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Alexa

Veía como enterraban a mi hermano en ese cajón, era el momento de quien quisiera echar su puño de tierra lo podía hacer, todos Los Ibiza lo hicieron, los de La Boca igual, incluso Mateo, mi madre, mi padre, mis tíos, mis abuelos, y yo no me animaba, estaba destrozada, en mi recámara aún estaba la pared manchada de sangre, mi cama manchada de su sangre.

Sentí como Mateo entrelazó nuestras manos, el negro siempre le ha ido muy bien, le queda súper bien, me miro y me asintió con la cabeza, me tenía que armar de valor.

Caminé al monto de tierra y metí mi puño para sacarlo llena de esta.

Siempre fuiste mi compañero de vida Ramon, nos llevábamos un año y siempre supimos llevar nuestra hermandad al fregazo, éramos de sexo opuestos y no nos importaba, vos jugabas conmigo a las muñecas y yo jugaba con vos a las peleas, éramos neutros, solo para nosotros, para hacernos feliz entre nosotros, ya que nuestros padres no lo hicieron.

Deje caer el puño de tierra, sentí que me desvanecía, tenía dieciocho años, era demasiado joven para morir por las pelotas de un pendejo de mierda que no tiene corazón.

Regrese a donde estaba y abrace a Mateo para seguir llorando, todos vestidos de negro y yo vestida de blanco, por que un día mi hermano me dijo:

"Si me muero, no quiero que vayas vestida de negro, por que vos sos mi luz en todo, sos como mi paloma, y aún así, el día de mi muerte lo vas a seguir siendo, y las palomas y las luces son blancas."

Terminaron de llenar el hoyo con la tierra sobrante y montaron la tumba con su nombre, no podía mirar Ramon sin llorar, me habían arrebatado al amor de mi vida, amaba con todo mi corazón y mi alma a mi hermano, el siempre estaba ahí para mi, nunca se apartaba, y se fue por mis giladas.

-fue mi culpa-(susurré)-es mi culpa, lo siento

-no es tu culpa Alexa-(dijo Mateo envolviéndome en sus brazos)-no es tu culpa mi vida-(sobaba mi cabello)

-Alexa, ya es hora de irnos-(dijo mi madre)

Mateo se separó de mi y me brindó una linda sonrisa, era lo único que tenía en este momento y lo quería tener pegado a mi todo el tiempo.

-ven con nosotros Mateo-(dijo mi padre)

-no quiero causar molestias-(comentó Mateo)

-no causas molestias cariño-(dijo mi madre)-acepta tomar un café con nosotros, así te tranquilizas un poco y ya después regresas a casa

-(asintió con la cabeza)-nomas le aviso a mi papá

Camino hacia donde estaba su papá con su mujer y su hermano, vi como le dio un abrazo para luego venir hacia nosotros y subirnos al BMW que manejaba mi padre, con una camioneta al frente y otra detrás.

Llegamos a casa y lo primero que hice fue quitarme el vestido, Mateo tenía unas cuantas piezas en mi casa por lo que se quito el traje que llevaba puesto, y al parecer mis padres habían hecho lo mismo.

-¿sabes si lo buscaban por algo?-(pregunto mi mamá)

-no-(dije seca)

-era muy buen chico-(continuo llorando)

Nadie decía nada, tomábamos de nuestro café, hasta que me digne a hablar, tenía que sacar lo que llevaba dentro.

-Es mi culpa, estoy metida en algo muy grande...

AMIGOVIOS-TRUENO/ •TERMINADA•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora