CAPITULO VIII

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Josh se ha ido a New York  y yo he comenzado el trabajo en el mini market. Carolina desde muy temprano me indicó todo lo que tengo que hacer, no sé si sean ideas mias pero es un poquito aspera. Quiero llevarme bien con ella ya que basicamente es la mano derecha del señor Luis, sólo espero que no sea así siempre.

...

En general el dia a transcurrido de manera regular, compran y se van, uno que otro cliente me pregunta cosas incoherentes pero nada que no haya visto antes para tener un rato de conversacion.

Tengo una hora libre para almorzar, así que le envio un Whatsapp a Josh.

Nela: Hola guapo. ¿Cómo va New York?

Josh: Holaaaa, Va muy bien, estoy por ingresar a la reunion Anual para dar los informes.

Nela: Excelente, ¿Y los nervios?

Josh: A mil, no entiendo nada. deberias ver mi cara, seguro te burlas de mi si llegas a verme, yo sólo entiendo hasta los buenos dias. jajajaja

Nela: jajajaja, es muy probable que lo haga. Debes verte muy gracioso, si todo sale bien te recompenso.

Josh: Que tortura, ¿Debo esperar hasta que todo salga bien?

Nela: Sí, esa es la condición, te dejo, regresaré al trabajo. Un beso.

Josh: Besos.

...

Bueno he terminado oficialmente mi primer día en el mini market, estoy recogiendo mis cosas, cuando tocan a la puerta.

— Señor Luis, buenas tardes. — Saludo.
— Te he dicho que sólo me digas Luis. ¿Cómo ha estado tu primer dia de trabajo?
— Disculpe, lo intentaré. El trabajo va bien y poco a poco me estoy adaptándo, como le expliqué es algo muy parecido a lo que hacia en Venezuela y se me ha hecho bastante fácil.
— Esa es la actitud ¿Ya te vas? 
— Sí, ya terminó mi turno ¿Por qué? ¿Necesita algo más?
— No, para nada, sólo noté que la direccion que pusiste en tú currículo es cerca de aquí, yo voy en esa dirección y quería llevarte.

Bueno, esto no es muy común, que un hombre me quiera llevar a la casa si, pero que mi nuevo jefe lo haga no. No sé realmente que responderle, tengo en mente las palabras de Regina pero no quiero ser descortez ni mucho menos causar incomidad.

— Sí, está relativamente cerca y no tengo problemas en ir en autobús.
— ¿Me dejas llevarte? — Insiste.
— Esta bien.

Esto creo que será una mala idea, no me siento cómoda y algo de esto no me da paz.

(De camino en el carro)

— Nela ¿Qué tal te ha parecido la ciudad? — Pregunta.
— Hasta ahora me parece interesante. 

— Lima es una ciudad activa y a veces muy agresiva por ser precisamente la capital. ¿Y los hombres Nela, qué te parecen?

Bueno, bueno, bueno ya sabia yo que esta seria una mala idea. El jefe nada más y nada menos que ligando conmigo ¡Qué incomodo!

— Eh, no tengo mucho para decir la verdad, he conocido a muy pocas personas. 
— ¿Pero te parecen atractivos?
— Pienso que cada persona es atarctiva a su manera, como dice el dicho "Entre gustos y colores, hay de todos los sabores". Todos tenemos gustos diferentes así que no juzgaré esa parte.

¡Vamos Nel! ¿Qué dijiste? los hombres de aquí son feos, bueno a ti te parecen feos. Hay que ver que también tienes una labia interestelar.

— Vaya idea sobre la atracción la tuya, muy madura para la edad que tienes ¿Qué harás para esta noche, tienes planes?
— No lo sé, vivo con mi prima y ella siempre tiene planes, cada que hace algo me involucra asi que es probable que cuando llegue a casa ya tenga algo. — Me rio para suavisar la tensión de esa incomoda pregunta.
— Ah, eso es interesante, lo preguntaba porque de camino nos queda una polleria que me encanta. ¿Ya has probado el pollo a la brasa de Perú? Somos muy buenos preparando el aderezo.
— ¡Oh si! Son muy buenos, lo primero que comí aquí fue eso, mi prima hizo una fiesta y lo que sobraba era pollo y papa. — Digo mientras ambos nos reímos.
— Sí, ¿Me dejas invitarte? —Pregunta finalmente.

Te Guardaré el SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora