"She" ※ Michaeng ※

Ella (parte 2)

*Ha muerto - ha muerto - ha muerto* 

Solo esas palabras retumbaban en mi cabeza. Sin darme cuenta mis manos estaban temblando, no podía escuchar nada con claridad, un mareo invadió mi cabeza y por un momento creí que iba a caer.

*¿Quién ha muerto?* Pensé. *¿Rosé? ¿Sana? ¿Quién? Eran las únicas que sabían de este lugar*

"¿Dahyun?" pregunté intentando hablar con ella, pero al parecer la llamada había terminado ya hace unos segundos.

Mi respiración empezó a fallar, sentía mucho frío, en parte por mi desnudez y en parte por la noticia que me acababan de dar.

Intentaba tomar aire pero parecía que mis pulmones se habían cerrado. *No me puede estar pasando esto* pensé.
*Respira, Chaeyoung, respira* traté de calmarme yo misma.

Y ahí sentí como volví en mí. Tomé una buena cantidad de aire oxigenando mis pulmones y volví a oír con normalidad. Ya había pasado.

Con mis manos temblorosas cogí el celular y marqué el número de Rosé, necesitaba saber que ella estaba bien, al menos podía comunicarme con ella, con Sana no había forma de saberlo.

RING - RING

El teléfono sonaba, sin embargo nadie contestaba.
"CONTESTA" grité mientras volvía a marcar su número.

"¡Mina, tenemos que irnos ahora!" dije y empecé a buscar mis prendas tiradas en el suelo, cogí una playera y antes de ponérmela volteé a ver a Mina.

Ahí me di cuenta de que algo pasaba, mi hermoso ángel no se encontraba bien.

"Ch-Chaeng" me dijo mientras intentaba controlar su respiración, ella seguía recostada en la cama. 

"¿Mi amor?" le dije mientras corría a su lado. Dejé el celular, ahora mi prioridad era ella.

"¿Ha mu-muerto?" preguntó casi sin poder hablar "No-no puedo res-respirar". Dijo ahogándose.

"No, no, Mina, bebé tienes que tranquilizarte ¿ok? todo estará bien" intenté ayudarla a controlarse, le estaba dando un ataque.

*las pastillas pensé*

"¡Mina tus pastillas, ¿en dónde están?!" le pregunté apresurada mientras revolvía las cosas en la habitación. Pero al parecer Mina no estaba en condiciones de responderme.

Tiraba las cosas que encontraba en mi camino. "¡MIERDA!" grité desesperada al no encontrar nada.

Volteé a verla y en ese momento mi corazón se paralizó, estaba atónita por lo que estaba viendo y seguramente pasaron unos segundos antes que pueda asimilarlo. Nunca la había visto en ese estado.

El cuerpo de Mina estaba rígido, su cabeza se arqueó hacia atrás y después de unos segundos así, su cuerpo empezó a moverse desenfrenadamente. Estaba convulsionando.

"No, no, no, mi amor, bebé, todo estará bien" le decía mientras temblaba y mis lágrimas caían.

No sabía qué hacer, me estaba desesperando, esta sensación me estaba matando.  ¿Qué se hace en estas situaciones? 

Cogí el celular de Mina y después de luchar con mis manos temblorosas logré marcar a emergencias.

Me dolía verla así, estaba sufriendo y no podía hacer nada para ayudarla. 

"¡AYUDA! ¡NECESITO AYUDA!" grité desesperada. En una mano traía el celular y con la otra trataba de sujetar su cabeza para que no se haga daño con los movimientos bruscos.