la noche que la luna cayó

Capítulo 5

Lugar: bosque de los herviboros (villa de los simios)
Hora: 8:00pm
Un mes y quince día después del impacto

Desde que mark gano la contienda con el simio de nombre rosh, los simios que antes se negaban a participar en el asesinato de la bestia ahora se encuentra con una armadura de cuero junto a uno cien de sus hermanos, todo se encontraban se encontraba en fila mirando a su jefe, mark estaba en el mismo podio, mirando a toda la tropa alocada que tiene, algunos se encontraban temblando nervioso, otros asutados, mark sabía que en cuanto todo se complique lo abandonaran pero ya tiene un plan para que eso no ocurra.

-¡¡todo listo!! -grita a los simios generando un gran temblor - !!le recuerdo el plan, la idea es asesinar a esta bestia que los a atormentando por mucho tiempo, lo ataqueros en su propia cueva, un lugar donde el tiene una ventaja temporal, usaremos su propia cueva en su contra, ¿entendido!!? -pregunta al final recibiendo un grito ahogado de la mayoría de los simios -¡¡Marchen entonces!!

Mientras mark miraba a los cientos de simios que marchavan con miedo un simios particular al que le faltan dos brazos miraba desinteresado desde su hogar destruido, cuando mark le quitó dos de sus brazos sintió como le trataban de arrancar el alma a la fuerza, se sentía asustado de sólo pensar que su cuerpo caería sin alma en el suelo, desde ese día desidio no interferir mas en las acciones de mark, solo miraba todo sin decir nada, como un ermitaño que ve el progreso del mundo a su alrededor.

Mark cuando terminó de contar a sus soldados simios comenzó a seguirlo desde el final de la fila india que ellos hicieron para ir a la cueva, antes de salir de la frontera de la villa mark es detenido por una pequeña mano que le agarra de la camisa desgastada que tenía puesta, mirando a quien lo detuvo solo pudo obtener una pequeña sonrisa

-gragaya..¿vegga? (volverás ¿Verdad?) -le pregunto alma, hija del antiguo jefe del clan y islam, la actual esposa de mark

-claro que si pequeña, nada malo me ocurrira-le dijo sonriendo mientras la cargaba en sus brazos -tienes que volver con mama y zeta, ellos te protegeran mientras no estoy, ¿esta bien? -le pregunto mirando a zeta hacerce con un diferente color de piel, uno totalmente negro un par de cuerpo le crecieron en la cabeza. Mark dejo en el suelo a alma y comenzó a caminar hacia la fila de soldados que se dirijian a la cueva.

-¡¡graga gaga!! (¡¡adiós papi!!) -grito alma con una sonrisa antes de correr hacia zeta y saltar en su lomo

Dos horas de caminata después

Una gran cueva con forma de calavera se mostraba ante los quinientos simios tembloroso, y un mark con una sonrisa en la cara que estaba atrás de todos los simios

-¡¡vamos a entrar en territorio enemigo, cuidado por donde pisan!! -advierte mark cuando una docena de simios que entraron para explorar la cueva salen disparados por una ola de viento, terminando clavados contra las ramas de los árboles a su alrededor, árboles llenos de púas de gran tamaño.

-¡¡entren rápido!! -ordena provocando un terremoto que deja caer un par de piedras de considerable tamaño de la montaña ensima de la cueva, suficiente motivo como para que todos los simios entren corriendo a la cueva seguidos de mark que caminaba tranquilamente

Las dos piedras caen justamente en la entrada de la cueva tapando esta los suficiente como para que ningún simios escape.