capítulo 9

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- Ya no lo es... lárgate de aquí - contestó Ana molesta
- Es mío - gritó Lisa
- Deja de gritar maldita loca... ya no es nada tuyo... déjalo en paz - dijo Ana enojada
Lisa la empujó, golpeó a joey en la mejilla y Ana la agarró del cabello con fuerza... la empujó hacia atrás y Lisa cayó sentada en la silla
- Te denunciare - gritó Lisa
- ¿Como? No tienes marcas estúpida - contestó ella valientemente
Lisa le dio una cachetada, se acercó a joey y Ana la agarró con fuerza del cabello
La empujó y le dio a lisa una fuerte cachetada
- Lárgate y denunciame maldita cobarde - gritó Ana
- Esto no quedará asi - contestó lisa yéndose de allí rápidamente y joey la miro sin palabras
- ¿Por qué lo hiciste?- preguntó él mirándola

- Tú no golpeas a las mujeres... y alguien tenía que ponerla en su lugar ¿No?- preguntó ella cruzando los brazos
- No lo sé... pero gracias - agradeció él sonriendo
Ana le dio una cachetada, se cruzó de brazos y lo miro con el ceño fruncido
- ¿Me lo merecia?- preguntó él riendo
- Por haberla besado y haberte acostado con ella - respondió ella enojada
- ¿Acostarme con ella?- preguntó joey curioso
- ¿¡Que me miras Así!? ¿Crees que soy idiota? Por supuesto que lo sé - respondió ella hirviendo en celos
Joey se rió tiernamente - ¿Estas celosa?- preguntó él mirando esos ojos color miel
- ¿Tu que crees?- preguntó Ana acercándose a la ventana y mirando por ella

Joey se levantó lentamente de la camilla, se paró al lado de ella y la vio con los ojos llenos de lágrimas
- Pequeña... - susurró él tiernamente
Ana lo miró con los ojos llenos de lágrimas y volvió a mirar por la ventana
Joey se quiso acercar, Ana lo empujó y se acurruco en la ventana
- Pequeña... me acosté con ella, lo admito...- dijo él mirándola serio
Ana cerró los ojos y se le escapó una lágrima, joey se quiso acercar y lo volvió a empujar
- Ve con ella...- susurró ella
- No... te quiero a ti, no a ella... nunca la quise a ella - susurró él mirándola
- Nunca la quisiste pero te acostaste con ella, la besaste... pero aún asi te amo - susurró Ana mirándolo con tristeza
- Perdoname pequeña...- respondió joey con sinceridad
- ¿Crees que un simple perdón arregla lo estúpida y usada que me has echo sentir cuando te vi besandote con ella?- preguntó Ana con sinceridad y dolor

- No... pero me siento el peor ser humano de este mundo viéndote llorar así por mi culpa... Perdoname pequeña, estas en todo tu derecho de enojarte y abofetearme - susurró Joey triste
- Me sentí tan usada, pero lo peor de todo es que cuando te veo a los ojos mi mundo entero se viene abajo... me olvido de todo y no es así... - contestó ella
Joey se arrodilló ante ella y le agarró las manos
- Ana... te amo, a ti y a nadie más que a ti... Perdoname tesoro, haré lo que sea para conseguir que aceptes mi perdón - suplico él mirándola a los ojos
Ella cerró los ojos y lo soltó, joey se levantó y la agarró de la cintura
Ana trato de quitárselo, lo empujó y golpeo con fuerza pero sin éxito

Joey la pegó a su cuerpo, Ana se puso a llorar y él la abrazo suavemente
Joey apoyo la espalda de ella en la pared, Ana cerró los ojos y él sólo se dedicó a mirarla atentamente
- Te amo... - susurró él acercándose a los labios rosados de ella
Ana abrió los ojos, joey le limpio las lágrimas besandole las mejillas y rozó sus labios con los de ella lentamente
Se besaron muy suavemente y ambos se abrazaron fuerte sin dejar de besarse
- No llores más... - susurró él sobre sus labios
- No me hagas llorar... - susurró ella mirándolo
- No lo haré... lo prometo - susurró él sonriendo dulcemente
Joey la bajo de sus brazos lentamente, Ana se quejó de los dolores en sus huesos y se agarró de los brazos de joey
- ¿Estas bien?- preguntó él mirándola curioso

- No... debo decirte algo - contestó ella triste
- Dímelo - susurró Joey preocupado
- Estoy enferma - susurró ella mirándolo tiernamente
- ¿Qué tienes? No entiendo - preguntó él sin comprender
- Tengo.... leucemia - contestó ella triste
Joey la miro asombrado - ¿Desde cuando lo sabes?- preguntó él mirándola
- El día después que te vi besarte con... fui al médico porque me dolían el estómago, los huesos y había bajado de peso sin explicación aparente... me diagnosticaron con Leucemia - contestó ella triste
- Esto es mi culpa - contestó él mirándola con tristeza
- No... esto es hereditario, la hermana de mi bisabuela tuvo... no pensé que yo tendría - susurró ella mirándolo adolorida

Niña de amor dulce Donde viven las historias. Descúbrelo ahora