Esta historia está hecha en bases los personajes de karmaland. Es una historia alternativa, pero basándose levemente en lo ya acontecido.
Rubén mejor conocido como rubius tras ser rechazado por mangel decide aliviar sus penas con alcohol, tras una n...
Dioses que vegetta no me encuentre repetía una y otra vez en mi mente, no es que no quiera dormir con vege, es que no puedo dormir con vege, es demasiado, ya basta con el hecho de que me estoy convirtiendo en un parásito en su casa.
Escuchaba pasos a lo lejos, que volvían cercanos cada vez más, mi cuerpo comenzaba a cubrirse por un sudor frío y los nervios me mataban.
Me encontraba oculto en la última planta de su casa, ahí no está terminado de construir pero había escaleras para subir, me asomé por las escaleras con cuidado al escuchar que vegeta se encontraba cerca de mi, dioses por favor ayúdenme
-Rubeeeeeenn, ¿donde estas chico?- me buscaba como si un depredador buscara su presa, era un pequeño animal indefenso, ayuda
Vi como comenzó buscar por todos lados, incluso entro al cuarto de sus cofres, lugar donde yo no podía pasar ya que no puedo romper bloques.
-Doblas, no te encuentras aquí verdad, sabes que es ilegalisimo entrar aqui- después de inspeccionar ese cuarto se salió pero no cerró la puerta y la curiosidad se apoderó de mi cuerpo.
Si me voy a morir que sea a costa de haber entrado a esa sala.
Al ver que vege no estaba cerca corriendo hasta ese cuarto lo más rápido posible.
Comence a revisar todos su cofres, dios, incluso sus cofres los tiene ordenados, este hombre es todo un maniático, ya me iba a salir de ahí cuando escuché que vegetta se esta acercando.
Rápido me puse detrás de la puerta, pero de manera inesperada apareció en otro cuarto, ¿había pisado algún elevador? ¿Donde estaba?
Era un cuarto bastante raro, tenía cuadros de un lobo, pero que es este lugar, un escalofrío recorrió mi cuerpo, no creo que deba estar aquí, comencé a caminar para inspeccionar mejor el lugar y bajando un poco más encontré un traje, totalmente oscuro y con una máscara de lobo, no entiendo lo que pasaba.
Decidí mejor salir de aquel lugar antes de que me metiera en problemas. Salí cagando ostias, subí en el elevador y volví al cuarto de cofres.
Al salir tan apresurado, se me había olvidado lo del juego, que no me percaté en el momento que vegetta se encontraba detrás mío, acechando desde las sombras, en espero de que aparezca.
Di un brinco por el susto, al sentir sus fuerte agarre en mi mano
-te encontré chiqui, yo gano - hablo orgulloso y un semblante brillante
Por otro lado yo esta en shock, mi cara no buscaba que expresión poner
-¿qué te pasa Doblas?, parece que viste un fantasma - colocó su mano en mi frente -¿te sientes bien?, estas helado, vamos hombre habla que me estás espantando - sacudi mi cabeza para por fin reaccionar
-vegetta, yo... bueno... - comencé a apuntar a la sala de cofres sin poder formular bien lo que quería decir
-¿qué pasa con mis cofres? ¿Tomaste algo doblas? Eso es ilegalisimo - se puso firme frente a mi y me levanto una ceja en espero de mi respuesta
-¿Eres Batman? - fue lo único que pude decir, mi cara solo mostraba asombro con una pisca de confusión, no sabia que estaba pasando
El ojimorado soltó un suspiro mientras masajeaba el puente de su nariz -¿qué es lo que estás diciendo Doblas? Que ko te entiendo - claro que me entendía pero se hace el que no sabe
-Claro que entiendes, no te hagas, ahí tienes una sala oculta con un traje y cosas de súper héroe - estaba eufórico, esto era sorprendente, vegetta es un ¿héroe?
- ¿ENTRASTE A MI SALA SECRETA? PERO ESO ES ILEGAL, NO PUEDES PASAR POR AHI, HAY PUERTAS CHAVAL- nunca había visto tan alterado a vegetta, ¿por qué le molestaba tanto?
- a ver no, tu dejaste la puerta abierta y yo entré, la culpa la tienes tu- si el se iba poner testarudo y podía ponerme peor
-pero si eres un aprovechado- eso me dolió - con que derecho te pones a revisar mis cosas, eso es privado cabezón-
-¡Así! ...pues creo que es mejor que me vaya y deje de aprovechar de ti, no lo crees - me comencé a ir enojado, maldiciendo entre dientes, pero que le pasa a ese.
-Doblas, espera que no te quería hablar así- vegetta comenzó a seguirme
-NO, ya lo dejaste en claro, que me entrometo en tus cosas y que soy un aprovechado, pues te puedes quitar ese pendiente, me voy, adiós vegetta- salí corriendo de su horrible mansión lo más rápido posible para evitar que me detuviera, cosa que creo que no haría.
antes de llegar a mi cada pase comprar provisiones, ya que ya hace mucho que no estoy en mi casa y mis mascotas me debían estar esperando, compre solo lo necesario, comi y alcohol.
Porque las penas con alcohol se olvidan
Era un verdadero tonto, otra vez y creer que hoy iba a compartir cama con el, menudo bobo.
Apenas llegué a mi casa, salude a mis perros y cerdo. Nos servirá de cenar y luego me puse a llorar.
Esto me estaba ganando, dos decepciones en una semana era mucho para mi maldito vegetta, maldito mangel, me voy que hacer hetero por su culpa.
Abri la primera botella SALUD grite para luego tomarla de golpe.
Que hoy los olvido a todos, hombres, pfff decepciones más bien
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