Cuándo la noche estrellada se desplazaba para darle paso al sol de la mañana,
Abrió sus ojos lentamente somnolienta, llevando un pequeño bostezo consigo. Sus ojos color dorado cual rayo de sol dónde se reflejaba la luz.
Se levantó de su cama estirando su cuerpo lentamente en un ejercicio de rutina. Caminó hasta la ducha donde se dio un baño, cepilló sus dientes mientras tarareaba
Y miro se al espejo peinando su largo y ondulado cabello de color plata-lila, en un par de trenzas largas que le llegaban más abajo de las rodillas. Con un broche de una piedra azul en su cabello
Usaba en ese momento una blusa larga de seda húmeda, con una falda con tul de color vino, y unas medias gruesas de lycra enteras de color negro que cubrían sus piernas, acompañas de unos zapatos rojizos
Quería verse presentable
-. Bien Vanilla, tu puedes, tu puedes! Es tu primer día y harás amigos!-. Exclamó la joven de 15 años terminando de vestirse para irse a la escuela
No había tenido amigos desde que se mudó a París. Más bien...no conocía a nadie...
-. Por favor abuelita... mejórate..no se que haré sin tí.- susurró caminando hasta la cabina de su abuelita llena de tristeza
La señora de cabello cano reposaba en su cama con un suero inyectado a su intravenosas para darle lo que necesitaba
. La única familia que tenía era su abuelita Loraine McPhee. Quien por la edad estaba muy enferma.
Y se sentía mal por darle esa responsabilidad a su nieta
-. Oh. Hola mi niña, ¿ya te irás a la escuela?-. Sonrió la señora mayor al verla, creía que lucía preciosa.
Estaba muy orgullosa de ella. Porque siendo tan joven, ella se hizo cargo de su enfermedad. Vainilla trabajaba a medio tiempo y con el dinero que ahorró se alzó un puesto de comida justo frente a su casa bote.
Si... casa flotante.
No era inmenso cómo el barco de los Couffaine quienes prácticamente eran sus vecinos. De hecho era pequeña cómo una casita normal pero con suficiente espació para las dos...
-. Abuelita. Recuerda tomar tus medicinas a la hora indicada.-. decía dejándole un vaso con agua y sus medicamentos en la mesita de noche.
Y de paso dejándole el desayuno preparado. Lourane miró a su nieta con una sonrisa
-. Eres la mejor, no te preocupes diviértete. Tu lugar es en el mar, pero disfruta tu vida aquí, haz amigos, enamórate de un buen muchacho que te quiera.. quiero que seas feliz. Yo estaré bien...pero sabemos que pronto partire...y no quiero que estés sola cuándo pase...es lo que tus padres hubieran querido....-
Ante sus palabras Vanilla cerró sus ojos y una lagrimita todo por su mejilla
-... abuelita....-
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Dulce Como La Vainilla
FanfictionSu canción llenó su corazón...y aquella dulce doncella llegaría a mover las olas de su interior... Luka xOc +18