Los rubitos

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~Narra Eva~

Anaju y yo acabamos de entrar en nuestra clase y hemos empezado a pasear por ella para ver si veíamos hablar a alguien en español, ya que todavía quedaban diez minutos para empezar la clase.
Al rato nos hemos encontrado con una rubia y un rubio que estaban hablando en castellano y Anaju se ha lanzado a saludarles de inmediato conmigo detrás.

Anaju: Hola, ¿soys de España, no? Yo soy Anaju y ella es Eva.

Eva: Hola –dije yo ya que Anaju ya me había presentado–.

Chica rubia: ¡¡Hola!! Yo soy Samantha, aunque me podéis llamar Sam y él es Hugo.

Hugo: Ehh... Hola.

Samantha me pareció muy maja, pero Hugo me pareció un poco extraño, se le notaba descolocado, como si ese no fuera su sitio.

Samantha: Mira Hugo –le empezó a susurrar a su amigo como si nosotras no estuvieramos en frente– ya no tienes que preocuparte por no saber italiano, ya has conocido a dos personas más españolas.

Hugo: Sam, están en frente –dijo riéndose pero un poco cortado–.

Samantha: Bueno, –se giró a hablarnos a nosotras intentando disimular– ¿vosotras ya os conocíais de antes?

Eva: Somos compañeras de piso –dije adelantándome a Anaju–.

Anaju: Nos conocimos anoche en persona.

Samantha: Nosotros nos acabamos de conocer viniendo para aquí, porque el Hugui no encontraba la uni.

Hugo: ¿¿Me acabas de llamar Hugui?? –dijo este sin asimilarlo y empezando a partirse de la risa–.

Samantha: Si ¿por? Y otra cosa, habla un poco con ellas, que a lo mejor son tus últimas posibilidades.

Ahora los cuatro nos estábamos partiendo de la risa por los comentarios de Samantha, aunque a Hugo se le veía un poco cabreado y cansado de todo en general. No sé qué tiene este chico que tanto me intriga...

~Narra Hugo~

Sam me está tocando un poco las narices la verdad, pero voy a calmarme, porque realmente si que me cae bien, solo que estoy un poco sofocado. Voy a intentar pasar más desapercibido y dejar un poco más a Sam a su bola, ya que no le cuesta nada hacer amigos.

Antes de que cualquiera de nosotros pudiera decir nada llegó el profesor y dijo que nos sentaríamos por orden alfabético y resulta que Eva se apellidaba Barreiro y como yo era el siguiente en la lista, nos tocó sentarnos juntos.

~Narra Eva~

Me ha tocado junto a Hugo en la mesa y no sé qué decirle, porque no parece que le apetezca hablar con nadie, aunque al final le acabo preguntando algunas cosas para romper el hielo.

Eva: Hugo, ¿puedo hacerte una pregunta?

Hugo: Claro –dijo este con cara de que no le apetecía nada–.

Eva: ¿De dónde eres? Es que me ha llamado la atención tú acento, pero no tengo muy claro de dónde es.

Hugo: Soy de Córdoba ¿Y tú?

Eva: Yo de A Coruña

En ese momento el profesor empezó a hablar y menos mal que lo hizo, porque ya no sabía que decirle a Hugo, ya que él seguía pareciendo un poco seco.

~Narra Hugo~

Realmente no sé porque me estoy comportando así, ella no me ha hecho nada a mí y yo me estoy comportando como un idiota porque solo pienso en mis propios problemas; así que después me disculparé con ella.

Al final dela clase

Hugo: Eva espera un momento  –dije cogiéndola de la mano para que no se levantara–.

Eva: ¿Pasa algo?

Hugo:

💚Gracias a todos los que estáis empezando a leer esta historia, me hace mucha ilusión que haya gente que lea lo que escribo y me gustaría que me comentárais que os está pareciendo.❤️

Hasta El Final Donde viven las historias. Descúbrelo ahora