Un Ultimo Año

El Pañuelo Verde

"Maldito insecto como se atreve como se atreve a es solo un insecto ni siquiera se merece que piense en él aunque sea para partirle la cara no entiendo como Bulma puede estar con él, no lo entiendo, como ella puede estar con esa basura ella debería estar con alguien que esté a su nivel con alguien como Es un imbécil, cuando estemos en la cancha saboreara la tierra"

Vegeta se hallaba maldiciendo mientras dentro de él crecía ocultamente en una región oscura y tétrica de su alma un nuevo sentimiento que creía haber eliminado de su ser para que nadie volviese a herirlo como antes, sin siquiera pensarlo la peliazul se estaba volviendo importante para él, al fin y al cabo era la única persona que lo había tratado como una persona y no como un animal desde que murieron sus padres

- "Bulma ¿De qué hablaban tú y Vegeta?" – Yamcha la miraba de reojo para buscar una expresión en su cara que la delatase.

- "¿Qué?" – Bulma se sorprendió un poco por la pregunta, justamente se hallaba pensando en el chico del cabello azabache – "Bueno ya sabes estábamos jugando cartas solo eso" – Dijo ella mientras sonaba el timbre y los alumnos salían a recreo.

- "Ya veo" – Dijo él imaginándose lo que podría haber pasado si no se hubiese metido a la sala de castigos y los hubiera interrumpido – "Entonces ¿Solo jugaron cartas?"

- "¿Qué sucede Yamcha?" – Dijo ella parándose frente a él y intentando mirarlo a los ojos ya que este solo miraba hacia piso.

- "Es solo que te amo Bulma Briefs, y espero que siempre estemos juntos" – Yamcha la tomó entre sus brazos y la abrazo tan fuerte como podía.

- "Yamcha ¿sucede algo malo?" – Dijo la peliazul alterándose un poco sin entender el actuar de su novio.

- "¡Nada, solo te lo quería decir!" – Yamcha miró hacia otro lado mientras Bulma se quedó en completo silencio.

Al día siguiente empezaban los duros entrenamientos del equipo de rugby, era el último juego más importante de la temporada, si los "Guerreros Z", es decir, el equipo del cual era capitán Goku ganaba en este campeonato, clasificaría para el campeonato nacional que sería la próxima temporada, por eso ya se empezaba a sentir el ansia y el deseo de ganar en el ambiente escolar.

Vegeta estaba en su cuarto, se levantó de su cama para ir al baño, comenzaba otro día, después de bañarse se aseguro de llevar sus zapatillas para el rugby y otras cosas en un bolso, mientras en su mochila guardaba algunos cuadernos y libros su mirada se posó en el pañuelo verde de Bulma, tenía sus iniciales B.B., recordó cuando a la peliazul se le había quedado el pañuelo en el baño la vez que le derramó el café encima. Dejo lo que hacía y tomó el pañuelo entre sus manos y su mente empezó a divagar en los recuerdos que compartía con la peliazul, no paraba de pensar en todos los momentos donde ella le había brindado una sonrisa honesta, pensaba en el día anterior, en lo nervioso que se ponía cuando ella se acercaba a él, como cuando jugaron cartas.

"¡Esto no me puede pasar a mí por qué cada vez que estoy con ella mi corazón se acelera, por qué cada vez que veo su sonrisa y sus ojos me vuelvo tan sereno y me sintió tan feliz, por qué cuando estoy cerca de ella siento el deseo de quedarme a su lado y protegerla de todo sin importar nada, por qué cuando la escucho toda mi atención se vuelca en ella ¿Por qué?... no creo no es posible que yo este sintiendo esto, no entiendo esto, no entiendo nada de lo que siento pero no, no es posible que ella me guste, ella no me gusta" pensó él mientras por inercia guardaba el pañuelo verde dentro de su mochila.

Vegeta se sentía extraño y confundido, en lo más profundo de su ser sabia que se engañaba, no quería admitir lo que su corazón sentía, por lo mismo tomó una decisión mientras manejaba su automóvil hacia la escuela.