"A-TRAPPED"

"Un respiro"

Una vez dentro de la sala, Mami lo invito a sentarse y encendió el pequeño televisor, dejando el control en la pequeña mesa de centro para después avanzar hacia donde se veía que era la cocina.

— Ojalá te guste lo que voy a preparar, tu solo siéntate y espérame unos minutos, verás que será algo muy delicioso...

Sonriendo y cerrando un ojo a Hideri, fue hacia la cocina y puso algo de agua mientras sacaba algunos ingredientes y se ponía a preparar algo de masa.

— Mientras cuéntame de ti, tu edad, y porque te gusta tanto vestirte de mujer?

Tenía mucha curiosidad sobre ese aspecto y sinceramente también era algo que la ponía de una forma que no podía explicar, tenía ganas de estar sobre de él pero estaba conteniendose bastante.

Hideri tomo asiento donde le ofreció lugar la chica sentándose en la orilla, colocando sus manos sobre sus piernas mientras observaba su entorno. Acomodo su falda para luego mirar hacia donde s había dirigido la chica para responder.

– Oh, esta bien. Ñam, ya hiciste que me diese hambre jeje

Oyó las interrogantes de la chica así que dando un suspiro, dio paso a responderlas sin imaginarse su quiera las cosas que ahora estaban pasando en la cabeza de la chica rubia de canelones marcados.

– Pues... Nací en las afueras de la ciudad, en un pequeño y humilde pueblito. Ya como te había mencionado antes, vivía con mis padres y hermana dedicándolos a laborar el campo. Todo bien hasta que un día, me vi al espejo, y simplemente vi que era demasiado lindo como para ser chico, y me compare con mi hermana. Fue allí donde entonces empece a imitarla, y bueno... Paso lo que paso, y tuve que irme.
Tengo 17 y bueno... Como mencione antes... Era demasiado lindo como para ser chico así que empece a vestirme así... Quiza como que le saque provecho a esa situación, abusando un poco de ella.

Terminada su respuesta, río levemente mientras le veía preparar lo que estuviese haciendo en la cocina.

¿Y tú? ¿Que me dices de tí?

Esperaba ansioso conocer mas profundamente a la chica.

Terminaba Mami de mezclar la harina con los huevos y la azúcar y rápidamente le dio forma para crear unas pequeñas trenzas de masa que pronto metió al horno.

— Bueno, yo me fui de viaje a Francia unos años y quedé completamente enamorada de todo, de la ciudades, de la comida, la gente, el idioma y por eso al volver de ese viaje estudie francés aquí, y por eso me metí a estudiar repostería francesa.

Tomo un par de tazas, para después poner las bolsitas de te y finalmente verter el agua y después entregarle una taza al chico.

— Yo tengo 19, y pues, te ves como de 15, ¿es raro no? Y si, tienes razón, pasas complemente por una chica...

Hideri escucho atento lo que decía la chica, mientras seguía observándola.

– Vaya, debió ser una experiencia única e increíble supongo.

Dijo para luego recibir aquella taza de te que la contraria le brindaba, al oír su edad, la miro con sorpresa, para responder.

– Vaya, eres mayor que yo... Pero para serte franco, empato mi respuesta con la tuya hehe

respondió para dar un sorbo de la bebida.

– Y pues... Sobre tu familia, como esta la situación? Te llevas bien con ellos?

pregunto, esperando que no haya tenido la clase de problemas que el paso, o quiza peores o de otra clase.

— Todo va bien, gracias por preocuparte, solo que decidí independizarme cuando entre a la universidad, y pues ellos me dieron un fondo que habían ahorrado por eso vivo aquí y abriré mi negocio...