Capitulo 8

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Ya hoy era 15 de Abril y Eros seguía intentando conseguirme pareja habíamos estado por muchos lugares pero no aparecia,yo por mi parte me daba lo mismo,no podía apurar a una persona que llegaría más adelante o que tal vez nunca llegaría.

Estaba en el consultorio viendo unos papeles cuando escucho la puerta del consultorio siendo abierta.

-Señor tiene que esperar a ser llama..-mis palabras quedaron en el aire cuando veo a Eros en la puerta con una gran sonrisa.

-Que haces aqui? Y como entraste?-pregunte dejando los papeles a un lado.

- Me dejaron entrar porque use mis encantos-dijo abanicando sus pestañas- y estoy aquí porque nos vamos junta tus cosas.

-Que?por que? Y a donde?-dije confundida.

-Nos Vamos a un parque de diversiones a ver si aparece de una vez.

- No puedo tengo mucho trabajo-dije negando.

-si te preocupa tu jefe te dio el permiso.

-Pero como?-dije confundida ya que el señor Smith es muy difícil de convencer.

-Lo hipnotize y aceptó.Ahora andando vámonos, y deja las preguntas-Suspire y asenti.

Guarde mis cosas al salir de mi consultorio las enfermeras y demás doctoras no paraba de ver a Eros y este les dedicaba una sonrisa matadora.

Llegamos al parque de diversiones,obviamente me había cambiado.Comenzamos a subirnos a todos los juegos comimos algodones de azúcar la estaba pasando muy bien la verdad.Eros me dijo que tenía que ir al baño así que le respondí que lo esperaba en la banca.

NARRA EROS

Cuando salí del baño la imagen que me encontré no me gustaba mucho,era Aitana hablando con un chico se que dije que la traje para hallar a su alma gemela,pero en realidad era mentira,solamente quería pasar tiempo con ella.

Me acerqué hasta ellos,me senté al lado de Aitana y pase mi brazo por sus hombros y hable.

-Amor aquí estabas te  estaba bucando-el chico me miró y hablo.

-Es tu novio?-Antes de que ella diga algo hable.

-Si

-Lo siento mucho,fue un placer conocerte Aitana y déjame decirte que tienes unos ojos preciosos-dijo esto y  se fue.

Ella se giró para verme y hablo-Por que hiciste eso?-dijo indignada.

-Ese chico no era bueno para ti-dije mientras miraba la montaña rusa.

-Y tu como sabes eso?

-Es una especie de don que tenemos los Dioses para saber si una persona es buena o mala-mentí.

Ella asintió dudativamente.

-Vamos-dije tomando su mano y en ese momento un escalofrío me recorrió todo.

-A donde?

-A la montaña rusa.-respondi

- Me encantó.-dijo con una gran sonrisa.

Nos subimos y luego de bajar casi vomitando todo,decidimos ir a comer hamburguesas,Aitana decía que eran muy buenas,yo no lo sabía ya que nunca había probado una.

Al terminar de comer,dimos unas vueltas más por el parque y decidimos  volver a la casa porque ya había anochecido,Aitana me dijo que yo conduciera,ya que estaba muy cansada para hacerlo,le importó muy poca que no tuviera licencia y nos pudiera parar la policía.

Gracias a Zeus esto no ocurrió y llegamos bien a casa,ella se había dormido en el transcurso de vuelta a casa,como no la quise despertar la cargué hasta el departamento,la deje en su habitación y la desperte para que se pusiera el pijama si no iva a estar muy incómoda.Muy poco caso me hizo y siguió durmiendo.

No sabía si cambiarla o dejarla así.Decidi cambiarla para que estuviera cómoda le quite su blusa y luego su pantalón.Dejandola solamente en ropa interior de encaje negro.

Por Zeus,que mujer más perfecta,unas curvas envidiables,me la quedé observando unos minutos,y luego la cambié rápidamente por que podría hacer una locura.

La arrope y cuando estaba apunto de salir de la habitacion me llamo.

-Eros?-dijo rascando sus preciosos ojos bicolor,esa imagen me causó mucha ternura.

-Si pequeña

-Quieres dormir conmigo?-Por supuesto que queria pero no la quería incomodar.

- No te quiero incomodar-respondí.

- No lo harás ven-dijo y corrió el edredón yo me quedé mirandola-vamos no muerdo.-yo me reí.

Me quite el pantalon y la remera,dormía solamente en boxer.Cuando me termine de desvesti ella ya se había vuelto a dormir si está mujer es imposible cuando tiene sueño.

Me acosté al lado de ella y la traje hacia a mi pase mi brazo por su cintura y su espalda estaba pegada en mi pecho,olía delicioso y haci viéndola dormir tan bien me dormí yo.

El Dios ErosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora