Gonzalo
Indra y un par más de los pibes se levantaron para abrir la puerta cuando el timbre sonó por enésima vez en la tarde. Yo no me inmuté y solamente seguí mirando mi celular mientras mordía la cremallera de mi campera.
- Biza.- Me llamó Martín y yo hice un gesto para que hablase sin contestarle.- Vamos a pedir pizza antes del stream, ¿de qué la querés vos?
- A mí me da igual, escoged la que os pinte.- Hablé encogiéndome de hombros y suspiré mirando la historia de instagram que Valeria acababa de subir con su nuevo wacho. Apagué el celular antes de guardarlo en el bolsillo de mi pantalón. No quería ponerme mal por ella otra vez y joder la noche con los pibes. Estaba dispuesto a pasarla bien.
Me coloqué bien las gafas mientras los pibes que habían ido a abrir la puerta volvían junto a nosotros y sonreí al ver a Mauro llegando a mi lado.
- ¿Qué onda, amigo?- Saludó con una sonrisa, chocando mi puño y yo le devolví el gesto.
- Todo bien, ¿vos?- Contesté, pero no escuché su respuesta porque mi mirada se cruzó con la de su amiga densa que apareció mirándome fijamente con una sonrisa de oreja a oreja. "No puede ser".
- Hola, Gonzalo.- Habló con la sonrisa más extraña que había visto nunca. Me daba rabia su manera de sonreír, pero a la vez era hermosa.
- Hola.- Respondí cortante y automáticamente me di la vuelta girando en mi silla para llamar a Indra.- ¡Eh, Bhavi!- Exclamé y él caminó hasta mí agarrando una lata de RedBull en el camino.
- Dime, lindo.- Sonrió llegando junto a mí y yo le devolví la sonrisa.
- ¿Que onda la amiga de Mau? ¿La conoces?- Susurré, aunque dudaba que por encima del ruido que hacían los pibes alguien lograse oírme.
- Me la acaba de presentar, ¿por qué? Es linda.- Sonrió golpeando mi hombro y yo negué rápidamente con la cabeza.
- Nada que ver.- Exclamé y mi amigo me miró confundido.- La conocí el otro día y es re densa mal.- Expliqué.
- Bueno, seguro es re buena onda.- La defendió él y yo hice puchero mirando a otro lado.
- Ahora seguro te pones de su parte, ¿no?- Fingí estar molesto, ocultando una sonrisa.
- Uh, sos re ortiva.- Rió él.- No te pongas celoso, yo solo tengo ojos para vos.- Jodió y yo golpeé su hombro.
- Yo me voy a quedar acá, no quiero volver a hablar con ella.- Hablé firme después de un momento de silencio, encogiéndome de hombros.
- Dale, Gonza, sos un gil.- Se quejó Indra agarrando mi brazo y literalmente arrastrándome hasta donde estaban los otros pibes.- Seguro que es un amor.- Me susurró al oído antes de dejarme al lado de Sofía.
- ¿Qué onda?- Sonrió ella con una lata de RedBull en cada mano.- ¿Querés una?- Preguntó ofreciéndome una de ellas y yo arrugué la nariz. Incluso su voz era insoportable.
- No.- Contesté seco y ella hizo una mueca.
- Bueno.- Murmuró encogiéndose de hombros con la mirada clavada en el suelo. Yo oculté una sonrisa tras el cuello de mi campera, por fin tenía la situación bajo control.- Sos re frío.- Observó poniéndome tenso y acto seguido golpeó mi brazo.- Igual Mauro ya me contó de vos, aunque vos no querás hablar.
- ¿Ah sí?- Pregunté irónico, alzando una ceja que no sabía si se llegaba a ver tras mi gorra y mis gafas.- ¿Qué te contó?
- Que estás re bueno sin gafas y sin gorra.- Habló directa y yo no tenía muy claro si era joda o lo decía en serio, así que simplemente me mantuve en silenció y le dí la espalda para caminar hasta Martín.
