¤Photograph¤ [DaeJae♥]

¿Me recuerdas?

YoungJae POV.

No encontraba motivo para el hecho de haberme cambiado de país, si de algo estaba seguro era que jamás en mi vida iba a volver a casa. 

Soy Yoo YoungJae, nacido y crecido en New York, tengo 21 años y soy estudiante de universitario. 

Hace tan solo una semana había llegado a Corea, mas específico, Seúl ¿porque este cambio tan repentino?, fácil, mamá, papá más trabajo igual a cambio de vida, todo aquello olía a un traslado temporal de país. 

[Universidad de Seúl. 8:30 AM].

Había entrado bastante temeroso para ser yo, no soy del tipico chico social, más bien, soy bastante timido al principio. La rectoria me entrego una hoja donde salían los horarios para cada clase que debía tomar.  

Me encontraba delante de unos enormes casilleros verdes, busque por al menos cinco minutos el loquer, a este paso ya me veía llegar tarde, bueno mas de lo que ya estaba. 

¡Por fin!, lo había encontrado, muy tarado debería de ser para no notar que estaban ordenados por número, gracias cerebro. Metí en el todo lo necesario para ese día, había mucho que hacer. 

Corrí lo que más podia o eso creía, y en tan solo unos segundos ya me encontraba frente al salón, toque un par de veces, esperé, esperé y esperé, joder, que no me van a abrir, pensé. Y si, como mis ruegos hubiesen hecho un milagro la puerta se abrió al tercer toque de esta. Ahí estaba mi profesor de artes no tenía buen aspecto para ser primer día de clases. Pasé con la cabeza a gachas, tan pronto estuve enfrente de mis nuevos compañeros mis mejillas tomarón un color escarlata vivo, estaba todo rojo, como cual cherry tomate. 

- H-Hola Soy Yoo YoungJae.. -Juré que en ese estúpido momento me desmayaría de la verguenza, no podía odiarme mas.-  Seré su nuevo compañero de clases. 

Busqué con la mirada algún puesto de enfrente, gruñí lo bastante bajo al no notar ninguno. Suspiré bastante fuerte y con las mejores de mis sonrisas me sente a un lado de aquel chico bastante egocentrico y serio. Sabía que a verme sentado ahí sería un suicidio por el resto de mi estadia en esa universidad. 

- ¡Hey! -Escuche como el chico a mi lado susurraba.

- A-Ah.. -Levante tan rápido la cabeza, que por momentos me dieron pequeños mareos. 

- Te llaman. -Señaló al profesor al centro del salón, abrí los ojos al notar como el maestro me llamaba y yo no contestaba, muy bien Jae, muy bien.- Deberías de dejar de pensar, si es que lo haces claro.- Volvió a hablar aquel chico a mi lado, lo observé un rato en sílencio, se veía bastante bien, si quitamos el hecho de que sea un niño concentido de mamá, todo estaría bien. 

Al fin, libres, arregle tan rápido mis cosas que no me percate de que aquel chico aún seguía en el salón. 

- No encontraste nada mas en la tienda, algo menos estúpido? - Este se encontraba en el marco de la puerta, con su típica postura de "Soy malo. No me provoques"- A decir verdad . . . Eres bastante feo. 

Wow, eso me había dolido aún así no iba a dejarme vencer. Le sonreí queriendo fastidiar a este niño, su rostro paledecio y solo me observó con disgusto. 

- Puedo ser feo, pero no soy brabucon.- Balbuceé mostrandome seguro de lo que decía, aunque por dentro tamblaba mas de lo normal. 

- Que demonios? -Dios, lo estoy haciendo enojar, mami salvame. Rogé para mis adentros. 

- Solo eres un brabucon. 

- No me conoces. -Joder, es mi fin. 

- Ah, no?, pues parece que eres fácil de decifrar. - Calla maldita boca, ahora de seguro ya me odiaba. 

- No me conoces.. -Comentó en un hilo de voz bastante grave, dando un aspecto bastante tetrico. Miedo. 

- Tampoco quiero hacerlo. -Ignoré el hecho de que pudiera matarme en ese mismo lugar. Ya tenía lista mi muerte. 

- Cuidado niñato, no sabes con quien te metes. -Claro que lo se, bendito idiota. Suspiré  con pesades el tenerle frente a mis narices.- Conoceme y después critica. 

Y fue lo último que escuche ese día de él, si bien había enfrentado aquel chico mis rodillas aun temblaban cual gelatina. Salí del instituto, respiré ondo, muy ondo y no faltaba quien me mate del susto para que pudiera raccionar de mi pequeña meditación.

- ¡Bua! -Gritó alguien detrás de mi, casí de un golpe lo dejó inconciente. 

- ¡Hijo de la gr....! -Grité con todas mis fuerzas. Mi pecho subía y bajaba debido al brusco susto de aquel chico.

- Ooh.. L-Lo siento.. - Comentó el chico.

- Mhg.. Deja, solo fue un previo pre-infarto -Respondí entre risas mientras miraba a la persona junto a mi - Soy Yoo YoungJae. -Estiré mi mano delante de el esperando algún saludo de su parte. 

- Lo sé -Comentó alegre. Miró mi mano y solo la ignoró para hacer una leve venía. Genial, Jae, se te olvidan tus origenes.- Soy Moon JongUp.... 

¿Moon JongUp?, ¿Up?, ¿Uppie?, le miré tenso, mi labio estaba a punto de ser victima de las costantes mordidas que le daba. 

- ¿Me recuerdas? - Joder, hablo de nuevo.

- S-Si.. -Asentí mirando el suelo.- Debo irme. 

Nada mejor que encontrarte con tu primer amor en plena calle. Huí como el cobarde que era. Esto si que iba a ser díficil.