5

147 25 0
                                    

Mi mente no dejaba de divagar en lo ocurrido anoche. Mis sentimientos están revueltos, tanto que se encuentran los unos con los otros de manera extraña.

He tratado de reflexionar acerca de todo lo que pasó la noche anterior, pero cada que lo recuerdo me sonrojo, porque si me soy totalmente honesto conmigo mismo, tengo que aceptar que todo fue increíblemente perfecto. Tenía que aceptar que disfruté bastante ese momento, y mucho más de la compañía de Taehyung; e incluso aquél espontáneo beso que robó de mis labios, creo que todo fue algo realmente interesante, una experiencia que no creí jamás vivir, y mucho menos con un demonio atrevido y muy guapo.

Así que, después de tanto pensarlo, me armé de valor y decidí volver a ir al mundo de los humanos esa noche.

—Pero... ¿Y si él no está ahí? —me pregunté con un poco de... ¿tristeza? No debería sentirme de esa manera, pero ya qué.

Al llegar al bosque mis latidos se descontrolaron, mi corazón iba bombeando sangre de manera acelerada, casi como el corazón de un colibrí, al preguntarme ¿De qué manera debería actuar? ¿Qué respuesta le daría al demonio? Y la que más me inquietaba de todas... ¿De verdad él asistiría? Las preguntas no dejaban de aglomerarse en mi cabeza y con ellas los nervios iban en aumento.

Todas mis dudas se esfumaron de manera instantánea cuando él nuevamente se hizo presente ante mi, siendo los nervios reemplazados sorpresivamente por una alegría extraña y entusiasmo.

Sorprendido, sin querer exclamé un: «¡VINISTE!», cargado de emoción pura, como un niño que espera a que su madre le traiga el juguete que tanto ha querido. Taehyung no pudo evitar reír ante mi reacción.

—Claro que vendría, ¿Creíste que mentía? —dijo mientras se acercaba a mí.

—Bueno... Yo...

—Es verdad, tenemos la habilidad de engañar con mucha facilidad, y sé que debido a eso es más difícil que nos crean cuando hablamos en serio. Pero, por esa misma razón cuando decimos la verdad tiene más peso que cualquier mentira. —hizo una pequeña pausa y me miró a los ojos. —Y cuando realmente queremos algo hacemos las cosas con más fuerza que ningún otro...

De pronto me sentí muy tímido a su lado, éste ser me hacía estremecer con sus palabras tan directas y fuera de lo común para mí, de verdad pienso que él tiene una personalidad avasallante, y lo peor es que él era consciente de ello, y parecía divertirse y disfrutar mucho haciéndome avergonzar.

—¿Y bien? ¿Qué buscas de mi? —preguntó, mientras acorralaba mi cuerpo contra un gran árbol.

—¿Eh..?

—Yo ya te dije el porqué estaría en este lugar. Porque me gustas, ¿Y tú por qué? ¿Acaso esperas otro favor de mi parte? —continuó él.

Yo... —comencé a sentirme nervioso nuevamente, trataba de esquivar su mirada a toda costa.

—Dime. —apuró.

Yo Apoyé mi mano derecha en su pecho, levanté lentamente la vista y me armé de valor para responder...

—Porque me gusta estar contigo.

Él pareció bastante sorprendido ante mi respuesta, seguro no esperaba que le dijese algo así, y más aún cuando dirigí mis celestes ojos a los suyos color avellanas. Y fue entonces mi turno de sorprenderme, al ver como aquél, gran y temible demonio de porte fuerte  y poderoso se había sonrojado seguramente por mis palabras.

Él sonrió amablemente y luego habló.

—Si me miras así haré lo que sea que me pidas... —tomó mi mano entre las suyas y la beso con ternura. Para mí él era un total misterio, quería saber más acerca de ese ser tal enigmático, porque sí, era atrevido pero a la vez muy dulce. —¿Deseas que vayamos nuevamente al pueblo?

—Me gustaría mucho...

—Entonces no perdamos más tiempo, quiero aprovechar cada segundo contigo.

Ese día fue igual de increíble que el anterior... O incluso más, gracias a que estábamos ocultos bajo aquél dulce hechizo...

PARADISE  | «Vkook»  [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora