CONFÍA EN MÍ

SOLICITUDES

Aria Keller

Estoy acostada en un sofá de una tienda para los vestidos. Le doy otro mordisco a mi manzana y me acomodo.

-¿Que tal éste?

Dice Kellie con el sexto vestido que se prueba. Volteo mi cabeza y la veo con un hermoso vestido color lila, en la parte de arriba tiene detalles de diamantes que luego se esparecen en todo el vestido.

-Esta hermoso. Como todos los vestidos que te has probado.

Digo con fastidio. Me siento de forma normal.

-Ya deberías empezar a buscar él tuyo.

Decido hacerle caso y me levantó del cómodo sofá. Dejo la manzana en un cesto de basura. Empiezo a ver los vestidos largos de color amarillo.

-Este se te viera bien

Habla Ethan a mis espaldas. Sonrio cuando lo veia acercarse con un vestido verde militar. No es feo, me sorprende su buen gusto.

-Pensé que ver consolas de videojuegos era más entretenido que ver vestidos.

Él hace una mueca antes de contestar.

-Lo es. Pero quería ver por que se tardaban tanto.

Tomo él vestido y me acerco a los probadores. Me quito la ropa, y me coloco él hermoso vestido. No lo voy a negar. Esta hermoso.

Me siento hermosa y poderosa con este vestido. Miro de forma orgullosa mi reflejo. El vestido es largo y tiene dos cortes a los lados, haciendo lucir mis piernas. Es de seda.

Salgo del probador con una sonrisa. Y Ethan esta tecleando algo en su móvil, me aclaro la garganta y él eleva la vista. Casi me río por la forma en que me observa. Parece que se le saldrán los ojos en cualquier momento.

Guarda su móvil y se acerca a mí.

-Te ves hermosa.

-Gracias.

Digo llevando uno de mis mechones detrás de mi oreja. El se acerca más y coloca una de sus manos en mi cintura. Se siente raro tenerlo tan cerca de mí. Puedo oler su perfume varonil. Sus ojos oscuros me evalúan por completo.

-Boonie adivina a quien acabo de ver... ¿Interrumpo algo?

Ethan se separa de forma rápida y yo hago lo mismo sin poder evitar que mis mejillas se sonrojen. Kellie nos mira de forma pícara pero después sus ojos caen en mi vestido.

-Esta precioso. Te llevarás ese.

Asiento. Me aclaro la garganta y veo a Ethan. El solo se resca la nuca y evita mirarme.

-¿A quien viste?

-A la señora Matthews con el señor Smith. Siempre supe que esos dos tenían algo.

Ruedo los ojos. Y veo que Kellie tiene un vestido azul oscuro de seda. ¿Cuantos vestidos ya se ah probado?

-¿Ya te decidiste?

-Sip. Nos vamos en cinco minutos.

No digo nada y vuelvo al probador.

(...)

Me siento en el sofa de la sala, con mi laptop en mis muslos. La enciendo y reviso algunos correos. Pero uno en particular llama mi atención.

No puede ser.

Lo obro, y leeo de forma rápida para llegar al final del correo. Mi corazón se acelera a medida que llego al final. Suelto un chillido muy agudo cuando logro terminar de leerlo.