Cristal Dorado

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A veces la vida da sorpresas, eventos que no esperas, que te dejan tambaleando momentáneamente, que pueden desviarte de la ruta planeada.

Siempre había creido que esos eventos ocurrían de manera muy escasa, que no tendrían gran impacto en su vida "sin embargo aquí estoy" En una oficia, mí oficina y enfrente mío estaba la cabeza de la compañía que me empleaba.

Era pasado el mediodia, en una oficina de la empresa Seda Dorada, con sede en Tokio.

–¿Hikigaya-kun me estás escuchando?– era impaciencia lo que se escuchaba en su voz

Parada frente a mí, una mujer hermosa de cabellos dorados y ojos verdes, parecía impacientarse notablemente, observé como cada segúndo que pasaba perdía la poca paciencia que tenia, "¡Tengo miedo, mucho miedo!"

–disculpe señorita Yumiko– observé de reojo como parecía disminuir su tensión corporal y se relajaba --sobre los informes que menciona, los envié a su oficina está mañana-- que fastidio es comportarse de manera tan formal, pero si no lo hiciera sería severamente reprendido, por Miura, tal vez hasta torturado, nunca se sabe.

Ella se aclaró la garganta suavemente y su cara se iluminó levemente con una sonrisa --no entendí nada de tus informes-- dijo suavemente sin perder su sonrisa, como si no fuera su problema y no tuviera responsabilidad por ello.

Definitivamente Yumiko Miura podría desesperar a cualquiera con esa actitud, pero ya estoy acostumbrado --está detallado en cada informe, las estrategias de negocios para llevar a cabo con cada cliente, deberías revisarlas nuevamente-- observé a Miura revisar rápidamente los informes que llevaba en su mano, podría jurar que finge leerlos, tranquilo hachiman, respira profundo, no te alteres --si tienes alguna duda sobre alguno de los informes, puedo aclararla para ti--

Yumiko termino de ojear los informes y observo fijamente a su empleado modelo, el retorcido hikigaya hachiman se conocían de la escuela, sin duda alguien siniestro, o peor que eso, ella sin duda lo creía como muchos en aquellos días, sin embargo, pudo conocer más allá de lo que se veía en la superficie, un diamante en bruto alguien especial sin duda, alguien a quien le debía mucho -- si, me gustaría que me aclares algunas cosas, quiero estar bien preparada para cerrar estos negocios --

Ella observaba atentamente todo lo que el le decía, sus gestos, los ligeros movimientos de sus manos, mientras explicaba todo, sin duda, a ella le agradaban estos momentos, conocía perfectamente los informes que le entrego está mañana, los había memorizado rápidamente.

Siguió explicando los informes detalladamente --el lunes 25 llegará una comitiva inglesa, dejé por escrito el protocolo a seguir con ellos, por la información que dispongo vendran 3 empresarios importantes, sus perfiles están detallados en los informes y la manera de proceder... -- ella lo escuchaba atentamente

Sin duda el tenía un don para leer a la gente, anticiparse y poderlos convencer de alguna extraña manera siempre encontraba la forma -- bien Hikigaya-kun, creo que entendí, si llego a tener alguna duda te informaré para que vengas a mí oficina--

Lo vio relajarse visiblemente y por un breve momento pudo ver su sonrisa, ella también sonrió, pero en vez de retirarse se quedó sentada en esa oficina sin moverse un centímetro

el la miró confuso -- ¿necesita algo más señorita Miura? -- "vamos vete a tu oficina de una vez, estas crispando mis nervios"

Ella sonrió, le gustaba ponerlo nervioso -- no, no necesito nada más Hikigaya-kun -- adoraba lo lindo que se veia, como un animalito asustado que no sabe dónde esconderse o hacia donde correr -- ¿y tu necesitas algo? --

La pregunta parecería una broma, pero no lo era, ella no dudaría en cumplir los caprichos de su empleado favorito, por varias razones que no necesitaban ser analizadas en este momento.

Oregairu, Cristales MulticolorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora