¿Desde hace cuanto tiempo lleva sólo en esa gigantesca mansión? Ya perdió la cuenta, no cuenta las horas, ni los días, ni el tiempo en general. Dejó de recibir gente, ya estaba harto de todo. Había dejado de salir, ya estaba cansado de las que según él, eran miradas burlescas y sin respeto. Despechó a todo ser que solía vivir con el, dejándolo en completa soledad. ¿Que si le gustaba vivir así? Ya debe estar acostumbrado, tantas lunas y primaveras que ya ni debe saber lo que se siente convivir con otros seres humanos.
Pasaban mas años, se sumaban telarañas y polvo en los ya antiguos muebles, y el extravagante duque no estaba dispuesto a cambiar su modo de vida, no hasta que, aburrido de todo, se puso a recorrer cada esquina de su castillo.
Habitaciones de huéspedes, de empleados y de cachivaches. Se topó con una enorme biblioteca y el salón principal por el cual hace años no pasaba. Solía añorarlo desde arriba, jamás bajaba las escaleras.
La nostalgia comenzó a apoderarse de él, pasaba sus finos dedos por las polvorientas paredes y rojas cortinas de seda, que en su momento, solían resplandecer de forma épica.
Sus manos tocaban cada ladrillo con ingenuidad, sin esperarse que uno se undiera en la pared. El duque, sorprendido se alejó por reflejo. "Jamás había visto algo así en esta mansion, en la que tantos años he vivido"
Del bajo techo, decendio una vieja escalera, rechinaba y saca polvo de todas partes, no le extrañaria si en ese preciso momento se rompe.
Esperó a que terminara de descender para subir.
Era un corriente ático, que para lo corriente que era, no le veía sentido que fuese abierto de tan singular manera.
Decidió explorarlo un poco, había cajas vacías o con libros viejos. Fotos de su inexistente familia, donde aparecian sus padres, orgullosos de su hermano, mientras él los miraba serio en una esquina de la foto.
Gakupo apretó el cuadro... Siempre fue el segundo. Todo su hermano, siempre fue el consentido, el favorito de todos, el orgullo de sus padres, el profundo amor de... Ella. ¿Donde estaría ella en este momento?
Revolcándose con su hermano claro, en el reino vecino.
Sus padres habían fallecido antes de su eterna soledad.
No quiso seguir abriéndose paso entre recuerdos y memorias, entre pensamientos y reflexiones. Revolcarse en el lodo no es la mejor manera de limpiarse.
Con furia, arrojó el cuadro al otro extremo del ático, dándole a lo que en un principio, no parecía un estante con toda la tierra de quizá cuantos años que llevaba.
Aquel estante dejó caer un libro de una llamativa portada que capto toda su atención.
Apartó su largo cabello en una cola para que no le estorbara al leer. Mas bien, hojear.
Pasando pagina en pagina, una hoja suelta cayó al suelo, una especie de conjuro estaba escrito en una letra que apenas entendía. Pero las palabras que podía reconocer eran.
"Poder", "lujuria", "control".
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La locura del Duque Venomania
FanfictionTomó la copa entre sus finos dedos, dió un sorbo, y la dejó sin delicadeza sobre la mesa, haciendo eco en el gran y vacío salón. En esa gran mansión, solo era él y su soledad. ¿Que le depara a una persona aburrida y solitaria? Basado en una canción...