5. Certezas

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▪︎ Eren Jaeger ▪︎

Desde las desapariciones que acaecieron durante la visita del conocido del Sr. Ackerman hace ya algunos años,las leyes en el condado de Somerset tuvieron cambios considerables.
Uno de ellos fue la prohibición de salir después de caer el ocaso. Sólo se podría con un permiso especial del alcalde del municipio,el Sr. Smith.

Estuve tentado de quebrar esa norma. Tenía que confirmar que el libro me engañaba,saber que Jean había llegado con vida a casa de su tía Riko.

Los nervios me estaban consumiendo a medida que las agujas del reloj dejaba pasar las horas sin compasión alguna.
Caminé sobre mis pasos una y otra vez haciendo crujir el entarimado de madera del suelo de mi habitación. Crispando con ello mis ya desquiciados nervios.Gruñí,me exasperé,pero de nada sirvió,tuve que esperar resignado a que amaneciera un nuevo día.

El alba me sobrecogió dormido. La noche había sido demasiado larga y ni cuenta me di en que momento el sueño me había vencido.
Todos dormían en casa cuando me marché. Me refugié en la sinuosa  niebla típica de Glastonbury. El viento gélido golpeaba con violencia sobre todo lo que encontraba a su paso,mis cabellos no fueron una excepción.
Los recogí en una coleta baja para intentar rescatarlos de esa maraña en la que se estaban convirtiendo.

Un profundo sentimiento de tristeza me invadió al recordar lo mucho que le gustaba a Jean verme con ese peinado.

-Estás vivo,estás vivo -repetía una y otra vez en mi mente intentando convencerme de ello.

Encaminé mis pasos con decisión
hacia la vivienda de la Sra. Riko,con la leve esperanza de encontrar a Jean con vida.

Me prometí a mi mismo deshacerme del libro en cuanto llegara a casa. Después de lo sucedido la noche anterior había perdido todo el encanto que me enamoró siendo apenas un niño.

-¿Eren? -la conocida voz del Sr. Smith hizo detenerme en seco.

-Erwin -titubeé.

-Deberías estar en casa a esta hora,¿dónde vas?

-Me desperté,no podía dormir y...

-¡Lo encontramos! -gritó Zacharius,agente de policía de Glastonbury
-Algún animal se desquitó con él. Está destrozado.

-Vete a casa,Eren -ordenó el edil con una nube de tristeza en su rostro.

-¿¡Qué pasó!? -pregunté histérico.

Enfoqué mi mirada en uno de los callejones de la avenida principal,me temí lo peor al ver los rostros horrorizados de los agentes de policía.

-Por favor Eren,vuelve a casa -musitó
en voz baja nuevamente.

Apreté los labios,mi corazón golpeaba con fuerza sobre mi pecho y mi raciocinio se nubló por completo.

-Es Jean,seguro que es Jean.

Aceleré mis pasos dejando atrás a Erwin que intentaba alcanzarme.

Mi chico especial yacía en el suelo de aquel sucio y oscuro callejón,con el pecho completamente desgarrado.

Me arrodillé frente a él,unas finas lágrimas rodaron por mis mejillas al estrechar su cuerpo inerte contra mi pecho. Mi mirada se posó en las dos heridas profundas y simétricas de su cuello y la extrema palidez del cadáver.

La imagen fugaz del Sr. Ackerman pasó por mi mente. Un escalofrío recorrió mi columna vertebral al verlo sonreír con sus perfectos y afilados colmillos ensangrentados.

-Avisa al Dr. Jaeger -ordenó el edil a uno de sus subordinados -Tiene que certificar la muerte del muchacho.

La mano de Mike sobre mi hombro me hizo volver de golpe a la cruda realidad. Una realidad que me dolía como nunca imaginé.
Jean Kirschtein había sido salvajemente asesinado.

El señor Ackerman (Riren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora