Imagina con BTS: Friend Zone

Taehyung

Hace unos meses atrás conocí a un chico en el parque durante la temporada de otoño.
Él iba a tomar fotos y yo al principio sólo lo miraba hasta que un día me habló y tuvimos una corta pero linda charla.
Al día siguiente fue igual. Hablamos y nos conocimos un poco.
Era un chico agradable y su nombre era tan hermoso como él.
Kim Taehyung...
De sólo pensar en él la piel se me eriza o así era antes.
Incluso su voz me tenía embobada cada vez que lo escuchaba hablar.

Me pareció lindo desde el primer momento en que lo ví y así siguió hasta el final.

- ¿Puedo tomarte una foto?

- ¿A..a mí? - él rió y me mostró su peculiar sonrisa que me parecía perfecta.

- Claro que a tí. No estoy hablando con nadie más - me avergonzó su comentario al comienzo pero luego acepté.

- ¿Qué debería hacer? - me ponía nerviosa que su mirada se encontrara totalmente fija en mí.

- Sólo sé tú.

¿Solo ser yo?

- Vamos, Tn. Eres hermosa no lo desperdicies - fueron esas simples palabras las que me sonrojaron y formaron parte de la foto que me tomó - Bella - Tae apreciaba la foto felíz, mientras yo moría de vergüenza por sus comentarios.

Y fue ahí que entendí que me estaba enamorando.
Nuevamente caí en el juego del amor y en el de la persona equivocada.

- Hola - un nuevo día. Una nueva charla con Kim - Es genial que la primavera se acerque - yo sonreí como respuesta - ahora podremos ir a comer helado cuando el Sol comience a brillar como debe.

- ¿Y por qué no vamos ahora?

- ¿Estás loca?

- Quizá - su sonrisa cuadrada era infaltable en nuestras "citas" o así llamaba yo a nuestros encuentros en el parque.

- Hay como 16 grados bajo cero y tu quieres helado.

- No exageres. Hoy no hace tanto frío, además comer un helado no te matará.

- No pero me hará enfermar - tomé su brazo riendo y lo llevé hasta un puesto de helados que se encontraba cerca.
El pidió helado de crema del cielo.
Nunca había visto ese sabor de helado por lo que decidí comerlo junto a él.

- Vaya es muy rico éste sabor y sin mencionar que tiene un nombre bastante peculiar... como tú - le dí una pequeña sonrisa y comencé a caminar.

- ¿Mi nombre te parece peculiar?

- No, tú - él se avergonzó un poco y bajó su mirada sonriendo.

- Quizá por eso te gusta este helado.

- Y cómo no si es crema del cielo - miró hacia el cielo y cerró sus ojos disfrutando del sabor de su helado.

- Debe ser porque eres un ángel.

- ¿Un ángel? ¿Qué tendría que ver eso? - rió levemente sin entender.

- Todo lo del cielo te gusta - nos miramos por un momento y sus ojos brillaron como las luces de la ciudad por la noche - que mal que yo sea del infierno - ups, pensé en voz alta.

- Qué traviesa - ambos reímos tímidos.

Llegué a mi casa felíz y dormí de inmediato con la gran satisfacción de haber logrado decirle algo que sentía a Taehyung.

Pero como toda historia bonita tiene su lado malo.

Llegué al parque para ver a Tae pero pasó una hora y él no apareció.

- Que extraño - miré hacia los lados buscándolo disimuladamente hasta ver a alguien tomando fotos - diablos, todo me recuerda a él - esperé un poco y aquella persona de las fotos me distraía un poco.
Miré fijamente y noté que se sentó en una banca lejana a la mía en donde se puso a hablar con una chica.
La jóven reía muy felíz por lo que supuse que ese chico debía de estar coqueteandole.

- Vaya hombres - reí un poco y volví a observarlos.

Cuando el chico de las fotos miró hacia el frente riéndose pude notar su rostro y era Taehyung.

- ¿Qué? - intenté calmarme y solo limitarme a observar.

Veía que hablaba muy a gusto con la chica y luego le tomó una foto al igual que como lo hizo conmigo, pero luego de habérsela tomado le dió un papel a la chica y le guiñó un ojo. Ella rió y se acercó de a poco a Taehyung.

Me sentía muy dolida y celosa por ver ésta situación. ¿Cómo éste tipo podía actuar así?
Estaba a punto de hacer una idiotez pero ví a otra chica acercarse a Tae molesta.

- ¿Así te diviertes? - me sorprendí por su repentina aparición - ¿Te aburres de una chica y luego vas con otra? ¿Así es tu juego? - me acerqué poco a poco hacia ellos tres sin que notaran mi presencia.
Taehyung se notaba calmado ante las palabras de la chica. Al parecer él sabía lo que hacía y no le importaba.

- Es increíble, te he visto durante todo estos meses con diferentes chicas. ¿Qué pasó con la anterior a ésta? - señaló a la chica sentada en la banca y ésta reaccionó molesta - ella se veía felíz contigo y tu le haces lo mismo que a mí - estaban hablando de mí.

- Todas son solo un juego Amber, no te confundas.

- ¿Qué? - todos dirigieron su mirada hacia mí pero la de Taehyung era sorprendida.

- T..Tn...

- Ya veo quien viene del infierno realmente - me dí la vuelta y me fuí. Tae se levantó de la banca y me siguió.

- No quise sonar así - lo ignoré y seguí caminando - vamos, quédate.

- ¿Para formar parte de tus juegos? No seas idiota.

- Bueno, de todas formas era notable que sólo seríamos amigos. Eras muy poco para mí - me detuve un poco y lo miré. Él se iba hacia un lado lejos de todas las chicas que estabamos metidas en esto y me dirigí a casa con un nudo en mi garganta por la rabia que sentía.

Tres meses después iba caminando en la estación de metro para ir a mi trabajo. Era tarde y no lograría llegar si no me apuraba.

- Disculpe - intentaba pasar entre la gente para poder entrar al tren que se encontraba a punto de cerrar sus puertas, pero yo fuí más rápida.

Finalmente lo logré.
Suspiré felíz y sólo me concentré en la ventana para ver la ciudad a través de ésta.

- ¿T..Tn? - miré hacia un lado y Taehyung estaba allí - Hola - mis mejillas enrojecieron al igual que las de él.

Demonios, trágame tierra.

Durante unos segundos no dijimos nada pero luego él lo hizo.

- ¿Cómo estas? - no me sentía capaz de responder y él lo notó, así que sacó algo de su billetera y escribió en eso - Para tí - me sonrió y luego bajó en la estación en la que paramos.
Su sonrisa era diferente. Era sincera y arrepentida de alguna forma.

Observé lo que me entregó y era la foto que me tomó. Le dí la vuelta y ví escrito:

"Lo siento.
¿Puedo arreglar el pasado?
+564332×××××"

- Que rayos... - el mundo me odiaba.