✡Posesión

25

- Debes ser mas cuidadoso hyunjin

- Lo sé minnie y lo siento, siempre estas arreglando nuestros desastres.

Seungmin rió.

- Es mi trabajo, aunque a veces quisiera golpearlos por idiotas.

Hyunjin sonrió y la puerta se abrió

- Buenos días.

Un felix ya cambiado de ropa y con una pequeña, diminuta, pero existente sonrisa se hizo presente.

- Hola...

Dijo hyunjin cubriendo su cintura para evitar que felix viera las marcas.

- ¿Cómo están las heridas?

Hyunjin supo que de nada servia esconderlas e hizo un puchero.

- Bien lix, ya están casi sanas pero aun tiene algo de dolor.
Creo que lo mejor es que ustedes dos no se acerquen mucho por ahora, o por lo menos hasta que pase el enfrentamiento.

Hyunjin se sintió culpable, no podía debilitar a felix, eso podría ser contraproducente.
Seungmin salió del cuarto dejando la parejita a solas.

- ¿Te lastimé mucho?

Hyunjin negó con la cabeza.

- ¿Estas enojado?

Volvió a negar

- Lo siento, por lastimarte.

El pelinegro hizo un puchero ante las palabras de felix.
El vampiro sintió el impulso de abrazarlo pero se contuvo.

- Si.. lastimándome de esa manera puedo, sentirte de nuevo... No me importa que me lastimes.

- No sabes lo que dices hyunjin.

Felix se sentaba en la cama mientras era observado atentamente por el pelinegro.

- Seungmin tiene razón, debemos tratar de no estar muy cerca, al menos hasta que el enfrentamiento se lleve a cabo.

"no quiero"

Felix escuchaba los pensamientos del más alto sin poder evitar la ternura y las enormes ganas de volver a acercar sus labios.

- De todas maneras aunque pase el enfrentamiento, tu no me vas a dejar acercarme a ti ¿verdad?

"Por favor solo tómame, te necesito tanto"

Felix se levantó y caminó hacia el sofá sentándose en el suelo en frente de hyunjin.

- Ayer experimentaste solo una pizca de lo que te puede pasar si te tomo.
¿Aún quieres que eso pase?

"si con todas mis fuerzas"

Hyunjin solo asintió

- ¿Lo has pensado bien? tienes la oportunidad de irte y tener una vida relativamente normal, viajar, conocer, enamorarte, casarte, tener hijos, una familia.

Hyunjin entre cerró la mirada, y sus ojos penetraron los del vampiro haciendo que este se sintiera curioso, se inclino un poco hacia delante haciendo la distancia mas corta y asegurándose de que felix se enfocara solo en él.

- Puedo viajar contigo, puedo conocer tu mundo sin dejar de conocer el mío, ya tengo una familia que sabe cual es mi destino y ahora que conocí a los chicos tengo otra familia, que me hace sentir más amado y aceptado que nunca. 
Nunca he querido tener hijos porque no creo que tenga la paciencia para hacerlo, pero en caso que quisiera, podemos adoptar y...
No se si no te ha quedado claro aún pero... no me hace falta alejarme de ti para enamorarme, ya lo estoy.

- Felix bajó su mirada sintiendo el nerviosismo llenar su cuerpo y mente, la mirada de hyunjin, su olor, su sangre, sus provocativos labios, el coqueteo y la sonrisa que tenia en ese momento harían que de nuevo mandase la cordura a la mierda por él.

- Te doy mi palabra... 

Dijo felix cuando se levantó y caminó hacia afuera de la habitación al sentir que las cosas se iban a salir de control, pero antes miró a hyunjin.

- Que después del enfrentamiento, voy a acabar con la agonía de ambos.

- ¿Me tomarás?

Felix asintió

Hyunjin sonrió ampliamente viendo a felix salir.

"lo prometiste felix"

Y felix salió con una sonrisa en su rostro escuchando los murmullos de la mente de su posesión, dándose por vencido.

--☆--

En uno de los salones de química un vampiro y una posesión estaban sentados en el piso recostados a una mesa, algo cansados, compartiendo dulces toques, pequeños besos y una conexión  tan fuerte como la fuerza de atracción entre ellos.

- ¿Estas preocupado por felix?

Jisung asintió

- ¿Crees que va a perder el combate?

Jisung no dijo nada.

- Minho, si algo pasara y tuviésemos que alejarnos, quiero que hagas tu vida lo mas normal posible sin mi.

Minho tomó el rostro de jisung quien estaba en medio de sus piernas y lo giro un poco para que las miradas se encontraran.

- Se que no dejaras que nada te pase, porque me prometiste que me matarías tu mismo antes de dejarme aquí sin ti.
Y espero que cumplas tu promesa.

El vampiro volvió a besar de forma romántica y delicada al humano abrazado a su cintura mientras sentía las caricias de minho en su cuello.
Pero en medio del beso los pensamientos del más alto viajaban hacia la duda de lo que habría visto jisung con su habilidad, porque sabia que el vampiro estaba inquieto sobre el futuro y eso llenaba de miedo a minho, no quería perder lo que había empezado a amar.