Capitulo 5

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El viaje a Seattle era largo, sin embargo a mí se me hizo bastante corto entre bromas y canciones. 

Al llegar era hora de comer así que buscamos algún restaurante. Le dije a Embry que le tocaba elegir ya que era casi su cumpleaños y él decidió ir a por un italiano. 

Ambos pedimos pasta para comer y después nos tomamos un café en la terraza ya que había que aprovechar el sol de la ciudad. 

La tarde se pasó entre tiendas. Compré el traje de surf que buscaba y Embry encontró algunas prendas que le gustaron, incluso yo le regalé una sudadera con la excusa de que probablemente acabaría siendo mía. 

Fuimos a los recreativos y estuvimos un tiempo jugando hasta que llegó la hora de volver a casa si queríamos llegar a tiempo para cenar.

Cuando metimos las bolsas en el coche mi móvil empezó a sonar debido a que estaba recibiendo una llamada. Le enseñé la pantalla del móvil a Embry donde se veía que quien llamaba era Jacob y arrancó en coche disponiéndose a salir del parking.

- Hola Jake. 

- Hola, Bella está conmigo en casa, ¿a que hora nos vemos? - preguntó mi amigo. 

- Pues .. - dije pensando y mirando mi reloj - ¿Te parece en cuarenta y cinco minutos en el aparcamiento de la cafetería? 

- ¿No paso por tu casa? 

- No, de hecho estamos en Seattle, acabamos de salir ahora. 

- Vale, nos vemos allí entonces. 

- Vale, hasta luego Jake - y colgué.

- ¿Qué quería? - me preguntó Embry a mi lado. 

- Saber a que hora nos vemos y dónde. 

- ¿También viene Bella al final? - asentí con la cabeza - Bien.

El viaje de vuelta se me hizo algo más largo, estaba cansada después de haber estado todo el día fuera y el sueño se estaba apoderando de mi. 

Embry puso su mano sobre mi pierna y el contacto de su piel con la mía hizo que me estremeciera. Le miré y el me miraba. Apretó un poco mi pierna y volvió a llevar su mano al volante con una sonrisa.

- ¿Sabes por qué estaba de buen humor esta mañana? - me dijo. 

- Pues no, ¿tiene que ver con Paul? 

- Para nada, resulta que anoche me desperté y pasó algo bastante gracioso - dijo intentando reprimir una risa. 

- ¿Que pasó? 

- Te movías mucho porque estabas soñando, y hablabas - hizo una pausa para mirarme. 

- ¿En serio? - reía nerviosa porque no me imaginaba la cantidad de tonterías que pude haber dicho, no me acordaba de ningún sueño de anoche - ¿Que decía? - pregunté con curiosidad. Embry volvió a mirarme rápido y cuando volvió la vista al frente me pareció notar un leve rubor en sus mejillas. 

- Decías mi nombre - se me borró la sonrisa y la suya aumento hasta soltar una carcajada. Yo no sabía donde meterme.

- No es verdad, te estas quedando conmigo - dije yo evitando su mirada y pasándome la mano por la frente eliminando algunas gotas de sudor que empezaban a aparecer como fruto del nerviosismo. 

- Claro que lo es, lo dijiste alto y claro, varias veces - él seguía riéndose. 

- Seguro que estaba teniendo una pesadilla, ¿de acuerdo? 

- No sé lo que estarías soñando, pero definitivamente me gustaría saberlo - soltó la ultima risa mientras yo me tapaba la cara con las manos haciendo la situación mas divertida para él. 

Innegable - Embry CallDonde viven las historias. Descúbrelo ahora