Sentimiento Nacientes

carta entre escombros

Tengo un secreto que contarte, podrás tu conservarlo?
Tengo una verdad que expresarte, serás capaz de verla?
Tengo muchas cosas que decirte, enceradas en un frasco
Frasco que el más honorable esbirro estará guardando
En lo alto de esta tormentosa cumbre, que encierra
Los más puros tormentos de la mente humana.

Me despediré de estas sandeces, que espero encuentres
Y entiendas que abandonar siempre acarrea consecuencias,
Pero que más da? Si lo hecho, hecho ya está, y he decidido,
Incendiar aquél lúgubre lugar  en el cuál fui desquebrajado,
Como una bellísima ornamenta, que cae contra el suelo.

He aquí te escribo, y te confieso, que mi partida sera eterna
Como la desaparición de esta lúgubre y vieja mansión
Qué espero el día que vuelvas, encuentres ya desaparecida
Como a la persona que alguna vez hábito en ella.
La cual, si bien fui yo, al mismo tiempo fueron esas bestias
Bestias imaginarias y psicodélicas que adornaban paredes
Con sus bellos estruendos y horribles quejidos.

Me voy hacia un nuevo páramo, lleno de lienzos en blanco
en los cuales serán escritos los más hermosos versos
Que de este corazón recién germinado, nacerán día a día
y qué como ambición juvenil, llenarán de risas y colores
El lugar más desolado de las más hermosas mariposas
que enjuagadas en libertad, irán con el mismísimo Cupido
a intercambiar sus bellos encantos, por cuerpos humanos,
Siendo estos, los seres más dóciles de aquel nuevo universo