⚣ ❝ Asalta Cunas¡! ❞ ⚣

° Candy Shop. ° .6.

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San se encontraba en los brazos de YunHo.
Después de que este último se arreglará con el hermano de San se habían dado un fuerte abrazo.

- ¡Asalta Cunas.!- Grito un dramatico JongHo apuntando a la pareja que se estaba abrazando.

- ¡No grites!.- HongJoong le había propinado un zape en la nuca al más joven,riendose de por medio.

- Pero Hyung~...- Chillo cual cachorro regañado.

- Ay,ya cállate,cuando yo vivía acá,esta casa se respetaba.- Y mamá MinGi hace su aparición,con sus brazos flexionados sobre su cintura a sus costados correspondientes.

❝Oh,pero porsupuesto.❞

Pensó sarcásticamente San mientras viraba los ojos al compás que el y su novio abandonaban el abrazo.

- Ash,pareces un anciano amargado de noventa años,Song MinGi.- Comento un despeinado)? Seonghwa entrando a la habitación.

- Wow,¿Y a ti que te paso?.- Musitó YunHo riendose (en toda la extensión de la palabra)de Seonghwa.

Seonghwa lo miro con ojos asesinos,pero se limito a abrazar por detrás a su novio y posar su mentón sobre la cabeza de este.

Ahora San,quería que YunHo hiciera eso.

- Pregúntale a tu cuñadito amargado.- Bufo el de oscuros cabellos.

La mayoría en la habitación rieron,ya se podían imaginar la escena entre MinGi y Seonghwa.
MinGi tirando del cabello de Seonghwa con si de un tira y afloja se tratase.

La habitación se avivó con las risas de los amigos y amantes en cuestión de segundos,pero aún se sentía algo vacía.

Hacía falta un Jung WooYung.

Y San y JongHo lo sabían.

- Hyung~...- Llamo JongHo a Seonghwa.

- ¿Qué pasa niño?.- El alto se inclino un poco para escuchar mejor a su dongsaeng.

- Es que...siento que hace falta WooYung...- El más bajo mordió su labio un tanto apenado.

Seonghwa elaboró rápidamente una mueca,reincorporandose y mirando al rededor.
El menor tenía razón.
❝¿Dónde se había metido ese cabeza de berenjena?.❞

Realmente...se sentía vacío sin el de cabellos morados y risa aguda.

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El mencionado y extrañado muchacho de cabellos morados caminaba nostálgico por las calles de la gran Seúl sin rumbo alguno.

Un ataque de estornudos lo azotó sin previo aviso,viéndose realmente cómico, repartiendo estornudos que se podían escuchar con facilidad desde ahí hasta la cuadra siguiente.

Un lindo chico rubio se dedicó a decir un "Salud" a cada uno de sus estornudos,teniendo que detener su andar en la calle para esperar a que el morados cabellos terminará.

- Wow, gracias. Si fueras uno de mis amigos supongo que ya me hubieras dado un golpe.- Carcajeo diminutamente el más alto mientras se rascaba la nuca.