Romeo y Julieto

93 5 8
                                    


Era un día alegre en donde los estudiantes de la academia trabajaban con entusiasmo en sus proyectos. ¿Y por qué era así? Claramente era por el festival cultural que los tenía locos, alegres y emocionados. Todos los estudiantes trabajaban en diferentes proyectos, unos preparaban algo llamado 'el laberinto del terror' , otros trabajaban en un café maid y otros preparaban todo para hacer puestos de comida y demás.

El clima era agradable y solo faltaban dos días para que el festival comience. La directora estaba orgullosa del trabajo de sus estudiantes hasta que... un gran estruendo se escuchó fuera de la academia, justamente en la cancha de fútbol. Eso significaba solo dos palabras: Heiwajima y Orihara. Los estudiantes que en sus peleas lo destruían todo. 

La directora temió lo peor al igual que sus estudiantes y solo se les ocurrió una cosa...

-Guarden todo!!! que esos dos no entren al edificio!!!

Todos comenzaron a correr y a guardar la decoración de sus proyectos y stands, corrían y tropezaban con la esperanza de que sus proyectos no fueran destruidos en un abrir y cerrar de ojos. Los alumnos esperaron en silencio un momento y se dieron cuenta de que ya no se escuchaban ruidos amenazadores fuera del lugar.

-Directora, al parecer esos dos ya dejaron de luchar -dijo uno de los estudiantes

-Eso no puede ser... si no entraron aquí eso significa que... ¡¡Rápido!! ¡¡avisen al club de teatro que cierren sus puertas traseras!!

Dos alumnos corrieron hacia el club de teatro que se encontraba en la parte del fondo de la academia, pero al entrar se encontraron con lo que más temían. La escenografía estaba destruida, sillas y botes de pintura volaban por todas partes, y peor aún ... la obra que tanto les costó hacer fue destruida en un instante.

-¡¡¡Asquerosa pulga, vuelve aquí!!! -gritó el rubio Heiwajima

-Shizu chan no aguanta una simple broma. Solo dije que si te besaban se convertirían en sapos, hahahaha!!! eso es gracioso ¿verdad? -rió Izaya mientras esquivaba un bote de pintura que era arrojado hacia su cabeza.

Los dos estudiantes seguían metidos en su pelea que no notaron a la directora entrar, pero un grito firme de sus apellidos los hizo detenerse de  repente. Al detenerse y girar sus cabezas hacia aquella voz que los reprochaba, vieron la temible cara de la directora que los desaprobaba sin piedad.

-Heiwajima, Orihara. ¡¡Los quiero en dirección ahora!!

En ese instante aquellos dos solo pudieron pensar en una frase, 'la cagamos'.

.

.

.

.

.

.

.

Ambos jóvenes estaban sentados uno junto al otro en frente del escritorio de la directora, mientras esta con sus manos sobre el escritorio los miraba con cejas enarcadas, esperando a que hablen.

-¿Y bien? ¿no piensan contarme qué fue lo que pasó? -dijo con voz autoritaria

Ambos chicos se miraron para ver quien era el que hablaba primero. Como de costumbre fue Izaya quien comenzó a excusarse, diciendo siempre la misma frase.

-Usted sabe que este sujeto es un energúmeno sin remedio.

-Joven Orihara, desearía que me cuente lo que pasó y no que me describa a su compañero.

❤ Shizaya One Shots ❤ [Durarara]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora