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- Maldición Yoongi, esta fue la tercera vez que llegaste tarde esta semana

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- Maldición Yoongi, esta fue la tercera vez que llegaste tarde esta semana.  ¿Qué te pasa?  - preguntó Namjoon, mientras mordía un pedazo de su sándwich.

- No sé, simplemente no tengo ganas de levantarme.  ¿Sabes cuándo no tienes idea de qué hacer con tu vida?  Entonces, estoy en eso.

- Necesitas una novia.  - Se encogió de hombros, ignorando los sentimientos de su amigo.

- ¿Estás diciendo que ahogar mis heridas y problemas en una chica?  No gracias, no soy tú.

- Pero podría ser.  - le guiñó un ojo.

Yoongi solo rodó los ojos y se puso de pie, caminando hacia el baño.  Abrió la puerta y miró en todas las cabañas para ver si alguien estaba vacío.  Entró en uno de ellos y se sentó en el suelo, dejando que algunas lágrimas corrieran por su mejilla.  ¿Por qué no eras feliz?  Tenía dinero, iba a la universidad como le gustaba, rapeaba en su tiempo libre, podía acostarse con la chica que quería, era el capitán del equipo de baloncesto del campus ... Pero incluso con todo eso, sentía que no tenía nada.  Realmente nunca sonrió, y parecía que su corazón quería escapar al cuerpo de alguien más alegre.

- Namjoon tiene razón ... - Susurró para sí mismo.  - Yo necesito una novia.

Se levantó, se ajustó la camiseta y salió de la cabina, encontrando un par de zapatillas rosas en el fregadero.  Los tomó en su mano y los analizó, notó que "Jung" estaba escrito en la plantilla.  ¿Quién es el retrasado, quién escribe su apellido en las cosas?  Había al menos un centenar de niñas en el campus con el nombre de "Jung".  Y fue incluso bueno ... Con eso, podría tener una excusa para ir al salón de baile y ver a algunas chicas.  Con sus faldas cortas, y más pegadas al cuerpo.

Salió del baño sonriendo, decidido a encontrar al dueño de las zapatillas.  Había caminado mucho tiempo, hasta que encontró la habitación correcta.  La puerta estaba entreabierta, lo que facilitó que Yoongi viera a las chicas.  Uno era más hermoso que el otro, todos con un moño en la parte superior de la cabeza.  Lo abrió un poco más, poniendo todo el peso de su cuerpo sobre el asa.  Estaba en una posición cómoda, hasta que alguien decidió abrirlo desde el interior, haciendo que Yoongi cayera con todo en el piso.

- Dios mío, ¿estás bien?  - le preguntó un chico de cabello negro, con expresión preocupada.  - ¿Qué estabas haciendo apoyado contra la puerta así?

- Encontré esto en el baño.  - Levantó la zapatilla.  - Pensé que era de una chica aquí.

-- ¿Baño masculino?  - Preguntó el niño, Yoongi asintió, y luego se tocó: si estaba en el baño de hombres, solo podría ser de un niño.

- Ella ... Ella es mía, lo olvidé allí.  - Yoongi sabía que estaba mintiendo, sus manos temblaban.

- Minutos  - Le entregó la zapatilla al niño, aún sospechoso.  - Pero ... Si es tuyo, ¿por qué tienes una zapatilla negra?  Se levantó del suelo, aplastándose las manos sobre la rodilla.

El niño, que solía sonreír, ahora parecía preocupado, sin saber qué decir.  Se rascó la nuca con la mano libre, tartamudeando para hablar.

- Yo tengo varios colores d.  - Él sonrió de nuevo, haciendo que sus ojos se convirtieran en dos pequeñas rayas.  Gracias.

-- De nada.  - Y se fue, dirigiéndose hacia su clase, con desconfianza del niño y sin hablar con ninguna chica.

~ <> ~

- Creo que sé quién es ... ¿Es bajo?  - Preguntó mientras escribía en su teléfono celular, haciendo todo lo posible para prestar atención en el camino.

- Sí, tenía el pelo negro y ... me sacaron un ojo.

- Todos tenemos ojos sesgados, Yoongi.  - Habló y le dio una palmada en la cabeza a su amigo.  - Se llama Park Jimin, tomó clases de filosofía conmigo, pero cambió.  No sabía que era para el ballet, esto es interesante ...

-- ¿Por qué dices eso?

- No lo sé, simplemente lo es.  No es común que los niños tomen este tipo de clase, especialmente aquí en esta universidad.  Donde hay miles de personas homofóbicas y ...

-- ¿Él es gay?  Preguntó, levantando una ceja cuando entró en la habitación.

- Sí, no lo sabías?  - Dejó su mochila en la silla, tirándose sobre la cama.

- No. Pero ... no sé, dijo extraño.  Estoy seguro de que la zapatilla no le pertenece, era demasiado grande para su pie.  - Hizo lo mismo que su amigo, pero en su cama.

- ¿Miraste hacia abajo?  Maníaco.  - Le tiró la almohada a su amigo.

- No hables mierda ... ¿Por qué comparto el dormitorio contigo?

- No lo sé, ¿tal vez porque me amas?

- Cállate, Namjoon.

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𝐋𝐚 𝐙𝐚𝐩𝐚𝐭𝐢𝐥𝐥𝐚 𝐑𝐨𝐬𝐚 -(𝐘𝐨𝐨𝐧𝐬𝐞𝐨𝐤)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora