Imagina con BTS: Friend Zone

Seokjin

Desde el día 1 en que llegué a ésta escuela, Seokjin se ha preocupado de hacer horrible mis días aquí.

Es como si estuviera obsesionado conmigo de alguna manera, y es gracioso porque es un chico popular y yo una alumna cualquiera.
Aunque he notado que le gusta fastidiar a todas sin importar cómo sean. Pero creo que éste año me toca solo a mí porque no se aleja ni un segundo de mi lado a excepción de cuando el timbre suena, ya que él va en el salón 4-C mientras que yo voy en el 4-A. Lo único bueno de todo.

Mi mañana iba de maravilla hasta que apareció frente a mí en el comedor de la escuela sentándose sin siquiera preguntarme si estaba ocupado o no.

- Disculpa, ahí está ocupado - solté fríamente esperando que saliera de mi vista.

- Pues ese alguien tendrá que buscar otro asiento - Nayeon llegó pero notó que su lugar estaba ocupado y no quedaba otro asiento en la mesa.

- Vete Jin, no eres bienvenido - ella sabía cómo me trataba este chico y por ello no dejaría que él se quede conmigo en ningún momento.

- Lo siento Nayeon, pero debo hablar con tu amiga - noté que Jin levantó un poco su mochila y Nayeon al verla se despidió abandonandome con Seokjin.

- ¡Nayeon! - intenté pararme para alcanzarla pero ella ya había salido corriendo del comedor para perderse de mi vista - Demonios... - balbuceaba molesta mientras tomaba mi mochila y el almuerzo pero Jin se levantó sorprendido.

- ¿A..a dónde vas? - se notaba desesperado por saber a dónde me dirigía, lo cual me pareció extraño.

- Lejos de tí - salí del comedor en busca de Nayeon o un lugar para almorzar sola pero venía con una sombra detrás mío - Aléjate Jin.

- No puedo - me detuve al escucharlo y lo miré fíjamente.

- Si tienes algo que decirme, hazlo ya - su apariencia de chico malo se fue de la nada y apareció una versión que nunca había visto de Jin. Un chico sonrojado y nervioso parado frente a mí, agarrando su mochila indeciso de si abrirla o no - ¿Entonces?

- No sé si sea el momento.

- Argh, sólo dilo - abrió su mochila y sacó de ella una caja que acercó a mi mano obligandome a tomarla - ¿q..qué es esto? - él seguía sonrojado cual tomate y solo se acercó para besarme la mejilla y salir apurado de ahí.
Quedé unos segundos mirando hacia el lugar por el que se había ido sin moverme de la impresión, pero cuando reaccioné abrí la caja y ví un delicioso muffin en ella. Lo acerqué para olerlo y al probarlo comprobé que era de chocolate y nueces. Tenía un sabor sabroso y dulce.

A los días siguientes, Jin había dejado de molestarme y comenzaba a saludarme cuando llegaba a la escuela mientras Nayeon se reía sola haciéndome creer que ella sabía algo que yo no.

- ¿Qué tramas niña?

- ¿Yo? Nada, nada - miró hacia un lado y empezó a alejarse de a poco - debo ir al baño, nos vemos en el salón - no dije nada y dejé que se fuera, pero al ver a Jin aparecer frente a mí a los segundos, comprendí de qué trataba todo esto.

- Hola Tn - sonreía de una forma dulce y alegre, algo poco común en él - ¿cómo estás?

- Bien... - lo miré sospechosa y aceleré mi paso.

- Nos vemos en el almuerzo - noté como agitaba su mano sonriente y luego lo perdí de vista.

- No puede ser - solté un suspiro y traté de convencerme de que no estaba pasando lo que creía que pasaba.

A la hora de almuerzo iba a ir por mi comida con Nayeon pero se ofreció a traerlo por mí. Y aunque al inicio no quería quedarme sola en la mesa porque sabía que Jin vendría, ella insistió y terminé quedándome sentada en el gran comedor.

Minutos después ví a Jin entrando al lugar y me puse un tanto nerviosa e intenté que no me viera para que no se acercara a mi mesa y mientras intentaba evitar que nuestras miradas se encontraran noté a Nayeon acercarse a la mesa de otras chicas solo con una bandeja de almuerzo.
¡Me había dejado sola y sin almuerzo!
Me molesté por eso y noté que Jin me vió, así que tomé mi mochila rápidamente y me fuí de ahí para estar sola un rato.

- ¡Tn! - ya no estaba entendiendo nada de lo que estaba pasando, quizá no ocurría lo que yo creía - ¡Tn! - me dí la vuelta hacia quien me gritaba y "sorprendentemente" era Jin.

- ¿Qué? - verlo con sus mejillas rojizas y nervioso frente a mí era como un deja vu - ¿por qué has estado actuando tan extraño al igual que Nayeon? - él rascó su nuca y luego me observó tratando de decirme algo con la mirada.
Nuevamente me convencí de lo que quería lograr al tratarme tan bien.

- Toma - agarró mi mano y me hizo afirmar un pequeño pote de plástico pero esta vez no se fue de allí.

- ¿Y esto? - al abrirlo noté que había comida en él.

- Te preparé el almuerzo - aunque no me miraba podía ver un brillo en sus ojos que lo hacía verse tierno.

- Gracias... p..pero no puedo aceptarlo - levantó su rostro sorprendido y acerqué el pote hacia él.

- No seas terca, me esforcé mucho preparándolo - sonrió y esta vez era yo quien estaba sonrojada - además... - dió unos pasos hacia mí y me observó fijamente - es una muestra de mi amor - sentía mi corazón palpitar fuertemente por los nervios sobre qué decirle.

- Jin...

- Hace mucho he querido decirte que me gustas y creo que ahora es el momento - sus ojos recorrían mi rostro y su mano se acercó a mi mejilla para acariciarla mientras intentaba acercarse a mí pero puse mi mano contra su pecho.

- Es por eso que no puedo aceptar tu almuerzo - sabía que era cruel devolvérselo pero era lo correcto o solo lograría ilusionarlo más de lo que ya se notaba que estaba - Lamento ser directa, pero no puedo corresponder a tus sentimientos Seokjin - al decir su nombre el brillo de sus ojos se fue de inmediato dejando aparecer una mirada triste en él.

- Entiendo - se alejó de mí para darme espacio y apretó su labios como si tratara de contener la tristeza mientras sus orejas estaban de color rojo.

- Lo siento...

- No, tranquila - nos quedamos callados un rato y luego acerqué levemente mis manos con el almuerzo hacia él - si no quieres que me sienta peor, por favor acepta el almuerzo - sonrió como pudo y sentí algo de pena al verlo así