Mi Sol; Mateo Palacios.

dos

Mateo

entramos apresurados a su apartamento, le quitaba el vestido que tanto me gusta, besaba sus hombros mientras bajaba su sostén, no pude evitar sonreír cuando vi que era el conjunto que le regale

Mateo: vos no sabes lo mal que me pones- la recosté en la cama y quite mi campera, ambos estábamos completamente desnudos, nos separaban sus bragas, se las quite con delicadeza ella solo soltaba pequeños jadeos de excitación

Sol: hazme tuya, hazme gritar tu nombre- nada me ponía más que eso, hice justo lo que me pidió, movía mi cadera haciéndola pedir más.

Sol: mat..eo.. dios que bueno sos... mmm - le di un beso y disfrute de este maravilloso momento

Sol
estaba acostumbrada a amanecer sola, no pude evitar sonreír al recordar ayer, fue mágico.
un sonido me saco de mis pensamientos, provenía de la cocina, tomé una zapatilla y camine lento hacia la cocina

-La concha de tu hermana como quema está mierdaa- al entrar vi a Mateo con un puchero mirando su dedito

mateo: uhh, mala mía, quería sorprenderte con desayuno y que quedara todo cheto, pero no es para mí eso- dijo mirándome con carita de niño chiquito

Sol: No hace falta amor, ¿pedimos algo? da paja cocinar- salí de la cocina con una gran sonrisa, era un gran detalle que el quisiera hacerme el desayuno

Mateo: pedí hamburguesas, ¿ok? ok, yo también te amo- dijo saliendo a un lado de mi con el celu en la mano, solo reí

Mateo
me queme queriendo hacerme el cheto, la cocina no es pa mi.
estábamos desayunando hamburguesas mientras la veía hablar con entusiasmo sobre su nuevo trabajo

Mateo: ¿y no tienes nervios? o sea se que eres una kpa en esto, pero no sé, hasta los mejores en hacer lo que hacen se ponen nerviosos aveces- dije mirándola, ella se puso a pensar claramente no quería hacerla desconfiar

Sol: tengo nervios, pero no sé, algo me dice que todo saldrá bien- dijo mirándome con sus ojitos llenos de brillo

sisi, la verdad este fue de relleno,
pero se pondrá mejor, se los juro:)