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Cinco

Valentín llevaba chicas a la casa para provocar en Samira algunos celos, pero a la morena le daba igual lo que hacia su amigo, ella estaba demasiado enganchada con Spallati como para que venga Valentín y le haga una escena.

Con Spallati las cosas habían avanzado muchísimo y estaban a nada de confirmar, mientras tanto Valentín se encontraba furioso, le enojaba que su amiga estuviera con Ecko, el decía que entre tantos pibes, justo de el tenía que enamorarse, bueno no sabia exactamente si Samira estaba enamorada del cantante de trap, pero estaba más que claro que Ignacio y Samira no congeniaban en lo más mínimo.

Valentín cansado de compararse decidió empezar a hacer la suya conociendo chicas y reaccionando historias a cada chica que seguía, pensando que así lograría sacar se su cabeza a Samira. Tan equivocado estaba al pensar que para olvidar a una persona hay que utilizar a otra.

Las cosas con ellas seguían normales, cada uno estaba metido en su trabajo y no se hablaban demasiado.

La cuarentena los había atrasado a todos en todo los aspectos pero como era domingo Valentín decidió tomarse el día para descansar y fumarse una tuca mirando el atardecer.

Una mezcla de colores entre el naranja, un poco de rojo se apoderaban del cielo ese día pareciendo fuego, lo que veían los ojos de Valentín era realmente hermoso.

Relajado y contento Valentín tarareaba el ritmo de la canción que sacaría con Trueno, hacia lucas horas que los dos raperos se habían juntado para retocar algunas cosas de la canción y después de haber terminado se tomaron su tiempo para hablar y ponerse al tanto de sus vidas. Aunque en la cuarentena se habían mantenido en contacto estaba de más decir que no era lo mismo verse en persona que hablar por celular.

A Valentín le gustaba más las charlas en persona para poder escucharlas bien y aconsejarlas si es que le pedían un consejo.

No era adicto al celular ni tampoco le gustaría serlo, no era de su agrado estar en las redes sociales y como ya había dicho en varias, ocasiones le cansaba entrar y ver su cara por todos lados.

A sus oídos habían llegado algunos gritos que provenía de una voz femenina, los gritos eran de frustración y después de escuchar todo aquello de hizo un silencio nada bueno para el de ojos azules.

Cuándo llegó al lugar de donde se escuchaban los gritos entró de inmediato viendo a Samira acostada en el piso llorando con pinceles en las manos y un poco de pintura en el piso.

—Beba ¿Que te paso, por qué lloras?— Ella intento responderle pero solo murmuró cosas qué su amigo no logro comprender.

—Es que...—Sollozó.— e-sstoy intentando hacer este trabajo hace dos.. —Hipo.— horas y no me sale nada.— Lloró más fuerte sorbiendose los mocos en un pañuelito que le había dado Valentín. El lo único que hizo fue abrazarla fuerte sobando su espalda y dando besos en su coronilla mientras murmuraba cosas tratando de calmarla.

Después de más o menos media hora la castaña se alejó de la anatomía de su amigo y se levantó con un sonrisa expectante.

—Bueno me voy a cambiar, voy a salir y capaz no vuelva.—Golpe bajo para el cantante.

—Pensé que habías recapacitado después de haberte dicho lo que era ese tipo.— Soltó con enojo el mayor.

—Pero el no es así conmigo y mientras a mi no me haga nada todo ok.— Chistó y se fue al baño dejado a Valentín con la palabra en la boca.

Un Valentín furioso y pensado en caliente marco el número de Valeria invitándola a casa esa misma noche a cenar y quién sabe algo más.

Samira más feliz que nunca se cambiaba y perfumaba para verse con su novio, la felicidad se sebia a que Spallati la presentaría a sus amigos y eso para ella era un gran paso ¿Eso quería decir que la relación era sería no?

Sacó todo pensamiento negativo de su cabeza y bajó cuándo una bocina tocó al frente de su casa.

(...)

La velada para ambas parejas ya habia terminado y para mala suerte de Valentín, Valeria le aclaró las cosas y le dijo que ya no lo quería ver más.

Pero igualmente ella no se fue enseguida y como "despedida" se quedaron chapando en el sillón del living.

Samira entro sin hacer mucho ruido pensando que su amigo estaría durmiendo pero se equivocó y cuando se dio vuelta vio a Valentín besándose muy apasionadamente con Valeria.

Su noche habia sido una mierda y encima tenía que ver eso.

Una punzada en el pecho y un sabor amargo aparecieron, le disgustaba ver a su amigo en esa situación, no le importaba pero para ninguna persona le seria de su agrado ver a dos personas a punto de coger.

Carraspeo su garganta llamando la atención de los dos presentes quienes la miraron algo incómodados.

—Bueno yo me voy creo que ya es tarde, nos vemos Valen Gracias por todo.— Dicho eso la rubia salió corriendo por la puerta de entrada.

—Sam yo te lo puedo explicar, solo es una amiga.— Trató de aclarar lo que había visto su amiga.

—Ay Valen no tenes que explicar nada.— Me hubieses avisado así no te interrumpía el garche amigo.

Amigo, amigo.

Si supieras que solo quiero garchar con vos. Pensó Valentín.

—No era nada en serio, ella ya se iba.

—Que tontito que sos eh, no me molesta.— ¿No le molestaba? ¿Estaba segura?

Después de esa mini charla decidieron dormir juntos. Las cosas entre ellos no van cambiarían por nada. O eso era lo que ellos pensaban.

Mientras que para Samira no era mas que dormir una vez más con su amigo, para Valentín era la gloria, es decir estaba durmiendo con la chica que le gustaba, parecía un nene pensado de esa manera.

Pero para el no había cosa más linda que dormir con Samira, era tan cómoda y calentita y encima dormida y sin saberlo le hacía mimos, le encantaba.

Y aunque no quiera admitirlo ya estaba hasta las manos.

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Medio pete pero ya no se como seguirla, así que si tienen ideas díganme neaa

Tengo una fic de Zeballos vayan a leerla y decirme que les parece!!