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Tres

—AAAAAAAAAAH.— Se escuchó un grito por todo el living de la casa, provocando que los habitantes se asustaran y corrieran asustados hacia el  aquel lugar de donde provenía del grito.

Agitados y con falta de aire los tres chicos llegaron al living mirando hacia cada lado para asegurarse de que todo esté bien, es decir, nadie gritaría de esa forma al menos que le pase algo. Pero su amiga se encontraba en perfecto estado y ninguno entendía que era lo que había pasado.

—¿Por qué mierda gritaste así, pelotuda?— Chilló Tadeo enojado, retando a Samira, quien era la que había provocado el grito.

—¡Es que el Indio Solari le comentó la foto a Valentín! ¡El Indio! ¿¡Entienden eso!?— Hablo eufóricamente la chica a punto del llanto, por el comentario del cantante de rock argentino hacía el rapero.— Le puso: joven talentoso, a cuidarlo...— Leyó el comentario en voz alta.

—Pelotuda nos asustaste, pensamos que te habia pasado algo.— Habló por primera vez el mayor de los Oliva.— Que grande el Indio eh, lo quiero.

—Voy a llorar de la emoción, mi chiquito, te reconoce uno de los mejores.— Acotó con lágrimas en los ojos la castaña.— El Indio men.— Hizo énfasis a una escena de casados con hijos.

—Re loco todo mjejejeje.— Fue lo único que dijo el halagado.

Las tres personas que se encontraban con el lo miraron como diciéndole "sos joda." Y es que había cosas que Valentín no podia creer, va, no podia creer todo lo que había logrado en los últimos años, todo el alcance que tuvieron sus temas, cada día lo escuchaba más gente y generaba un montón de cosas lindas,estaba creciendo como actor, lo reconocían grandes artístas, los cuales el admiraba mucho.

Su amiga le insistió mucho para que respondiera aquél comentario a lo que el rapero accedió y le respondió: Gracias indio queridoo! Espero que estés bien.

—¿En serio Valentín? ¿Eso nomás? ¡Es el Indio! Ponele algo más dale.— Lo retó Samira, Oliva negó rotundamente, no le agregaría nada más, para su gusto estaba bien, tampoco quería parecer un pesado.—Da sos re aburrido.— Bufó.

—Es un comentario nomás Samira dejá de joder.— Habló ya un poco molesto el de ojos color azul sin darse cuenta en el tono que lo dijo, haciendo sentir mal a la chica.

Ella solo decidió quedarse callada y no decir nada más. Capaz si se  había emocionado un poco por un simple comentario, pero la forma en la que le había contestado su amigo la habia hecho sentir mal, muy mal. Solo quería demostrarle lo orgullosa que se encontraba por su crecimiento, tal vez se habría expresado o mal o fue muy intensa.

Con un sabor amargo en la boca se acostó dándole la espalda y mirando su inicio de instagram mientras escuchaba la canción de su amigo, en concreto Protocolo. Era una canción que le encantaba por todo lo que transmitía a través de su letra, decía cosas muy fuerte pero con una melodía tranqui. Simplemente perfecto para su oído.

Samira últimamente no se sentía muy bien con ella misma, ni físicamente ni mentalmente, necesitaba de su familia y amigos, y aunque los tres chicos con los que vivía eran sus amigos, necesitaba el consejo de sus amigas y el abrazo de su mamá, tal vez por eso se sintió mal cuando Valen le habló asi, pero el no se dio cuenta de ello y su intención nunca fue hacerla sentir así.

Valentín notó lo decaída que se encontraba su amiga los últimos dias pero no le dió mucha importancia, no quería agobiarla más de lo que ya estaba y tampoco quería agobiarse a el mismo, por lo que procuró tomar distancia para no terminar chocando.

Cuando la de pelo castaño se acostó, Valentín decidió seguir leyendo su libro, aprovechando del silencio que había en la casa. Un silencio en el que se podia escuchar el canto de un pajarito, la brisa del viento, escuchar el ruido de las hojas chocar contra la ventana cuando caían y tal vez por ahí en la inmensa oscuridad a lo lejos, se podía llegar a escuchar un grillo. Era realmente relajante estar así.

Cuando la casa estaba asi en silencio, Valentín aprovechaba para poder leer, salir al patio a mirar el cielo por las noches, mirar las estrellas mientras fumaba, o aprovechaba para tratar de encontrarse. Era frustrante para el, no lograr aquello.

Esperaba con ansias que la cuarentena termine porque necesitaba hablar con Guada sobre muchas cosas.

Volvió a su pieza y se acostó al lado de Samira abrazando a esta por la cintura atrayendola a su cuerpo quedando en posición de cucharita, había la suficiente confianza para estar en esa posición, además que los dos tenían más que claro que eran amigos.

Ella se dió vuelta quedando acurrucada en el pecho del rapero, pasó una pierna por arriba de las de Valentín para estar más cómoda, esté último trago saliva nervioso por el último acto que había hecho la castaña. Bajó su mirada a la cara de la chica y se quedo viendo cada facción de ella.

Llevó una de sus manos a la nariz respingada que ella tenia y trazó una línea invisible delicadamente s lo largo de ésta, luego fue a sus mejillas y las acarició, pasó por sus pómulos, después contorneó toda su cara, corrió un poco el pelo que caía sobre su frente. Pasó sus dedos muy delicadamente por las pestañas de la estudiante, admirando lo largas que eran, fue a sus labios y los delineó muy perfectamente y se quedó con su vista fija ahí por unos varios minutos, admiró la belleza de su amiga dandose cuenta que nunca la habia mirado lo suficientemente bien para darse cuenta de lo hermosa que era.

Es decir siempre supo qué era hermosa, pero no sabía que tanto.

Le dió un beso en la frente dispuesto ya para dormir pero una voz lo interrumpió.

—Que lindo mimos Valen, lo necesitaba.— Le sorprendió que su amiga estuviera despierta.

Nervioso volvió a mirarla y le sonrió.— No fue nada, espero los míos algún día.

—Vos solo tenés que pedirlos, sabes que me encanta hacer mimos.

Era verdad, vivía haciendole mimos a la gente, al igual que derramaba amor por doquier.

—El otro día te pedí y me dijiste que no porque le estabas haciendo al Depa.— Habló con recelo formando un leve puchero.

—Y bueno, como vos mismo estás diciendo, le estaba haciendo mimos a Tadeo, nada de ponerse celosos porque hay amor para ambos.— Acotó mientras reía.

—A no sé no sé, vaya con el Depa ahora, cuando se entere Wawa que le andas haciendo mimos a ese sucio se te arma la gorda.—  El término que habia usado  Valentín los hizo carcajear a ambos por igual.

—No no le digas a Wawa por favor, me va a matar.— Rogó en tono de broma.— No te enojes mi perro marino, yo te quiero más a vos.— Hizo burla a lo que habia puesto en su última publicación de instagram.

Ambos se rieron de tales palabras y así entre risas y mimos mutuamente se terminaron durmiendo.

➿➿➿
Jajaja así estaba cuando vi que el Indio le había comentado la foto.
Bueno espero que les guste, trato de hacerlo lo más interesante que puedo, pero en la fic también estan en cuarentena y no sé que quieren que haga ademas de comer y dormir y otras necesidades, asi que me parece que es el último narrado en cuarentena y después se viene lo bueno.
Ya les actualice las dos fics, no pidan más, nos vemos cuando me pinte la inspiración de nuevo✨