manos temblaban. 

Pero era hora de también darle algo de lo que él me dio. 

De alguna manera lo acosté en la cama y yo quede arriba, pase mis piernas lado a sus caderas, ahora solo tenia su boxer y la camiseta. La última la saqué con su ayuda y me dedique a besarle y tocar su marcado abdomen.  

Soltó un ronco gemido cuando hice fricción con su erección. Apoye mis manos en su pecho y me aleje de sus labios para después comenzar a mover mis caderas de adelante hacia atrás. 

— Oh si, así. 

Cerró sus ojos con fuerza, inclinó su cabeza hacia atrás y tomo mis caderas para marcar un ritmo. No había comenzado realmente la acción, y esto ya era fascinante. Se sentía bien saber que yo también podía hacerle disfrutar. Esto era diferente a las anteriores veces en las que estuvimos juntos. Me gustaba.

Soltó mis caderas y yo me levante, deslizándome hacia abajo hasta tener mi rostro cerca de su erección. Nunca había hecho esto antes, pero quería hacerlo. 

Jale de su boxer, dejando salir a la luz su erección. Relamí mis labios antes de acercar mis labios a el y meterlo a mi boca. Cerré mis ojos, mientras me acostumbraba al tamaño y encontraba la manera de meterlo aun más. Los gemidos de Jungkook me hacían seguir y no parar. Tomo mi cabello entre sus manos y me ayudo con el movimiento. 

No quería que se corriera aún, así que lo saque de mi boca, en cuando lo hice Jungkook volvió a ponerme debajo. Sin esperar, se colocó entre mis piernas, apoyó sus manos lado a mi cabeza después de acomodar su miembro en mi entrada. Me beso con delicadeza mientras enterraba su erección en mi. 

Jadeos y gemidos llenaron el cuarto enseguida. Jungkook movía sus caderas con rapidez, mientras de vez en cuando me besaba. En un momento salió de mi y me giro haciendo que le diera la espalda. Entro en mi de una y siguió mientras me tomaba de los hombros. Incluso dolía pero no era algo que me disgustara. Sentía que ambos terminaríamos pronto, por lo que aumentó aún más su velocidad. Se corrió dentro mío para después  dejar unos cuantos besos en mi hombro. 

Me ayudó a recostarme y el hizo lo mismo. Tomo la sabana y me cubrió con cuidado. Nos miramos y nos sonreímos. 

— Esto si es comenzar muy bien el día. 

—reí- Si, claro. -cerré mis ojos- Estoy agotada, dormiré un rato. 

— Descansa amor. -beso mi mejilla- 

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