Dibujando un Arcoíris🌈

Capítulo 6

Este capítulo está dedicado a: isabella_familiaa que me obsequió la imagen para este capítulo🌈💕

Y quiero agradecer a una de mis grillis por ayudarme a salir del bloqueo que tuve al escribir este capítulo... Gracias SaraiEspinozaBernal🌈 (los invito a leer sus historias, escribe precioso).

Blanco...

Silencio...

Mucho silencio...

La sensación de ahogo, mi corazón rompiendose en mil pedazos y latidos muy pesados y lentos, escalosfríos en todo mi cuerpo...

Con mi mente en blanco no pude dar respuesta a lo que sin duda han sido las palabras más duras que me han dicho.

Tu nana enfermó hace una semana, solo tenía tos pero luego comenzó a costarle trabajo respirar bien, no quizo que te hablara de ello porque quería que terminaras tu año escolar sin preocupaciones. Le diagnosticaron trombosis pulmonar, siguió las indicaciones que le dieron en emergencias, pero ayer tuvieron que llevarla al hospital nuevamente por lo mal que se veía, y pese a todo el esfuerzo que le pusieron los médicos, no resistió... Falleció hace unas horas.

Mamá se acerca a mí y con cuidado me toma en sus brazos, es lo único que necesito para soltar en lágrimas todo el dolor que en solo minutos se atoró en mi garganta formando un nudo que me ahorcaba más y más con cada segundo que pasaba.

Mi nana, mi segunda persona favorita ya no está, ya no podré verla, pedirle un consejo; ni siquiera podré escuchar su voz que tanta calma me daba. No quiero, simplemente no quiero ni puedo creerlo, por primera vez no puedo confiar en la palabra de mi madre, yo debo verla, necesito que me diga que es solo una terrible broma, una muy pesada, porque sé que aunque me molestaré porque no son juegos, lo que me importaría es saber que está bien.

Mis lágrimas se han convertido en una terrible tormenta que no puede parar, cada una se siente como una puñalada en el lugar más profundo y que poco a poco se lleva la fuerza que sentía con ella junto a mí. Solo siento que mi respiración se va y no tengo prisa en atarla.

-Lo lamento mucho, Lu. - mamá besa mi frente y se separa un poco para secar mi rostro con sus pulgares.

Es increíble el poder que tienen los brazos de una madre, un beso, una palabra, o un consejo de ellas te da una seguridad indescriptible, te hace sentir que aunque el mundo se derrumbe y solo exista un porcentaje mínimo de sobrevivir, todo estará bien. Tengo tanta suerte de tenerla a mi lado.

Suena nuestra puerta y ella se levanta para ir a ver quien es, mientra yo sigo sentada con mis codos afincados en las rodillas jugando con una pulsera mientras mi mente navega en un mar de recuerdos.

Julián llega corriendo, sin pronunciar palabra alguna me toma de la nuca y me abraza con tantas fuerzas repitiendo una y otra vez cuanto siente la pérdida de mi nana, él la conocía y sabía lo importante que ella era para mi. Se separa y acuna mi rostro entre sus manos para darme un beso, yo lo abrazo y le hago la única pregunta que me pasa por la mente en estos momentos...

-¿Por qué ella?

-No lo sé, grilli, no puedo responderte eso, no sé el porqué y aunque lo intente entender para decirte, es imposible saberlo.

Él ha sido mi apoyo junto a Melody, me han acompañado en cada locura que se me pasa por la mente y han estado a mi lado en los momentos más divertidos y alegres de mi vida, así como en los más duros que he tenido que pasar. A veces creo que me conocen más a mí de lo que yo misma lo hago, saben como reacciono a cada situación, lo que me gusta y lo que no, mis grandes secretos y mi mayor sueño, por lo que no dudo que esté haciendo su mayor intento para comprender lo que siento justo ahora.

—Ven, vamos por un vaso de agua. —se levanta y me ofrece su mano.

Vamos a la cocina y luego a mi habitación para conversar un rato.

—Lu, yo sé que no es un buen momento, pero... Necesito decirte algo, debo explicar el porqué me alejé de ti estos últimos días.

—Si sabes que no es un buen momento, ¿por qué decides hablar y explicarte ahora?

Julián se ve un poco sorprendido por el tono tan odioso con el que le hablo, pero luego parece relajarse como si entendiera porque reacciono de esa manera.

—Lo siento, solo necesito decirte que ocurre, porque sé que has tenido muchas dudas y no me había querido acercarme porque sabía que no aguantaría y te lo diría. — si, asi es Julián, asi le digas que no haga algo, lo hará.

—Bien, ¿de qué hablas?

— Pues... Yo sabía que tu nana estaba mal, tu mamá me lo dijo hace unos días y me pidió que no te comentara nada al respecto porque no querían que reprobaras en tus últimas pruebas. —toma aire como si supiera que me ha decepcionado y que falló— Melody me dijo que ella me ayudaría a ocultarlo, pero con la condición de prometer que dejaría que tu mamá fuera la encargada de contarte lo que estaba pasando. Yo tenía algunos planes para celebrar nuestro aniversario, asi que creí conveniente alejarme para mantener ambas cosas ocultas y no romper la promesa.

Mi cuerpo comienza a temblar y otras miles de lágrimas ruedan por mi rostro. El dolor que se instala en tu corazón cuando la decepción se une a la profunda tristeza que te embarca luego de una pérdida, es probablemente la peor mezcla de sentimientos y emociones que se puede sentir, duele tanto que no se puede explicar.

Todos lo sabían. Todos me mintieron.

—Vete ya, dejame sola.

Bajo mi mirada y él se inclina para darme un beso en la cabeza y dirigirse hacia la puerta, la abre pero no sale de allí.

—Lo siento tanto, de verdad no quería lastimarte. Te amo.

Y sin decir más, sale de mi habitación dejandome sola con el mar de lágrimas que inunda mi almohada en minutos.

Escucho dos golpesitos a mi puerta que me hacen alzar la mirada para ver de quien se trata.

—¿Puedo entrar? — pregunta pero no espera respuesta y se acerca a mi.

—Ya lo hiciste, Melody.

—Yo... No sé que decirte.

Me abraza fuerte y hace que mi enojo con ella por ocultarme lo de mi nana quede de un lado, pues lo único en lo que puedo pensar es que ahora ya no la podré ver.

La noche pasa lento y Melody no se ha apartado de mi pese a que su vuelo de vuelta sale en unas horas. No he podido hablar y ella no me ha presionado para que lo haga, asi que, ahí con la cabeza apoyada en las piernas de mi mejor amiga me quedo dormida luego de tantas lágrimas y un terrible dolor de cabeza.