EUPHORIA

FELICIDAD Y EUPHORIA

Era la semana antes de comenzar las clases, precisamente el día siguiente de la llegada de Estela. Ella decidió salir, no le gustaba mucho estar en esa casa y caminar le haría bien sobre todo cuando no tomaba sus pastillas. Sus emociones cambian repentinamente: estaba enojada pero luego se sentía tranquila, estaba triste pero después feliz... eso a Estela podría decirse que le gustaba y no le importaba si a los demás le afectaba o pensaban qué estaba completamente loca. El no saber como manejar sus emociones le hacía casi olvidar que su vida era una mierda, pero no del todo... para eso necesitaba drogas. Desafortunadamente no sabía quién se las podría vender, por eso decidió optar por algo de alcohol, eso sería muy fácil de encontrar.
Mientras caminaba vió una tienda donde podrían vender lo que buscaba: afuera se encontraba un chico sentado fumando, decidió no prestarle mucha atención y entró. Un chico muy pero muy joven se encargaba de la tienda, algo muy loco que pero a Estela no le podía importar menos; el niño hablaba con una chica y le mostraba unas pastillas.

-¿Y tu quien eres? ¿Que quieres?- dijo el niño notando que Estela miraba las pastillas.

-Quiero lo que le estás dando a ella- dijo Estela inexpresiva.

Ella se acercó, estaba al lado de la chica la cual estaba algo sorprendida, esperó hasta que el niño le entregará las mismas pastillas.

-Son 120- dijo el niño.

-Fez dijo que lo pagaría- dijo la chica.

-Fez no paga por nadie- dijo el niño.

-Un descuento post-rehabilitación, pregúntale- dijo la chica.

-Le preguntaré porqué eres una mentirosa- respondió el niño.

La chica salió y Estela solo pagó y se fue.
Apenas estaba afuera, Estala vió a Nate que le pagaba al chico que estaba fumando antes.
Nate entró a su auto, donde se encontraba otro chico, se dio cuenta de que alguien lo estaba mirando y dijo -Lo hago por Rue- y levantó tre dedos como en Hunger Games.
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Estela llegó a casa, decidió no almorzar y fue a su habitación: tomó las pastillas, las hizo polvo y inhaló un poco por su nariz.
Mientras la droga hacía efecto alguien quería entra a su cuarto pero Estela había cerrado con llave, luego tocaron y escuchó la voz de alguien, no podía decir quien era, las pastillas si que eran buenas.

-Mi madre quiere saber si comes-

Estela aún no había perdido todos su sentidos y pudo responder -No-

Estela sentía que podía volar, poco a poco su respiración disminuía, en su mente todo era posible, por fin era libre de cualquier problema, sus emociones eran estables y lo único que sentía era felicidad y euphoria.
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Chapter 2
Fiesta en casa de McKay
Mientras Estela dormía alguien tocó a su puerta y la despertó:

-¡¿Que cojones quieres?!- gritó aún en su cama.

-Vístete, hay una fiesta- dijo Nate y viendo que Estela no respondía añadió -Papà me dijo que te llevara conmigo así podrías conocer tus nuevos compañeros-

-En quince minutos debes estar lista- dijo y se fue, antes pero Estela le mostró su dedo medio.

Estela estaba lista, bajó la escaleras y fue hacia la puerta donde Nate la estaba esperando. Entraron en el auto y no dijeron nada en todo el camino hasta que llegaron a la casa de McKay.

-Yo voy arriba, mis amigos me están esperando. Si necesitas algo no me llames, resuélvelo tú sola ¿si?- dijo Nate, pero nadie lo escuchó porque Estela ya se había ido.

10 minutos después...
Nate y sus amigos estaban hablando sobre Cassie: McKay salía con ella pero nunca había visto la fotos y videos de ella con otros chicos haciéndolo. En fin esa noche las palabras de Nate influyeron sobre McKay, y el y Cassie tuvieron sexo.
1 hora después...
La fiesta estaba llena de personas, Nate y Maddy se daban celos mutuamente y toda esa mierda.
Kat estaba teniendo su primera vez, Rue estaba disfrutando las drogas y Jules apenas llegaba a la fiesta.
En fin el imbécil y sobretodo gilipollas de Nate se puso agresivo con Jules, ella no se dejó y lo asustó tomando un cuchillo y cortándose.
En todo este tiempo Estela se encontraba acostada en una cama de una habitación desconocida, mientras disfrutaba estar drogada.
2 horas después...
Estela estaba bailando con un chico rubio hasta que alguien la tomó por la muñeca, era su hermano Nate:

-No te le acerques más a mi hermana, ¿¡Entendiste!?- gritó acercándose enojado al chico.

-Ya déjame en paz, me estoy divirtiendo... ¿O acaso quieres unirte?- dijo Estela riéndose y de repente comenzó a besar al chico rubio.

-Tu me obligaste- dijo Nate tomando Estela por la cintura y cargándola en su hombro como un saco de papas.

Estela no se quedó quieta, se movía sin parar y le trataba de dar puños en su espalda, pero no podía hacer mucho estaba colgada de cabeza abajo y estaba muy borracha.

-¡Nate, eres un estupido imbécil hijo de puta!- le gritó Estela muy pero muy cabreada.

-¡Y tú eres una puta zorra¡- respondió Nate dejándola caer en una cama.

-¡Que te jodan Nate!- dijo Estela mirándolo con odio.

-Nos quedaremos aquí y luego nos iremos, no puedo conducir y tu menos- dijo Nate, pero como había sucedido antes nadie lo escucho, Estela se había ido.

-¡¿Que le pasa a esta estupida zorra?!,está mas loca de lo que pensaba- dijo Nate acostándose en la cama.