Un pequeño pueblo lleno de fantasía, donde todo es posible y donde todos ocultan secretos.
Y donde la protagonista se enamora, eso es obvio, acompáñame en esta aventura
Él se marcho, no sin antes darme un beso en la frente. Yo no había venido a Blacklake para que mi vida fuese más complicada que antes, si no más fácil de llevar, pero parece ser el destino no lo quiere así.
Sólo quería abrazarlo y besarle hasta que nuestros cuerpos se hicieran viejos, pero era él quien lo hacía todo complicado. Esta vez había sido él quien me había rechazado, mientras yo me entregaba a él en cuerpo y alma. La verdad que estábamos yendo muy lejos, pero no me importaba, él había ocupado un espacio en mi corazón que nadie podría a ver llenado. Y su rechazo me dolía más que nada en el mundo. Estoy demasiado confundida para seguir pensando, así que me estiré en la cama y seguí leyendo el libro que últimamente me estaba encantado, al poco tiempo me quedé dormida.
"Sus brazos me abrazaban, rodeaba mi cintura mientras nos mirábamos a través de espejo en una habitación oscura, pero yo no sentía su cuerpo. Sí no que lo sentía muy lejos de mi, como si no pudiera llegar hasta él. Nuestros mundos son completamente diferentes. Y verlo allí en ese espejo abrazándome pero sin sentirlo hizo que se me cayeran unas cuantas lágrimas. Él me dio un beso en la mejilla, y yo de seguida me la toqué, pero no sentí nada. Y me giré para saber que era real, pero allí no había nada, solo una sala vacía. Volví a mirar al espejo pero él ya no estaba allí".
Me desperté, había sido un sueño, un terrible sueño. No me podía imaginar una vida sin sentir sus caricias, sin tocar su piel o saborear sus labios... Pero era bastante rencorosa, y tendría que venir él a hablar conmigo, aunque de seguro que no lo haría. Me conocía este tipo de chico, pues estaban en mi antiguo grupo de populares, y más a los capitanes.
Me di una ducha fría para despejarme, y sentir la helada agua me ayudó. Aunque me congele bastante y aún no estábamos en verano para hacer tal cosa. Me hice una coleta alta, ya que hoy tendría que entrenar con las animadoras, y me puse ropa cómoda para pasar el maldito día que me esperaba.
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Antes de salir por la puerta me pare a observarme en el espejo. Tenía más mofletes que hace una semanas. Y ya no tenía ese vientre casi plano, si no que tenia bastante grasa. Estar en las animadoras me hacía estar bien y en forma, pero desde que no entreno he perdido musculo y no se como voy hacer para volver a estar en forma en poco tiempo. Me fijé en mis pechos, habían crecido desde la última vez que me observé, lo cual no me gustaba nada. Siempre había sido una chica que pensaba que era mejor tener poco pecho, porque siempre he sido de tener bastante pecho.
Me arregle un poco el cabello y salí de la caseta. Hasta que vi a Axel con el coche, me saludó con la mano y me senté de copiloto.
El día en el instituto se había hecho muy largo, menos el primer ensayo de las animadoras. Cata me había puesto en la primera fila esperando que diera todo de mi, y así lo hice; hay rumores en los que se especula que le quiero robar la popularidad y el puesto de capitana, pero todo lo contrario, solo quiero volver a bailar y a lo mejor ganar una beca para mis estudios. Pues en mi antiguo puesto, como capitana, era más fácil que los ojeadores te descubrieran, pero ahora estando en segundo plano me tendría que esforzar mucho más y sobre todo entrenar duro.
En lo que llevaba de día todavía no había visto a Elián y estaba preocupada. A ver no quería hablar con él, pero si saber que se encontraba bien. Y hasta ahora no me había dado cuenta que no sabía nada de su vida, ni si quiera tengo su número, o se su apellido ni donde vive, mientras que él sabe bastantes cosas de mi...
Respecto a Jess, estaba colada por uno de los hermanos que toca la guitarra en su grupo de música, y lo pillo besándose con una chica. No esta enfadado con él, un poco sí, pero más esta triste y desilusionada. Me lo estuvo contando todo en la hora del almuerzo, mientras le daba consejos. Jess es una chica muy guapa, y podría conseguir a cualquier persona que se propusiera. Solo tiene que confiar más en si misma, y sobre todo darse a conocer porque es una persona maravillosa.
Y aquí estamos, Jess y yo saliendo por la puerta del instituto para volver a nuestras casas, yo a na vacía seguramente.
-Tía, ¿porque no te haces un tatuaje?- Nunca me imaginé con un tatuaje, yo me quedé extrañada por su pregunta.- No sé... Podría ser divertido, yo tengo muchos tatuajes y tu tienes la piel limpia.
-Ya, pero nunca lo había pensado.
-Los tatuajes son marcas en la piel que cuentan una historia, la historia que tu quieras contar. ¿Prefieres una historia en blanco, o con algo que contar?- nunca lo había pensado de esa forma, podría ser interesante...
- Y si decidiera hacerme un tatuaje... ¿Que podría hacerme?- ella me miró con cara de estar muy ilusionada por mir pregunta.
- Podría ser algo con lo que te identifiques, podrías comenzar por algo pequeño, ya que creo que este no va a ser tú único tatuaje.- Y de repente se me pasó por la cabeza... ¡Ya sé que tatuarme!
-¡Vamos!- le dije corriendo.- ¡Será una sorpresa...!
-¡Pero la tienda esta para el otro lado de esta calle!- me dijo mientras se reía.
Al entrar, me quedé petrificada, había un montón de piercings y máscaras por todos lados, y sobre todo un montón de cuadros con tatuajes en ellos.
Una chica, de cabello recogido nos atendió, mientras se quitaba los guantes. Me hizo pasar a un pequeño espacio con una camilla negra y una mesita auxiliar. Le expliqué lo que quería y me dijo que con una sesión sería suficiente. Me comenzó a tatuar en la parte derecha del pecho.
Para ser exactos solo tardó tres horas en hacerlo, pero me lo hizo precioso. Fui a enseñárselo a Jess, que se quedó asombrada.
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Una pequeña mariposa con una luna y un sol. Elián me hace sentir mariposas, pero los dos somos como la luna y el, somos muy diferentes a simple vista, yo tengo el cabello negro y los ojos marrón escuro, mientras que él es rubio con ojos azules.
-¿Qué significa?- me preguntó Jess mientras lo observaba de más de cerca.
-De la vida, del amor, de todo en realidad.- y le dije la verdad, pero no del todo.
-Es precioso... Pero creo que tiene un significado más oculto, pero te acepto la respuesta.
Después de salir de la tienda nos despedimos y quedamos para vernos al día siguiente, pues sería el día del concierto. Pero eso no es lo que más me preocupaba, sino Elián.
