RANDOM

Au! Punk with violin II

Desde aquel día las cosas cambiaron, Hipo ya no venía diariamente a verme en la terraza y cuando lo hacía podía percibir que era más reservado. No podía culparlo de nada, estaba pasando por una etapa muy doliente y que yo haya entrando bruscamente con mis sentimientos debió afectarlo aun más. El violín era mi modo de poder liberar toda pesadez que sentía, todas mis emociones, deseaba que él estuviera ahí para escucharme, sentir, llorar, yo estaría ahí para él.

Un día en el receso, él vino después de dos días seguidos sin verlo, volvió al lugar de siempre para contemplar la ciudad desde lo alto de la preparatoria, puse en contacto el arco con las cuerdas pero ese día no sabía que tocar. Aun cuando todos estos días tenía tantas ganas de tocarle para expresarle lo que sentía, por alguna extraña razón mi brazo no quería moverse, no tenía inspiración. Me quedé seco.

- ¿Qué sucede, Jack?- preguntó Hipo sin voltear a verme, estaba más centrado en ver la ciudad, eso en un punto dolió.

- Hoy no voy a tocar, lo siento- caminé hacia él dejando el violín acostado sobre el estuche, en esos momentos pensé que sería perfecto para hablar un poco- No se que tocarte. Pero aun tenemos este tiempo para hablar.

- ¿De qué quieres hablar?

- No seas tan cortante, si necesitas decir algo puedes hacerlo.- pensé en rodearlo con mi brazo pero luego me retracté porque probablemente no era lo correcto- Últimamente ya no eres tú, estas comenzando a cerrarte mucho.

- ¿Acaso no es obvio?- giró su cabeza para que nuestros ojos se encontraran, realmente amaba el color verde que poseía y esas pecas en sus mejillas, deseaba sus mejillas- No deseo que pierdas a alguien para comprender lo que me sucede pero, mi...ser aun no puede reaccionar y aceptar el cambio, ...es complicado.

Me quedé callado, tenía razón, no podía saber como se sentía perder a un ser querido y el que te hayas mudado dejando a tus amigos atrás es completamente diferente, ellos siguen vivos y los puedes ver de nuevo pero, cuando mueren la cosa cambia drasticámente. Tomé su mano, no sabía que decir al respecto así que solo sonreí y me fui del lugar, me sentía un estorbo estando ahí. A cada escalera que bajaba me sentía más arrepentido por haber dejado a Hipo solo pero algo de lo que me percaté es que él no fue detrás de mi para preguntar la razón de mi ida, era un estúpido si pensaba que Hipo haría una cosa como tal porque...él no me quiere, yo soy solo un amigo. No pude evitar recordar las escenas de la presentación, tenía tantas ganas de ser egoísta y exigirle que no me dejara así, dedí haberlo besado para callarlo y no haber tenido que escuchar esas palabras que me lastimaron pero en fin, no pude hacerlo porque yo no soy una persona mezquina. 

Llegué a casa, encontré a Jamie usando laptop, cuando él notó mi presencia arqué la ceja preguntádole porque la estaba usando.

- Es para tarea- respondió con una sonrisa que no me engañaba, estaba mintiendo.

- ¿Ya acabaste la tarea?- le cuestioné.

- ¡Vamos, Jack! Solo un juego más.

- Bien pero luego no me culpes si terminas haciendo la tarea en la noche- contesté revolviendo sus cabellos.

- Pero ya la acabe.

Mi cuarto era grande pero sentía que lo era demasiado porque realmente lo que yo necesitaba era mi cama y un closét con mis ropas pero tenía que acostúmbrame a la nueva casa. Lo que sí adoraba es que tenía un pequeñ balcón donde me permitía ver las casas detrás de la nuestra pero lo que me gustaba ver eran los edificios que se ubicaban a lo lejos porque en las noches las luces de aquellos lugares le daban un toque genial a la ciudad. La luna siempre se colocaba exactamente a mi cabeza cuando estaba en el balcón, ese era otro motivo para amar este espacio.