Capítulos diez. [ESPECIAL 1/3]

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"¡Tú me mataste!"

Margo O'donell.

Miré a mi alrededor totalmente confundida y sin saber en dónde me encontraba. Demonios, lo que me faltaba, pensé.

Mientras mis ojos se tratan de acostumbrar a la oscuridad de aquel lugar, supe de inmediato que me encontraba en el bosque Hemirwood.

Ni siquiera sabía en cuál de las dos zonas estaba, observé el montón de árboles que estaban en aquel lugar y decidí alumbrar con la linterna de mi móvil, cuando desbloque el aparato segundos después la potente luz alumbró un árbol y de inmediato sentí un escalofrío en toda la espina dorsal gracias al repentino cambio de clima. Habia una fuerte corriente de viento y unos rayos que hicieron alumbrar todo el cielo gris.

Mis manos empezaron a temblar, no sabía si era por el frío que estaba sintiendo en aquel momento o por lo aterrada que estaba, no tenía idea del porqué me encontraba allí y cuál era el motivo de todo esto.

Con mi mano derecha empecé a mover el móvil por todos lados alumbrando la mayor parte de la zona para ver hacia dónde podía dirigirme y esperando que las cartas jugaran a mi favor para poder salir de aquel peligroso lugar. Heché un suspiro empezando a sentirme irritada y sobre todo agobiada. Mientras trataba de que mis pensamientos negativos no me dominaran di el primer paso y así mis zapatillas empezaron a caminar sin ningún rumbo alguno esperando poder salir de aquel bosque.

Daba pasos continuos sin necesidad de pararme en algún lugar, el cielo fue alumbrado nuevamente por un enorme relámpago y entonces segundos después se escuchó el ruido de los truenos por todo el lugar, haciendo que me quedara perpleja con aquello, le tenía demasiado miedo a lo último y entonces recordé las veces que llovía demasiado por las noches y gracias a los sonidos de los rayos siempre terminaba durmiendo con mi padre para tratar de calmarme.

Era algo que simplemente no podía controlar.

Traté de no prestarle atención al sonido y seguí caminando, esperando hayar la salida pronto y entonces escuché algo moverse entre las hojas marchitas que los árboles dejaban. De inmediato alumbre hacia aquel lugar dejando ver que no había nada.

«Tal vez es una rata, o una ardilla. Piensa positivo Margo. No te van a matar.»

Me di cuenta que mi respiración estaba bastante irregular y que mis piernas empezaron a flaquear, el miedo se estaba apoderando de mi y entonces decidí que no tenía que seguir alumbrando hacia un árbol donde no había absolutamente nada y que seguramente aquel ruido era causado por un animal.

Caminé unos metros más y me di cuenta que estaba aquella pequeña luz que habían visto con Dylan aquella noche que fueron a la zona... sur.

¡Estaba en la zona sur del bosque! ¡Maldición!

Miré a mi alrededor nuevamente esperando a ver si se encontraba aquella persona encapuchada que habían visto con mi mejor amigo y entonces el miedo se apoderó de mi y sin darme cuenta empecé a correr, no sabia hacia donde, tal vez hacía aquella pequeña luz que era lo único visible que tenía en aquel lugar oscuro. Tropecé unas cuantas veces gracias a las rocas que se encontraban escondidas entre las hojas y continué corriendo ignorando que me empezaba a faltar la respiración y que mis piernas ya no soportaban más el dolor.

Y entonces lo vi.

Era una cabaña, una cabaña en la zona sur del bosque.

Dejé de correr y entonces pensé si era buena idea entrar ahí, aquel lugar estaba hecho de madera y las luces de adentro estaban prendidas dado a entender que había alguien, la puerta principal estaba abierta, entonces... ¿era buena idea entrar? No sabía que hacer en aquel momento.

La desaparación de Melody Marshall © ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora