Y en tus ojos veo
lo que los mis siempre anhelaron
sin embargo, desconozco
si es el momento indicado.
Y que te quiero
y que me quieres
eso no se puede negar
nuestras almas están a gusto
danzando par a par.
Y ha de ser cosas del destino
de la suerte o del azar
que hoy aquí, cuatro años después
nos hemos vuelto a cruzar.
Tus besos cálidos
tus abrazos con sabor a tranquilidad
tus mimos en la pierna
sufro psicosis de felicidad.