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El cáncer de hueso en su pierna izquierda estaba en primera fase, por lo que los doctores le recomendaron reemplazar el hueso por uno bovino. JaeBum accedió rápidamente, pues podría volver a la normalidad y seguir siendo un increíble bailarín o seguir dándole sexo bueno a su novio, sin una prótesis.

Ya estaba listo para entrar a quirófano, estaba nervioso, su vida cambiaría si algo salía mal, así que esperó a que su novio llegara para darle un fuerte abrazo y grandioso beso. Cuando su puerta se abrió, empezaron a entrar varias personas con la camiseta de su equipo de Voley. Finalmente entró su pareja con un lindo ramo de flores de girasoles.

— las plantamos juntos y luego no dejábamos de comernos las semillas. — dijo riendo. — cuando salgas, podemos plantar muchas más.

— ven aquí, bebé. —murmuró con una sonrisa. Su novio se acercó a su camilla, dejando las flores en el sillón. — te amo.

— y yo a ti. — le sonrió, dándole un beso en la mejilla. — y si sale todo exitoso, iremos al Mc'Donals por una cajita feliz. Será una figura de, no lo sé, quizás de Bob Esponja.

Todos rieron y charlaron unos pocos minutos, pues JaeBum fue a su cirugía, dejando a su novio JinYoung angustiado pero a la vez esperanzado. Las horas transcurrieron y llegó todo a su fin. Un residente salió a dar la buena noticia de que todo había sido un éxito. El pelinegro suspiró de alivio, apartado del equipo de su pareja que estaba celebrando con abrazos.

— puede pasar a verlo. — el chico asintió con una sonrisa y fue al cuarto de su novio. — despertará en cualquier momento.

Ella los dejó a solas. JinYoung se sentó a su lado, empezando a ordenar el cabello de su lindo y operado novio. Éste abrió lentamente los ojos, regalándole una tierna sonrisa.

— salió todo bien. — le dij su novio, otorgándole un tierno beso en la frente.

Aquel día maldito, aquel día que hasta hoy en día Park JinYoung aborrece con su maldita alma. El dolor en la pierna de JaeBum era controlado por opioides, lo que se supone debió ser un medicamento terminó siendo su adicción favorita. Desde ese día ya habían pasado 3 años. JaeBum no presentaba ningún tipo de cáncer a la fecha, estaba curado y su pierna estaba tan fuerte como su adicción. Lamentablemente, ambos se seguían amando, así que se mudaron juntos a sus 18 años, dejando una gran preocupación en los padres de ambos jóvenes. Una terrible decisión, pese a todo. Sexo y drogas, a eso se reducía su joven vida. JaeBum no podía mantener un empleo, así que simplemente empezó a gastar el dinero de su universidad, sin embargo, JinYoung intentaba hacer todo lo posible por tener una falsa vida equilibrada.

Pese a todos los intentos, pese a toda la fuerza de voluntad reunida, ninguno logró dejar la adicción hasta llegar al horrible límite de probar las sales de baño. JinYoung, por suerte, se espantó. Por fin lo decidió y retrocedió. Su novio casi no despierta de esa. Lo había llevado al hospital y pidió, rogó por ayuda, ya no quería tener esa vida, ya no quería estar al borde de la muerte o volver a ver a JaeBum morir.

— dejaré las drogas, te lo prometo, pero no te vayas. — suplicó JaeBum mientras tomaba el bolso de su novio. — no sé qué haría sin ti.

— dijiste eso 8 veces, y tuviste 8 recaídas en una semana. — escupió enojado. — JaeBum, me tomé el año sabático para reunir el dinero suficiente para comprar mis libros, no por opioides, cuidé todo lo posible mis ahorros, pero usaste mi dinero a mis espaldas. Yo ya no puedo seguir. Yo logré salir adelante, pero tú solo eres esclavo de las drogas. Volveré cuando seas mi JaeBumnie, cuando seas mi novio. No quiero estar expuesto.

— Jinnie, estoy sobrio, lo he estado una semana. Me estoy mejorando.

— te estás desintoxicando. Pero en la semana 2 te escaparás y te drogarás y yo estaré esperando día y noche sin saber de ti... ya te vi morir una vez, no quiero una segunda.

— pero, Jinnie...

— adiós, JaeBum...

Nunca pensó en que ese debió ser el final, no, nunca. Amaba a su novio, amaba cada cosa que él le entregara, amaba los momentos que pasaba con él, pero no lo suficiente para perderse a sí mismo. Logró encontrar el amor propio que necesitaba para salir adelante, y ese amor debe nacer de sí mismo, cosa que JaeBum no entendía, así que no podía hacer nada por él.

Con el paso de los años, logró ser un médico cirujano, especializado en neurología, era algo más sofisticado y limpio. No se permitió tener parejas o aventuras, él ya tenía a alguien para siempre, sin mencionar de que nunca olvidó a JaeBum. Mantuvo contacto con su madre y algunos amigos de él para saber su estado. Lo último que supo fue que había sido internado luego de que la última recaída.

Bien. JinYoung había empezado su residencia como neurólogo, ganaba un buen pago, era respetado y tenía amigos confiables, pero más importante que nada, controlaba los opioides en sus pacientes. Siempre sacrificaba tiempo con su pequeña familia para evitar que familias se quebraran, pero aún no es tiempo de hablar de eso.

Trabajar en un hospital, teniendo su droga muy cerca, susurrándole, acariciando su piel, no iba a negar de que estaba más que tentado, así que siempre iba a sus reuniones y llegaba a casa a abrazar a su familia. Ojalá JaeBum hiciera algo parecido, es más, siempre tenía miedo de ir a urgencia y le dijeran que el amor de su vida estaba agonizando.

— la sala de urgencia no muerde. — le dijo uno de sus compañeros mientras entraba a dicha área. — anda, pidieron consulta a neuro. — asintió en silencio y entró. Fue a la isla donde estaba el paciente y empezó a checar su estado.

— ordenen T.C y llamen a ortopedia para estabilizar su espalda. — los jóvenes residentes asintieron mientras seguían las instrucciones para salvar una vida. — ¿cuál es su nombre?

— Im Changkhyun. — primo de JaeBum.

Iba a ser una noche interesante y muy larga.

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La historia consta de 6 caps.
Amo a Amelia, solo eso ♡

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How To Save A Life (BNior)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora