El mejor año de mi vida (CORRIGIENDO)

6. Un encuentro inesperado.

Ya estamos en la tienda del cine comprando palomitas y chuches varias. Bueno, en realidad soy la única que está en la zona de chuches.
La verdad es que no soy muy de palomitas, prefiero las chuches y las gominolas.

Yo ya he pagado lo mío y me dirijo a ver al resto cuando oigo a alguien detrás de mí gritando mi nombre.

-¡Rebeca, Rebeca!- dice, cada vez más cerca- ¡Espera!-.

Me giro sorprendida, aunque algo confundida.

-¡Por fin te encuentro!- me dice él.

-Hola- le digo un poco confusa- Perdona, es que no sé quién eres- me limito a decir.

-¿En serio no te acuerdas de mí?- repone, atónito.

-Ehh... ¿no?- estoy un poco avergonzada.

-¡Soy yo, Dylan, un antiguo compañero de clase!-.

Intento recordar.
-¡Espera!¿Tú eras el que estaba coladito por mí en tercero de primaria?- disimulo una carcajada.

Cuando éramos pequeños, Dylan iba con nosotros a clase y estaba coladito por mí. Me pidió salir varias veces, pero yo no acepté. La verdad es que ha cambiado mucho, es muy atractivo. Tiene el pelo castaño y los ojos verdes. Es
ligeramente algo más alto que yo.

-Sí, el mismo- responde.

Estoy algo asombrada. Después de tantos años y me le encuentro, ¿ahora?

-¡Vaya, pues no han pasado años!- exclamo.

-Hemos crecido mucho, pero tú sigues igual de hermosa- dice con tono poético.

No puedo impedir sonrojarme. Vale Rebeca, contrólate. Es guapo y simpático, pero recuerda lo coladita que estás por Blake...

-Gracias- le correspondo.

-Ya que estamos aquí, ¿te gustaría tomar algo?- me pregunta intrigado.

A ver, no puedo negar que es un chico muy majo; pero sé cuales son sus intenciones, además, ¡la peli va a empezar en cualquier momento!¡Mis amigos me están esperando!

-¿Sabes?, mejor otro día, hoy ya estoy ocupada. He quedado con unos amigos a ver una película y va a empezar ya. Dame tu número y ya nos veremos- es la mejor opción.

Me lo apunta en un trozo del ticket de mis chuches y me lo guardo en uno de los compartimentos de mi bolso.

-Bueno, pues hasta otra- me da un beso y un abrazo y se aleja entre las tiendas.

Antes de que pueda articular ninguna palabra, oigo a Daniel desde atrás.

-¡Rebeca, corre, Rebeca, que ya vamos a entrar!- voy corriendo hasta donde están.

Somos los siguientes en la cola para canjear las entradas, y yo soy la que las tengo. Saco el móvil y las busco.

-Ten- le doy el teléfono a Hannah para que las canjee ella mientras que me arreglo un poco física y mentalmente.

(****)

Ya estamos sentados. Me encuentro entre Hannah y Blake. Así tendré oportunidad de hablar con él. ¡Bien!
Suenan los anuncios.

Intento entablar una conversación con Blake.

-Bueno, aquí estamos...-intento no parecer muy nerviosa.

-Esperando a que empiece la peli- termina, un poco seco. Desde luego no es el momento de intentar algo con él. Tendré que esperar a otra ocasión.

Empieza la película. Ya lleva más o menos la mitad. Es romántica y algo triste.

De repente, noto como alguien me coge de la mano. Es Blake, qué raro.

Le miro de reojo y veo que está llorando. ¡Vaya! Nunca antes le había visto llorar.

-Oye, ¿estás bien?- le pregunto.

Me mira, y sin decirme nada, se acerca a mí y me da un dulce beso en la boca.

Yo, atónita, le correspondo. Durante varios segundos, nos envolvemos en un beso apasionado.

Cuando por fin nos separamos por falta de aire, se vuelve hacia su lado y vuelve a agarrarme la mano pero esta vez con más fuerza.

(****)

Mi padre ya vino a recogernos a Hannah y a mí. Vivimos muy cerca así que la dejamos de la que pasamos, la dejamos en su casa.

Ahora vamos en el coche. Ya son las ocho de la noche. Vamos con la radio puesta a un nivel en el que solo mi padre la puede oír, que está en la parte delantera del coche.

Hannah y yo vamos atrás, hablando de nuestras cosas.

-¿Qué te ha parecido la película?¿Te ha gustado?- me pregunta.

-No ha estado nada mal. Aunque hubiera preferido una con más acción- le soy sincera. No le quiero contar lo del beso en este momento no vaya a ser que mi padre lo escuche. Lo dejo para otro día.

(*****)

Cuando llegamos a casa mi madre nos abre la puerta. Me quito los zapatos y la ropa de abrigo, dejándola en el perchero.

-¿Qué tal te lo has pasado, cariño?- me pregunta mi madre a la vez que me da un beso tierno en la mejilla.

-Genial mamá, la película ha estado muy entretenida, aunque con momentos sensibles. He acabado muy cansada, así que si me disculpas, me subo ya a mi habitación- la digo.

Me subo directamente a la habitación. No quiero cenar nada, después de haber comido tantas chuches antes. Buff....

Me desvisto y me pongo el pijama. La ropa de hoy me vale perfectamente para mañana. No espero más y me meto en la cama. Eso de ir al cine me ha dejado molida.

Me quedo un buen rato tumbada en la cama recodando el inesperado beso entre Blake y yo. ¡No me lo creo!

Ya me estoy quedando dormida cuando la pantalla del teléfono ilumina la habitación. Tengo un mensaje nuevo. Es Blake. Lo miro impaciente.

-Hola Rebeca, siento lo de antes. Entiendo si ahora estás enfadada conmigo. Te pido perdón. Descansa mucho. Te veo mañana. Te quiero. (Y dos emoticonos de besos).

Me quedo paralizada. Lo releo varias veces. ¿Qué le contesto?¿Qué le voy a decir mañana en el instituto?

Le dejo en leído, prefiero esperar a mañana a decírselo a la cara. No quiero estropear las cosas entre nosotros. No pierdo más tiempo, pongo la alarma en el móvil y lo dejo boca abajo, de modo que si me mandan algún mensaje, no me enteraré ya que la pantalla no se iluminará.

Me duermo, pensando en qué le diré mañana y cómo se lo contaré a las chicas.

Hola chicos!
¿Qué os ha parecido este capítulo? ¿Y el inesperado beso de Blake hacia Rebeca?

No os olvidéis de votar y comentar si os ha gustado y dejarme ideas en los comentarios.
¡Muchos besos y ánimo!