el viaje

cap 3 la casualidad

Al llegar la mañana ririka y Mary después de una larga caminata lograron localizar el sendero que las llevaría al pueblo que tanto estaban buscando.

' oh grandioso un letrero '

Pueblo nori aún kilómetro — la rubia reprochó apoyándose en el letrero — que calor hace

' al menos que esto haga feliz a ririka, ya me tiene arta con su anciedad y su tristeza '''

Mary esperaba alguna respuesta de parte de la peli blanca pero lo único que obtuvo fue un suspiro de parte de ella. Ririka siguió sin más su camino sin preocuparse en mirarla o mirar a su alrededor tan siquiera con la carreta y el burro que la seguía.

' si!!  definitivamente la golpiare '

Hey !!! Eso sí que no — Mary dió grandes pasos hacia ella, hasta tomarla del hombro, no le fue difícil ya que no iba tan rápido pero logró hacer que la viera. Aunque la rubia se topaba con la mirada más desoladora de todas algo que no entendía ya que creía que la plática que tuvieron antes de dormir la había escuchado — SABES QUE !!!! AAAHh!! — grito en su cara dejándola a ella atrás.

' maldita ririka !! '

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Al pasar los minutos Mary siguió maldiciendo por todo el camino, sola ya que no soportaba a ririka la dejo muy atrás de ella. Cada paso que ririka daba eran diez de la rubia pero ella por instantes miraba atrás evitando que la peli blanca choque miradas con ella.

' debería ayudarla '

La rubia miraba hacia ririka pero algo callo velozmente aún lado de ella.

' una flecha....... UNA FLECHA?!!!!  '

Entonces miró asustada a sus espaldas  desde un lugar alto como una muralla no muy lejos, un grupo de hombre apuntaban hacia ella

' este es el pueblo pero creí que era pacifico ''

Pero la chica salto haciendo ademanes hasta que uno de ellos seso los disparos con un ademan.

' debemos entrar antes de que cambien de opinión pero antes '

Apresúrate maldita sea — corrio a dónde ririka apenas se acercaba a ella. La rubia fue hacia atrás de la carreta a empujarla aún con un burro en frente hasta llegar lentamente a la entrada del lugar.

Bien perfecto llegamos vamos a entregar esto lo más rápido posible y después tú y yo nos vamos al carajo — Mary jalo la rienda de burro llevándose igual la carreta.

Perdida pero decidida llegó nada penosa a dónde una señora estaba sentada pelando manzanas.

Hola buenos días perdone la molestia — se inclino con una sonrisa en la cara —

Oh qué linda chica — inclino la cabeza —;en que te puedo ayudar ?

Ah vera lo que pasa es que tengo un pedido de heno para la casa igarashi pero no me dieron más referencias al respecto — señaló todo el lugar

Ha pues verás este pueblo no es muy grande apenas hay diez chozas hacia que te puedo decir con toda certeza que el lugar que buscas está a dos chozas justo atrás de mi — sonrió comiendo un pedacito de manzana

Muchas gracias — se inclino de nuevo siguiendo su camino

' dos chozas este pueblo es más grande que el nuestro creo que viajar es lo mío me ayuda mucho ''

Y la casa que buscaba estaba enfrente de ella. llena de máscaras  el lugar daba finta de ser un puesto que las vendía

Buenos días — la chica hablo en señal de algo

Ah! Buenos días buscas alguna máscara en especial ; tenemos de zorro de demonios o de lobos tu pregunta ......

Ah busco ala familia igarashi — miró hacia la carreta — llegó su orden de heno

El hombre algo triste miró para todas parte hasta que un joven salió de la casa de la anciana con la que antes había hablado

Oh!!  Akira podrías llamar a sayaka ella todavía podría estar dormida por favor hijo

Oh de inmediato — el joven salió corriendo.

Se hizo algo de tiempo pero ririka había llegado a dónde ella.

Valla valla con que llegaste — la rubia cruzo los brazos mirándola con cierto enojo

Si que alivio ya llegamos — la peli blanca sonrió forzadamente — no me lo tienes que decir

Oh se le ofrece una máscara — el hombre se refería está vez a ririka

No gracias — respondió cortante

Si si quiere !!— interrumpió la rubia acercándose al hombre

Oh cual quiere ? — decía este feliz

No tendrá algo con una gran sonrisa como para opacar esa cara — apunto ala peli blanca

Oh sí tengo una — saco de bajo de su mostrador una máscara blanca con una gran sonrisa y unos grandes ojos burlones color negro.

La rubia la tomo quitándose la de las manos al hombre y se dirigió a ririka para ponersela

Es perfecto — sonrió al verla

No lo es —  contesto quitándosela

Pues acostumbrate — la rubia dió un paso para pagarle al señor hasta que una joven de pelo negro se asomo por la puerta.

Está se quedó como petrificada al estar frente  alas jóvenes