❛ i want to help you ❜ na jaemin

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Jaemin miró a Hye, desde la puerta de la clase. La chica se encontraba admirando el paisaje que le ofrecía la ciudad de Seúl, enormes edificios en cualquier lugar, algunos parques y las carreteras llenas de coches.
Se acercó a ella preguntadose por qué tenía tanto interés por ella, por qué quería ser su amigo si no la conocía bien. ¿Sentía pena por ella ya que estaba siempre sola? ¿O era un sentimiento mucho más profundo? ¿O simple curiosidad?

Dejó la leche de plátano que había comprado en la mesa de Hye junto a unas galletas. La chica dejó de mirar hacia la ventana para observar los alimentos que dejó el chico. Luego miró a Jaemin y él le sonrió.

— Debes tener hambre, te traje esto, si no lo quieres no pasa nada, me lo como yo - Hye rio levemente y cogió ambos alimentos.

— Gracias - dijo mientras comía una galleta.

— ¿Puedo sentarme? - señaló su asiento al lado de Hye y ella asintió. Jaemin se sentó y miró a Hye y luego a la ventana. Quería entablar conversación con la chica pero no sabía si ella quería - ¿Te gusta el instituto? - preguntó dejando de mirar a la ventana para ver a Hye. Ella asintió. - ¿En tú anterior instituto tenías muchos amigos?.

— Tenía- respondió dándole una galleta, la cual Jaemin aceptó gustosamente - Aunque nunca fueron amigas de verdad - murmuró.

— Yo y los chicos podemos ser muy buenos amigos, y nunca le haríamos daño a nadie y menos a una amiga.

Hye observó el recipiente de la leche de plátano y luego al chico. No comprendía por que el chico era tan bueno con ella, ¿qué era lo que quería?.

— ¿Por qué?...¿Por qué quieres ser mi amigo?- Jaemin se quedó completamente en blanco. Ni él sabía la respuesta.

— No lo sé, ¿llamaste mi atención? - alzó los hombros- O... no sé, no lo había pensado.

[...]

El timbre resonó por todo el instituto. Todos los alumnos salieron disparados de las clases. Hye recogió tranquilamente sus pertenencias y salió de clase. Caminó por los largos pasillos del instituto hasta llegar a la salida. Ahí una chica, que iba a la misma clase que ella, puso su pierna en medio del camino de Hye, provocando que ella cayera de rodillas, lastimando sus manos y rodillas.

— Lo siento, no te vi - la chica se rio levemente.

Jaemin quien pasaba cerca de ahí, fue hacia Hye para ayudarla.

— ¿Estas bien? - trató de ayudarla a levantarse pero Hye lo alejó.

— No me toques - dijo apartando las manos del chico de su cuerpo - Puedo yo sola - se levantó con algo de dificultad debido al dolor de sus rodillas.

— ¿Qué problema tienes con Hye, Jihyo? - preguntó Jaemin a la chica que provocó que Hye se tropezará con su pierna.

— Yo, ninguno, solo que ella es rara - alzó los hombros desinteresada. Odiaba a Hye, el chico que le gustaba le prestaba demasiada atención a ella.

— No te acerques a ella si no es para algo bueno - dijo antes de volver a centrar su mirada en Hye, quien se encontraba revisando sus rodillas las cuales habían comenzado a sangrar - Hye, vamos a la enfermería a curarte eso.

— No hace falta - detuvo al chico- Estoy bien, estoy acostumbrada a esto - lo último lo murmuró.

— Tus padres se van a preocupar, lo mejor es curarlo y que no pase a mayores - al final Hye accedió y fue detrás de Jaemin a la enfermería. Llegaron al lugar y Jaemin buscó a la enfermera quien no estaba en el lugar - No está la enfermera, ¿te importa si yo...? - Hye negó - Está bien, siéntate en la camilla y yo busco el botiquín.

Hye hizo lo que pidió el chico, y lo miró buscar el botiquín y sacar lo necesario.
Se sintió mal por cómo lo trato hace un rato, no quiso ser grosera con él.
Jaemin llegó con lo que necesitaba, se arrodilló y miró las rodillas de Hye. Con miedo a la reacción de la chica cogió la pierna y comenzó a pasar un paño sobre la herida para eliminar la sangre, lo mismo hizo con su otra pierna.
Hye observaba cómo Jaemin limpiaba su herida, se sentía extraña, sentía una revolución dentro de su cuerpo.
Estaba tan centrada viendo al chico curar su herida, que no sintió dolor cuando él puso el antiséptico. Tras finalizar Jaemin colocó una tirita en las rodillas de la chica. Alzó su mirada y vio los ojos de la chica clavados en él, le sonrió provocando que el corazón de Hye latiera de manera desenfrenada.

— Ya está - se levantó - ¿mejor?.

— Sí, gracias - sonrió mientras se levantaba de la camilla - Y lo siento por tratarte mal antes, yo no quise.

— Está bien, lo entiendo.

— Gracias, Jaemin - el mencionado se sorprendió al escuchar su nombre salir de los labios de la chica, en todo este tiempo nunca había escuchado a Hye decir su nombre - Eres un gran amigo.